Renfe emplea a decenas de maquinistas con contratos de obra amparados por Hacienda

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El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, guardián de un paupérrimo Tesoro, introdujo en la Ley de Presupuestos del Estado 2014 un tapón en forma de artículo (35). El tapón impide la contratación de nuevo personal por el sector público "salvo en casos excepcionales y para cubrir necesidades urgentes e inaplazables, en los cuales podrán llevar a cabo contrataciones temporales".

El artículo trata de evitar "alegrías" en la contratación de personal por ministerios, organismos autónomos y agencias estatales. Entre las entidades que han decidido utilizar ese tapón de Montoro está Renfe. "El Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas", explica una portavoz del departamento, "aprueba cupos de contratación temporal cuando se justifica su necesidad y el organismo autorizado los distribuye". 

La entidad pública empresarial, adscrita al Ministerio de Fomento, está incorporando decenas de maquinistas -34 según fuentes sindicales- mediante contratos temporales de obra y servicio. El sindicato de maquinistas SEMAF sostiene que esa fórmula de contratación, que afecta directamente a un colectivo profesional de enorme responsabilidad dentro de la estructura de Renfe, puede además vulnerar la legislación vigente "pues no se da la causalidad de obra o servicio". En este punto, el Ministerio de Hacienda precisa que el departamento  "no puede saber si los contratos (de obra y servicio) autorizados son para maquinistas o para otros trabajadores".

Limitación temporal

El contrato por obra, según la definición del Ministerio de Empleo, se concierta para la realización de una obra o prestación de un servicio, con una ejecución limitada en el tiempo pero de duración incierta. Los contratos por obra y servicio no pueden exceder de tres años.

El secretario general del Sindicato Español de Maquinistas y Ayudantes Ferroviarios (SEMAF), Juan Jesús García Fraile, no tiene duda alguna de que la norma que aplica Renfe "impide contrataciones necesarias de personal para puestos de trabajo que llevan desarrollándose 30 años y que van a ser necesarios en los próximos 30. En esa tareas, las contrataciones deben ser indefinidas", remacha.

En concreto, la oferta de empleo del grupo que preside Julio Gómez Pomar pretende cubrir "en régimen de contratación temporal, 30 puestos de Maquinista de Entrada (serán 34 finalmente), 10 de los cuales requieren para su desempeño un nivel B1 o superior de idioma francés".

Fuerte malestar

La convocatoria ha provocado un fuerte malestar entre los sindicatos, especialmente en el de maquinistas en un momento tenso. A finales del mes de junio, el SEMAF lanzó una seria adverencia a la dirección de Renfe. En una carta dirigida al director general de Seguridad, Organización y Recursos Humanos, Cecilio Gómez-Comino, el sindicato expresaba "su más absoluto desacuerdo con el tipo de contratación establecido en la convocatoria". "Le instamos", concluía la carta, a "modificar la modalidad del contrato en dicha convocatoria, reservándonos, en caso contrario, la adopción de las medidas oportunas".

Los contratos por obra para un colectivo como el de los maquinistas enturbia la relativa calma en las relaciones entre la dirección de la empresa y los sindicatos. Esa calma propició el acuerdo en el ERE voluntario que la empresa presentó en enero para el 4% de la plantilla (600 trabajadores). Finalmente, los sindicatos UGT, CC OO y SEMAF pactaron la salida voluntaria de 500 empleados a lo largo de 2014.

Los sindicatos consideran que tanto Renfe (15.000 empleados) como el administrador de infraestructuras ferroviarias Adif (13.000 trabajadores) tienen plantillas excesivamente reducidas en comparación con los ferrocarriles europeos.El sindicato CC OO ha propuesto para paliar la situación la contratación de 5.560 personas para Adif y de 1.139 personas para Renfe.

Separados por un abismo

Renfe cifra en un 0,75% el seguimiento de la huelga y CGT lo eleva hasta el 70%

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El abismo entre las demandas de los sindicatos y los planteamientos de reducción de plantilla y movilidad en Adif (y en Renfe) han desembocado en la convocatoria de una huelga del personal del gestor Adif desde la una de la noche del 31 de julio hasta las 23.00 horas del 1 de agosto.

El comité, formado por CC OO, UGT, CGT, SF (Sindicato Ferroviario) y SCF (Sindicato de Circulación Ferroviaria), convocó la huelga por unanimidad. Acusan  a la empresa de falta de voluntad negociadora y nula sensibilidad para solucionar la situación de los más de 1.000 trabajadores que prestan servicio en el canal de venta, con un futuro por definir en un contexto de inminente liberalización.

InfoLibre trató de obtener la versión de Renfe con múltiples llamadas a lo largo del día. No hubo contestación.

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, guardián de un paupérrimo Tesoro, introdujo en la Ley de Presupuestos del Estado 2014 un tapón en forma de artículo (35). El tapón impide la contratación de nuevo personal por el sector público "salvo en casos excepcionales y para cubrir necesidades urgentes e inaplazables, en los cuales podrán llevar a cabo contrataciones temporales".

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