El manual secreto de Israel para ocultar la realidad en Palestina

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No es fácil justificar el asesinato de más de 1.000 palestinos en Gaza, menos aun cuando el 80% de ellos son civiles. Sin embargo, los portavoces del Gobierno israelí defienden, sin demasiadas complicaciones, la matanza en la prensa, la radio y la televisión. Las habilidades dialécticas de los representantes israelíes han mejorado con el paso del tiempo. Mark Regev, portavoz del Ejecutivo, mantiene un discurso más pulido y menos agresivo que el de sus predecesores. ¿La razón? Un manual de instrucciones fruto de la investigación, elaborado por profesionales y, en teoría, confidencial. Bajo el título The Israel Project's 2009 Global Language DictionaryFrank Luntz, experto en estrategia política, recopila recomendaciones y estrategias para conducir el discurso político de aquellos que "están a la vanguardia en la lucha mediática de Israel". El prólogo es, en sí mismo, una declaración de intenciones: "Recuerda –reza el documento–, lo que cuenta no es lo que se dice, sino lo que la gente escucha". 

Cada una de las 112 páginas que conforman el informe está marcada con el mensaje: "ni para distribuir, ni para publicar". Sin embargo, Newsweek Online se hizo eco del controvertido estudio poco después de su elaboración. Ahora, accesible a través de Internet, permite entender el discurso de los líderes israelíes sobre la dramática ofensiva que está llevando a cabo en la Franja de Gaza. El manual de uso, pensado para dirigir los discursos políticos del Ejecutivo de Israel, ha pasado a ser una herramienta para descubrir las trampas de sus mensajes. 

Frases y palabras para construir el discurso perfecto

Entre los consejos y recomendaciones que aglutina el informe aparecen algunas de las estrategias y mensajes más repetidos las últimas semanas por portavoces israelíes y líderes internacionales. El informe promueve el discurso de que "los norteamericanos están de acuerdo en que Israel tiene derecho a defender sus fronteras"; sin embargo, recomienda que no se definan sus límites. Así, evitan hacer referencia a las fronteras en términos pre o post 1967 –año en el que tuvo lugar la guerra de los Seis Días gracias a la cual Israel aumentó su territorio– lo que recordaría la historia militar entre Estados Unidos y el Gobierno israelí. Según el informe, el apoyo al derecho de Israel a defender sus fronteras pasa del 89% a menos del 60% si se hace referencia a este acontecimiento.

El derecho de los refugiados palestinos –que fueron expulsados o huyeron a partir de 1948– a regresar a sus hogares y la negativa de Israel a reconocer este derecho es otro de los temas más polémicos en manos de sus portavoces. Luntz sugiere que no se hable de "derecho" sino de "demanda". "Puesto que los palestinos no están conformes con su propio estado, ahora demandan parte del territorio de Israel", es uno de los mensajes propuestos por el analista. También aconseja a los portavoces israelíes hacer referencia a este tema como parte de un acuerdo final "que tendrá lugar en algún momento del futuro". En este sentido, el autor del informe apunta que los norteamericanos temen la inmigración en masa en Estados Unidos, por lo tanto sugiere que se mencione la "inmigración palestina de masas", lo que "haría descarrilar el esfuerzo para alcanzar la paz".

Los portavoces del Ejecutivo sionista han tomado buena nota del informe. Elaborado después de la Operación Plomo Fundido que tuvo lugar entre diciembre de 2008 y enero de 2009 –en la que murieron 1.387 palestinos frente a nueve israelíes–, el documento ha permitido conducir y aligerar el discurso público del Gobierno de Netanyahu. El "aislamiento de Hamás respaldado por Irán como un obstáculo para la paz", quizá sea el capítulo más recurrente para los acontecimientos de las últimas semanas. Este epígrafe habría permitido justificar la ofensiva iniciada por Israel el pasado 6 de julio, de no ser porque por aquel entonces Hamás e Irán discutían sobre la guerra en Siria y habían cortado sus relaciones. Ahora, parece que han retomado el contacto gracias a la invasión israelí, señala la información publicada por el diario británico The Independent

"¡Muestra empatía!"

Pero Luntz no sólo sugiere mensajes, también propone un tono lacrimógeno para presentar el caso de Israel. Es absolutamente crucial, señala, rebosar empatía por los palestinos. A los más "persuasibles no les importará lo mucho que sabes hasta que ellos no sepan lo mucho que te importa. ¡Muestra empatía por ambas partes!", aconseja el analista. Según el periódico británico, esto explicaría por qué un gran número de portavoces del Gobierno de Israel se ha mostrado muy sentimental a la hora de hablar del sufrimiento del pueblo palestino masacrado por las bombas y proyectiles israelíes.  

En negrita, subrayado y con mayúsculas, el informe instruye a los portavoces israelíes para que nunca justifiquen "la masacre deliberada de mujeres y niños inocentes" y, además, desafíen a todos aquellos que les acusen de dicho crimen. El bombardeo de un refugio de la ONU en Gaza el pasado jueves, en el que 17 palestinos fueron asesinados, puso a prueba a los líderes políticos que se esforzaron por seguir al pie de la letra esta receta. Entre los mensajes que Luntz propone en su diccionario, aparece la manida frase: "En particular, quiero llegar a las madres que han perdido a sus hijos. Ninguna madre debería enterrar a su hijo".

Confesiones de un lector

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El informe recopila una larga lista de frases y palabras que deben repetirse o evitarse para construir un discurso modélico. "La mejor y única manera para lograr la paz es el respeto mutuo", "el deseo de Israel de alcanzar la paz con el pueblo palestino debe enfatizarse siempre, ya que la mayoría de los estadounidenses quieren que esto suceda", señala. Sin embargo, se trata de evitar cualquier tipo de presión sobre Israel para alcanzar la paz por lo que propone expresiones como "paso a paso", "algún día", "en algún momento", lo que debe ser aceptado como "un enfoque de sentido común en lo que respecta a la posibilidad de un intercambio de tierras para alcanzar la paz". El estudio concluye que el Gobierno israelí no quiere que el conflicto acabe con la creación de dos Estados, pero advierte que esta realidad deber permanecer enmascarada, ya que el 78% de los estadounidenses apoyan esta solución. 

Luntz invita a los portavoces israelíes a enfatizar sobre su deseo de que la situación económica de los palestinos mejore. El informe se hace eco de unas declaraciones de Netanyahu como ejemplo de un buen discurso: "Es el momento de preguntar a Hamas qué está haciendo para llevar la prosperidad a su pueblo". Un mensaje no exento de hipocresía si se tiene en cuenta que, desde hace siete años, Israel somete a un asedio económico a Gaza, lo que ha hundido al pueblo en la pobreza y la miseria, recuerda The Independent

A lo largo del documento, se aconseja a los portavoces israelís convencer a los países europeos, así como a Estados Unidos, de que Israel quiere la paz con los palestinos y está dispuesto a comprometerse para lograrlo. No importa si, en realidad, no lo hace. Si bien este manual de instrucciones no fue concebido para su publicación, ni difusión, se ha convertido en un texto muy revelador. 

No es fácil justificar el asesinato de más de 1.000 palestinos en Gaza, menos aun cuando el 80% de ellos son civiles. Sin embargo, los portavoces del Gobierno israelí defienden, sin demasiadas complicaciones, la matanza en la prensa, la radio y la televisión. Las habilidades dialécticas de los representantes israelíes han mejorado con el paso del tiempo. Mark Regev, portavoz del Ejecutivo, mantiene un discurso más pulido y menos agresivo que el de sus predecesores. ¿La razón? Un manual de instrucciones fruto de la investigación, elaborado por profesionales y, en teoría, confidencial. Bajo el título The Israel Project's 2009 Global Language DictionaryFrank Luntz, experto en estrategia política, recopila recomendaciones y estrategias para conducir el discurso político de aquellos que "están a la vanguardia en la lucha mediática de Israel". El prólogo es, en sí mismo, una declaración de intenciones: "Recuerda –reza el documento–, lo que cuenta no es lo que se dice, sino lo que la gente escucha". 

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