No basta con reformar, hay que reconstruir. La secretaria de Política Económica y Empleo del PSOE, Inmaculada Rodriguez Piñero, y el diputado de IU, Gaspar Llamazares, defendieron esta idea en un debate sobre fiscalidad organizado por Economistas Frente a la Crisis.
¿Por qué no basta con reformar? Porque el país tiene un problema pendiente desde el inicio de la democracia, cuya persistencia obliga a cambios profundos: un fraude rampante que nunca ha sido una prioridad.. La prueba del desinterés: los medios de la Agencia Tributaria, que son insuficientes.
“Se han hecho esfuerzos” explicó Rodríguez Piñero “pero han sido insuficientes”. Lo prueban los datos. La Agencia Tributaria cuenta con el 0,1% del PIB para desarrollar su labor, la cuarta parte de lo que dedica Francia o la quinta de lo que dedica Holanda a sus respectivas agencias. España cuenta con un técnico fiscal por cada 2.000 habitantes, frente a 1 por cada 700 habitantes en Francia o 1 por cada 800 en Holanda.
Son medios insuficientes, pero hay también un fallo de modelo. “La asignatura pendiente” sostuvo Llamazares “es el fraude, en un país en el que el espejismo especulador provocó, además, la deconstrucción del sistema fiscal, alentando el desarrollo de impuestos indirectos ligados a la especulación inmobiliaria”.
En España, un país con ingresos insuficientes en un contexto de caída del PIB y con una presión fiscal ocho puntos por debajo de la media de la UE, necesita acercar el nivel de recaudación a la media europea y tender hacia la equidad.
Tanto Llamazares como Rodríguez Piñero destacaron que la recaudación recae, en cerca de un 90% en las rentas del trabajo medias y bajas, mientras que las rentas del capital y de las empresas sólo aportan al conjunto el 10% restante. “La mitad de la recaudación recae” aseguró el diputado de IU “sobre quienes ingresan al año entre 30.000 y 60.000 euros” y en el impuesto de sociedades, con tipos nominales del 30%, “en términos reales no llegan al 9%”.
Propuesta socialista
La propuesta socialista concreta para recaudar los 40.000 millones que nos separan de la media de recaudación europea (4% PIB): Impuesto único de renta y riqueza (integración del IRPF e Impuesto de Patrimonio en una figura tributaria única); equiparación de la tributación de rentas de capital y de rentas del trabajo; revisión de las SICAV; reintroducción del impuesto de donaciones y sucesiones; tipo efectivo mínimo del 15% sobre el beneficio contable para las empresas y revisión de deducciones.
Para la banca: dos nuevos impuestos que ayuden a sufragar el coste de la crisis. La guinda: una oficina integral de lucha contra el gran fraude y un plan trianual de lucha contra el fraude.
Las deducciones fiscales reducen los ingresos del Estado en 38.000 millones
Además, un desafío a los bufetes “maximizadores” de beneficios fiscales vía ingeniería: una Ley general Tributaria Anual que permita a la Administración, al menos, no ir siempre por detrás de los expertos en esquivar al fisco.
PSOE e IU comparten la necesidad de acabar con los paraísos fiscales. “El PSOE” sostiene Rodriguez Piñero “defiende la eliminación de la licencia de actividad para quellas entidades que amparen la actividad en paraísos”.
Las recetas fiscales de IU son también contundentes: con el combate contra el fraude como eje, la formación defiende una estructura más profesional en la Agencia Tributaria; la revisión en profundidad del impuesto de sociedades para acabar con la maraña de deducciones que dejan el tipo real que pagan las empresas en menos del 9%; incorporar al IRPF plusvalías y otros intereses; recuperar el impuesto de patrimonio, sucesiones y donaciones; una fiscalidad verde e implantar un impuesto a las transacciones financieras.
No basta con reformar, hay que reconstruir. La secretaria de Política Económica y Empleo del PSOE, Inmaculada Rodriguez Piñero, y el diputado de IU, Gaspar Llamazares, defendieron esta idea en un debate sobre fiscalidad organizado por Economistas Frente a la Crisis.