La Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) ha tardado medio año en comprobar que lo que sucedió a finales de 2013 en el mercado eléctrico fueron algo más que "circunstancias atípicas". El supervisor ha abierto un expediente a Iberdrola por posible "manipulación fraudulenta" de los precios. Aunque el organismo tiene 18 meses para decidir si impone una multa que podría llegar a los 30 millones de euros, la apertura del expediente es muy significativa. Da la razón a quienes denuncian desde hace tiempo que el mercado mayorista eléctrico, donde se cruzan oferta y demanda y se fijan los precios del kilovatio, puede estar manipulado.
Iberdrola negó en un comunicado haber manipulado los precios ofertados en el mercado de generación, pero admitió que el procedimiento sancionador afecta a las ofertas realizadas por determinadas instalaciones de producción hidroeléctrica situadas en las cuencas de los ríos Duero, Tajo y Sil entre el 30 de noviembre y el 23 de diciembre de 2013.
A falta de más detalles, el expediente de Competencia apunta a irregularidades cometidas en el mercado mayorista eléctrico "pool" y no en la subasta trimestral Cesur del 19 de diciembre. Esta subasta, en la que se basaba el precio de la luz para la mayoría de los consumidores (los acogidos a la tarifa regulada) fue anulada porque su resultado obligaba a subir la luz en enero un 11%. De la Cesur, el ministro José Manuel Soria dijo que había registrado "burdas manipulaciones". Fuentes de Iberdrola declinaron hacer valoraciones hasta conocer más detalles del expediente.
Las pesquisas, por lo tanto, se centran en qué sucedió en el mercado mayorista de la electricidad en los días y semanas previas a la subasta anulada el 19 de diciembre. La CNMC ha examinado qué sucedió con el gas y con las centrales hidroeléctricas, un área en la que Iberdrola domina el mercado. En ambos casos, según fuentes empresariales y de la Administración, se detectaron movimientos que llamaron la atención.
Tensión en la demanda
En el gas, sostienen las fuentes consultadas, se registró cierta tensión en la demanda en el mercado nacional. Pero las previsiones de demanda eran bajas semanas atrás, la caída de precios se daba por segura y algunas comercializadoras habrían vendido el gas comprometido en contratos take or pay (tómalo o paga) en mercados más rentables que el español como los de India o Japón.
En la gestión de las centrales hidroeléctricas, Competencia ha analizado si se han manejado de forma ajustada a la demanda o alguna compañía aprovechó el tirón para cobrar la generación con agua a precio de oro, en el llamado "mercado de restricciones".
En ese espacio, la empresa no ofrece electricidad a un precio determinado sino que recibe la llamada del operador del mercado para que aporte la capacidad de que disponga en ese momento. Eso sí, la empresa cobra el kilovatio al precio más alto. En determinadas circunstancias,puede ser una jugada segura y con un beneficio muy alto.
Subida sostenida
Iberdrola ganó en seis meses 1.503 millones de euros
La subida sostenida de precios comenzó a finales de 2013 poco después de que las compañías conocieran la decisión de Montoro de cortar el grifo presupuestario al sector. El domingo 8 de diciembre, el precio del Megawatio hora superó los 93 euros, el más elevado en 11 años.
Pero el problema venía de atrás, desde el viernes 29 de noviembre, los precios de la electricidad en el mercado diario y en el de futuros se habían disparado. hasta tal punto que si Industria no hubiera decidido poner patas arriba todo el sistema, la subida de enero hubiera sido insoportable para muchos hogares. Desde 2006, las subidas en la factura superan el 70%.
Pese a la agitación y las advertencias, el Ministerio de Industria tardó en reaccionar. Pese a las reiteradas críticas de analistas y comercializadores independientes, Industria solo solicitó que entrara en acción Competencia al conocer que grandes empresas, siderúrgicas y cementeras, habían paralizado total o parcialmente 21 plantas por las importantes subidas en los precios del kilovatio.
La Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) ha tardado medio año en comprobar que lo que sucedió a finales de 2013 en el mercado eléctrico fueron algo más que "circunstancias atípicas". El supervisor ha abierto un expediente a Iberdrola por posible "manipulación fraudulenta" de los precios. Aunque el organismo tiene 18 meses para decidir si impone una multa que podría llegar a los 30 millones de euros, la apertura del expediente es muy significativa. Da la razón a quienes denuncian desde hace tiempo que el mercado mayorista eléctrico, donde se cruzan oferta y demanda y se fijan los precios del kilovatio, puede estar manipulado.