Es el oro líquido y base de la cocina española, por lo que la escalada de precios que ha experimentado el aceite de oliva en los últimos meses impacta directamente en el bolsillo y en la alimentación de las familias. En ese contexto, Facua-Consumidores en Acción ha denunciado ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) a Carrefour, Alcampo, Aldi, Dia, Eroski, Hipercor, Lidl y Mercadona para que investigue si llevan tres meses vendiendo las botellas y garrafas de aceite de su marca blanca al mismo precio, o con una leve variación en algunos casos que no supera 1 céntimo. En otras palabras, que analice si las ocho grandes cadenas de supermercados se han comportado como un cártel y han pactado precios.
La organización de consumidores ha detectado que las mencionadas marcas han subido en noviembre un 9% las botellas de un litro de aceite de oliva virgen extra de sus marcas blancas, tras tres meses con precios similares. Un alza que no respondería a incrementos de precios en origen y evidenciarían una "estrategia paralela de fijación de precios".
De acuerdo al análisis de Facua, la botella de un litro de aceite de oliva virgen extra de marca propia costaba, en todas las cadenas puestas en el punto de mira, 9,25 euros a principios de noviembre y entre 8,49 y 8,50 euros, en función del establecimiento, en septiembre y octubre. La botella de 750 mililitros (ml), por ejemplo, hace dos meses todos los supermercados la vendían a 7,15 euros. Hoy unos la comercializan a 7,59 euros y otras a 7,60.
En el caso de la garrafa de tres litros, de acuerdo al trabajo realizado por la organización de consumidores, habría pasado de costar entre 24,99 y 25 euros en octubre a entre 27,59 y 27,60 en la actualidad en las cinco cadenas donde se oferta en ese formato.
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Por lo que respecta a los aceites de oliva virgen, los seis grandes supermercados que ofrecen esta variedad en la modalidad de botellas de un litro la venden a 8,25 euros y las cuatro cadenas que también venden garrafas de tres litros lo hacen a 24,59 o 24,60 euros.
Incrementos ilegales en los márgenes
Facua entiende que, más allá de la existencia de una posible práctica colusoria en los precios contraria a la ley de defensa de la competencia, las elevaciones paralelas en las que habrían incurrido las cadenas de supermercados en sus propias marcas de aceite de oliva pueden representar también incrementos ilegales en los márgenes de beneficio.
En ese sentido, desde la entidad recuerdan que el real decreto-ley por el que se aprobó la rebaja del IVA vigente hasta final de año, en el caso de los aceites del 10% al 5%, prohíbe en su artículo 72 subidas de márgenes en los alimentos afectados por la medida. Por este motivo, la organización ha denunciado lo sucedido en establecimientos de Carrefour, Alcampo, Aldi, Dia, Eroski, Hipercor, Lidl y Mercadona también ante el Ministerio de Consumo del Gobierno, al margen de la CNMC.
Es el oro líquido y base de la cocina española, por lo que la escalada de precios que ha experimentado el aceite de oliva en los últimos meses impacta directamente en el bolsillo y en la alimentación de las familias. En ese contexto, Facua-Consumidores en Acción ha denunciado ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) a Carrefour, Alcampo, Aldi, Dia, Eroski, Hipercor, Lidl y Mercadona para que investigue si llevan tres meses vendiendo las botellas y garrafas de aceite de su marca blanca al mismo precio, o con una leve variación en algunos casos que no supera 1 céntimo. En otras palabras, que analice si las ocho grandes cadenas de supermercados se han comportado como un cártel y han pactado precios.