El Gobierno ha anunciado una reducción del 4% en la parte regulada del recibo de la luz que se traducirá en una rebaja del 2,1% –el 2,2% para el consumo doméstico– en la factura eléctrica. La vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, y el ministro de Industria, José Manuel Soria, aseguran que la medida es posible “gracias a la reforma energética”. “Es un efecto directo, claro y positivo”, ha proclamado Soria. Ese 2,2% equivale a una bajada de 1,5 euros al mes para un consumidor medio. Claro que el descuento se carga sobre un recibo que ha subido en el último año un 4,2%, 3,2 euros, y hasta un 5,4% sólo en junio respecto al mes anterior, cuatro euros.
El cálculo lo ha hecho la asociación de consumidores Facua, que cifra en 78,51 euros la factura de la luz de un usuario medio el pasado mes de junio. Según explica, el kW/h de energía consumida ha subido un 5,7% en un año, mientras el kW de potencia contratada permanece invariable desde febrero de 2014, cuando se disparó un 17,9%.
Datos parecidos aporta la agencia Europa Press que, utilizando el simulador de factura eléctrica de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), calcula en un 5,2% la subida del recibo de la luz en junio.
La factura eléctrica se compone de los peajes –los costes de transporte distribución y gestión de la electricidad, las primas a las renovables y el déficit tarifario–, que fija anualmente el Ministerio de Industria; el consumo, que es variable, y los impuestos. Los peajes constituyen un 41% del recibo; el consumo, otro 37,5% y los impuestos, un 21,5%. El pasado enero, el Gobierno congeló los peajes y ahora incluso los rebaja. Según el ministro de Industria, la reforma energética ha eliminado el déficit de tarifa –la diferencia entre los ingresos que las eléctricas perciben de los consumidores y los costes del suministro– “y generar un superávit en 2015” que permite ahora “disminuir el precio para el consumidor”.
Según el informe sobre evolución de precios energéticos en España en 2014, elaborado por el propio ministerio, la electricidad ha subido un 7,2% de media anual para el consumidor doméstico entre 2004 y 2012. En 2009 se disparó un 8,4%, un 13,4% en 2011 y otro 9% en 2012.
Facua culpa de las “desproporcionadas tarifas eléctricas” a la falta de una “intervención contundente” del Gobierno para que aquéllas “se establezcan sobre las bases de los costes reales de la generación energética y los usuarios dejen de ser víctimas de prácticas oligopolísticas”. La asociación también critica el “oscuro sistema de tarifas” eléctricas, que impide a los consumidores estar debidamente informados y, por tanto, impugnarlas si las consideran abusivas.
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Facturación por horas
El pasado día 1 entró en funcionamiento el nuevo sistema de facturación por horas para los usuarios que tengan contadores digitales –unos 10 millones–, potencias contratadas inferiores a 10 kW/h –familias y pymes– y la tarifa pvpc –precio voluntario al pequeño consumidor– o la tarifa oficial.
A estos usuarios las eléctricas les facturarán por horas, y cada hora a un precio distinto. Según la época del año y la demanda, la variación puede alcanzar el 10%. La teoría es que el cliente conozca qué hora del día es más barata para adaptar su consumo y, por tanto, abaratar el recibo. En la práctica, replica Facua, el nuevo sistema de facturación subirá el recibo, porque “se pagará más cara la electricidad en los horarios con mayores niveles de consumo”.
El Gobierno ha anunciado una reducción del 4% en la parte regulada del recibo de la luz que se traducirá en una rebaja del 2,1% –el 2,2% para el consumo doméstico– en la factura eléctrica. La vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, y el ministro de Industria, José Manuel Soria, aseguran que la medida es posible “gracias a la reforma energética”. “Es un efecto directo, claro y positivo”, ha proclamado Soria. Ese 2,2% equivale a una bajada de 1,5 euros al mes para un consumidor medio. Claro que el descuento se carga sobre un recibo que ha subido en el último año un 4,2%, 3,2 euros, y hasta un 5,4% sólo en junio respecto al mes anterior, cuatro euros.