El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha dicho este viernes que espera una "respuesta global firme" de las primeras potencias mundiales tras el presunto ataque ruso a la estación de tren de la ciudad ucraniana de Kramatorsk, en la región de Donestk.
"Al igual que la masacre en Bucha, como muchos otros crímenes de guerra rusos, el ataque con misiles en Kramatorsk debe ser uno de los cargos en los tribunales (internacionales), lo que seguramente sucederá", ha asegurado el presidente ucraniano en su discurso vespertino, según un comunicado de la Presidencia.
Zelenski ha sostenido que se realizará un esfuerzo a nivel mundial para establecer lo ocurrido "minuto a minuto" durante la invasión de rusa a Ucrania. "Quién hizo qué, quién dio las órdenes. De dónde salió el misil, quién lo llevaba, quién dio la orden y cómo se coordinó el ataque", ha añadido el mandatario, advirtiendo de que "la responsabilidad es inevitable".
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha pedido este sábado "unidad" para detener la guerra y ayudar a Ucrania a hacer frente a la "terrible" emergencia humanitaria que vive.
"Tenemos que dar la cara por Ucrania, se trata de solidaridad y también de no quedarse quieto ante la guerra", ha reivindicado Sánchez en su intervención en el evento Stand up for Ukraine organizado por Global Citizen para garantizar contribuciones a la respuesta a la crisis de refugiados.
Sánchez ha recordado, en este sentido, que el Gobierno de España ha destinado 31 millones de euros en ayuda humanitaria a Ucrania, la "mayor cantidad que ha dedicado a un solo país", ha subrayado.
El primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, se ha reunido con el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, en una visita sorpresa del mandatario británico al país.
La Embajada ucraniana en Londres ha publicado este sábado en Twitter una foto del encuentro entre ambos líderes, a la espera de más detalles sobre el momento exacto y el contenido de la reunión. La imagen iba acompañada de un breve mensaje: "Sorpresa".
El máximo responsable diplomático de la Unión Europea, Josep Borrell, ha anunciado una reunión este domingo con la Fiscalía del Tribunal Penal Internacional para estudiar una investigación de posibles crímenes de guerra rusos durante la invasión de Ucrania.
Borrell, de visita en Ucrania, donde se ha reunido con el presidente, Volodimir Zelenski, ha denunciado el "brutal ataque de Rusia" cometido el viernes contra la estación de tren de Kramatorsk, que se ha saldado con medio centenar de muertos y un centenar de heridos.
El bombardeo ruso "contra civiles indefensos en Kramatorsk nuevamente muestra la total falta de respeto del Kremlin por la vida humana y solo aumentará nuestro apoyo a Ucrania", ha hecho saber en Twitter.
Más de 1.700 civiles ucranianos han muerto y más de 2.300 han resultado heridos como consecuencia de la invasión rusa de Ucrania, según el último balance actualizado del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, publicado este sábado.
"Desde las 4.00 horas del 24 de febrero, cuando comenzó el ataque armado de la Federación Rusa contra Ucrania, hasta las 0.00 horas del 8 de abril, el Alto Comisionado ha registrado 3.893 bajas civiles en Ucrania: 1.766 muertos y 2.383 heridos", según el informe.
El Ejército ucraniano ha informado este sábado del descubrimiento de una fosa común con soldados rusos en Viljivka, a las afueras de Járkov.
"Finalmente queda destruido el mito de que los rusos no dejan atrás a sus muertos. Durante la limpieza de la localidad de Viljivka, cerca de Járkov, se ha descubierto una fosa común de soldados ocupantes", ha informado el Departamento de Comunicación Estratégica de las Fuerzas Armadas ucranianas a través de un mensaje publicado en Facebook.
El Gobierno ucraniano ha denunciado este sábado que más de 15.000 personas se encuentran desparecidas y que más de una veintena de hospitales han sido destruidos desde el comienzo de la invasión rusa del país.
La cifra de desaparecidos ha sido anunciada por la Defensora del Pueblo, Ludmila Denisova, en comentarios recogidos por Ukrinform. "Hemos contado más de 15.000 casos con nombres identificados y el último lugar donde fueron vistos", ha indicado.
Asimismo, el ministro de Salud, Viktor Liashko, ha denunciado que los ataques rusos han destruido 307 centros médicos y destruido 21 hospitales desde el comienzo de la invasión, el 24 de febrero. "Estos hospitales no se pueden reconstruir y habrá que construir otros nuevos en su lugar", ha declarado en comentarios también recogidos por Ukrinform.
Las fuerzas militares rusas que controlaron durante más de un mes la región de la central nuclear de Chernóbil penetraron sin apenas precauciones en las zonas más contaminadas y llevaron partículas radiactivas a los edificios utilizados para su alojamiento sin tomar las medidas necesarias de descontaminación.
Los estudios realizados por las autoridades ucranianas tras recuperar la zona han revelado que los militares estuvieron en el conocido como Bosque Rojo, la zona más contaminada como consecuencia del accidente nuclear de 1986, y luego volvieron sin realizar una limpieza adecuada a las zonas donde estaban instalados llevando consigo polvo altamente contaminado.
El resultado es que en estas instalaciones se han detectado niveles de radiación ligeramente por encima de lo considerado como natural, según ha sabido la CNN, que ha podido visitar ya el lugar.
La Unión Europea ha responsabilizado este sábado a Rusia del ataque con misiles que mató a medio centenar de personas en la estación de tren de la localidad ucraniana de Kramatorsk, un incidente que ha calificado como crimen de guerra.
"Fue un bombardeo brutal e indiscriminado de civiles inocentes, incluidos muchos niños, que huían por temor a otro ataque ruso contra sus hogares y su país", ha declarado un portavoz de la UE
"Los responsables de este crimen de guerra deben rendir cuentas. No debe haber impunidad por los crímenes de guerra. La UE apoya medidas para garantizar la responsabilidad por las violaciones de los derechos humanos y el derecho internacional humanitario", ha añadido el portavoz.
La votación de la primera vuelta de las elecciones presidenciales francesas comienza este sábado en los territorios franceses de ultramar en América y el Pacífico Sur, una jornada antes de las elecciones en la metrópoli. Así, el proceso ha comenzado en San Pedro y Miquelón, al este de Canadá, la Guayana Francesa, Martinica y la Polinesia Francesa.
En el Hexágono los colegios abren a las 8.00 horas del domingo y cierran doce horas después, hora a la que se publicarán las encuestas a pie de urna que revelarán con mayor seguridad qué dos candidatos se disputarán la Presidencia en segunda vuelta.
El actual presidente, Emmanuel Macron, es el favorito para revalidar el cargo, aunque pocas encuestas auguran que logrará la victoria directa en primera vuelta. Macron se enfrentaría así el 24 de abril a Marine Le Pen (Agrupación Nacional), Éric Zemmour (Reconquista), Valérie Pecresse (Los Republicanos) o Jean-Luc Mélenchon (La Francia Insumisa).
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha vuelto a pedir este sábado un encuentro directo con su homólogo ruso, Vladimir Putin, la única persona capacitada para ordenar la suspensión de la invasión rusa del país que comenzó el 24 de febrero y que ha desencadenado una catástrofe humanitaria.
"Hoy, Ucrania no tiene más remedio que sentarse a la mesa de negociaciones", ha declarado Zelenski sobre las difíciles conversaciones ministeriales de paz que comenzaron hace unas semanas. Sin embargo, el mandatario ucraniano ha insistido en que la solución reside en una cumbre con el líder del Kremlin.
"En Rusia nadie más tiene el poder de detener esta guerra. Solo él (Putin) decide cuando va a terminar", ha explicado el mandatario en una entrevista publicada este sábado por el diario alemán Bild.