El boicot a Tesla y los aranceles a los coches chinos reviven la venta de eléctricos 'made in' Europa

Un vehículo en un punto de carga en una electrolinera, a 18 de diciembre de 2023, en Lugo, Galicia.

El pasado mes de octubre Bruselas apostó por una jugada arriesgada. Decidió —tras una tensa negociación entre los 27 países— aprobar unos aranceles muy agresivos sobre los coches eléctricos fabricados en China para proteger a las marcas europeas. Pocos meses después y sin que estuviese planeado, la relación de Elon Musk con la Casa Blanca ha provocado el hundimiento de las ventas de Tesla en la Unión Europea. Estos dos movimientos combinados han logrado que las ventas de turismos eléctricos (conocidos como BEV) se hayan desplazado rápidamente hacia las marcas autóctonas, con crecimientos de las ventas que superan el 200%.

En los dos primeros meses de 2025, la cuota de mercado de los fabricantes europeos de eléctricos, liderados por Volkswagen, ha crecido hasta el 66,4%, frente al 55% que tenían en enero y febrero de 2024. También han disparado sus ventas totales un 58%, hasta superar los 210.000 turismos en los dos primeros meses del año. El principal factor es el desplome de las ventas de Tesla, el vendedor número uno de coches de baterías en Europa, que ha perdido un 44% de las matriculaciones en el último año. Los datos son de la consultora Schmidt Automotive Research, y corresponden a las ventas de Europa occidental, Noruega, Suiza, Islandia y Reino Unido.

Paralelamente, las ventas de eléctricos chinos han caído en este periodo un 2,2% y su cuota de mercado ha pasado del 10,3% en los dos primeros meses de 2024 al 7,7% en 2025. El motivo son los aranceles que entraron en vigor el pasado noviembre y que incluyen un gravamen del 17% para BYD, un 18,8% para Geely (Polestar, Smart) y un 35,3% para SAIC (MG), entre otras marcas. A estas cifras hay que sumar el arancel base del 10% que ya tenían previamente.

La marca que más los ha sufrido ha sido MG, que ha hundido sus ventas en Europa un 53% en estos doce meses y ha pasado de ser la marca líder indiscutible de China al segundo puesto, superada ahora por BYD. Smart, que ahora fabrica coches eléctricos en China diseñados por Mercedes Benz, también ha perdido un 53% de su mercado europeo. Aun así, algunas marcas chinas han crecido en la adversidad, como Polestar (+103%) y BYD (+81%), que han compensado los aranceles con el rápido despliegue que llevaron a cabo en 2024 por Europa.

Matthias Schmidt, director de la empresa de Schmidt Automotive, explica a infoLibre que, los aranceles sobre coches 100% eléctricos chinos han provocado una paradoja: el movimiento hacia los combustibles fósiles. "Los fabricantes chinos se están centrando en exportar coches que no sean BEV a Europa, como coches de combustión, híbridos e híbridos enchufables", explica. De hecho, las ventas de estos tres tipos de turismos han crecido un 55%, hasta rozar los 40.000 coches.

Mientras la entrada de eléctricos foráneos se ha recortado, los fabricantes europeos han tomado ese espacio y ya representan dos tercios del mercado interno, como pretendía la Comisión Europea y algunos países, especialmente Francia. El Grupo Volkswagen ha disparado sus ventas de coches BEV un 124% desde principios de 2024, especialmente las de Volkswagen, que ha cuadruplicado sus matriculaciones BEV en Europa occidental. También han arrasado Kia, Renault, Cupra, Citroën, Opel, Mini o Škoda, con ventas que suben entre un 50% y un 400% de un año para otro.

Los eléctricos, ahora más populares

Según los últimos datos disponibles de ACEA, la patronal europea de fabricantes de coches, el interés general por los turismos 100% eléctricos ha crecido en todo el continente y vive uno de sus mejores momentos. En enero y febrero representaron el 15,2% de las ventas totales de coches en la Unión, frente al 11,5% del mismo periodo de 2024, y alcanzaron las 255.000 unidades. También subieron con fuerza (+18,7%) durante esos dos meses las matriculaciones de coches híbridos, aunque se resintieron las de híbridos enchufables (-5%). Como consecuencia del auge eléctrico, los turismos de combustión perdieron un 20,5% de sus ventas, hasta los 490.000 vehículos.

La resistencia anti-Trump se organiza para boicotear Tesla en Estados Unidos

La resistencia anti-Trump se organiza para boicotear Tesla en Estados Unidos

Las malas ventas de Tesla en Europa probablemente se extenderán en los próximos meses debido a la amistad de Elon Musk, el fundador de la marca, con el presidente Donald J. Trump. No es descartable que además la Unión Europa imponga aranceles en los próximos meses a los vehículos estadounidenses en represalia a las nuevas tasas aduaneras de la Casa Blanca, castigando todavía más a Tesla. La Comisión Europa ha paralizado durante 90 días los aranceles que tenía preparados la semana pasada, donde se incluían piezas de vehículos, pero Trump no ha retirado su 25% de aranceles al aluminio y a los coches europeos —que están fuera de los llamados aranceles recíprocos, también paralizados— y Bruselas podría replicarlos si las negociaciones de las próximas semanas con EEUU no son fructíferas.

Donde sí podría haber cambios es en los aranceles sobre los eléctricos chinos, que apenas tienen cinco meses de vigencia. La agencia Reuters publicó el jueves pasado que la Comisión Europea está ya negociando con China para sustituir esas tasas aduaneras por un sistema de precios mínimos en los vehículos que sea menos agresivo para facilitar la entrada de vehículos no contaminantes a precios accesibles. En todo caso, Maros Sefcovic, comisario europeo de Comercio, dijo a principios de abril que estos pactos serán "igual de efectivos y exigibles que los aranceles", puesto que la Comisión ha demostrado que estas compañías chinas han disfrutado durante años de ayudas públicas que suponen una competencia desleal y ahora toca compensar ese desajuste.

Alemania y España fueron algunos de los países que en su día se opusieron al establecimiento de los aranceles por miedo a que China impusiese contramedidas como aranceles a coches europeos o productos agrícolas. Al mismo tiempo, el Gobierno español lleva meses tratando de convencer a empresarios y políticos chinos para que inviertan en España aprovechando el auge de las energías renovables. El fabricante de baterías chino CATL aprobó de hecho en diciembre, junto a su socio holandés Stellantis, levantar una fábrica de baterías en Figueruelas (Zaragoza) El acercamiento de Europa a China en las últimas semanas también ha crecido en vista de que Trump ha dejado de ser un socio comercial fiable.

Más sobre este tema
stats