La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, ha denunciado este lunes "las atrocidades" de la dictadura en el 50º aniversario del golpe militar de 1964 y ha recordado a los hombres y mujeres que fueron asesinados o que desaparecieron mientras luchaban por la democracia en este periodo de la historia de Brasil.
En un discurso en el Palacio Presidencial, la mandataria brasileña ha dicho que "las cicatrices pueden ser soportadas y superadas", porque hoy Brasil cuenta con "una democracia social". "Debemos eso a todos los que murieron y desaparecieron, a los torturados y perseguidos, a sus familias, a todos los brasileños", ha apostillado.
Según apunta Agencia Brasil, Rousseff, que fue encarcelada durante la dictadura, ha pedido "recordar y contar lo sucedido a las generaciones más jóvenes" como parte del proceso iniciado por los brasileños que lucharon por la libertad democrática, la amnistía, las elecciones directas o la creación de la Comisión Nacional de la Verdad.
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La presidenta ha insistido en que con la lucha por la democracia "los brasileños han aprendido a valorar la libertad de expresión o la independencia de los poderes legislativo y judicial" y, aunque la libertad y los sueños de muchos "fueron callados" durante ese periodo, también ha valorado los pactos políticos que llevaron a Brasil "a una redemocratización".
Este periodo duró 21 años, hasta el 15 de marzo de 1985 con la llegada al poder de José Sarney, un civil que venía a instaurar la Nueva República. Brasil reconoce oficialmente unos 400 muertos y desaparecidos a manos del régimen, sin embargo, la formación de una Comisión de la Verdad en 2011, no fue capaz de dar un castigo a los excesos cometidos en este periodo.
Rousseff, uno de los siete miembros de la dicha comisión, es también victima de los llamados años de plomo pero, ni ella misma –que fue presa y torturada por ser parte de una organización izquierdista y de lucha armada contra el Gobierno–, ha sido capaz hacer que se avanzara en la investigaciones.
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, ha denunciado este lunes "las atrocidades" de la dictadura en el 50º aniversario del golpe militar de 1964 y ha recordado a los hombres y mujeres que fueron asesinados o que desaparecieron mientras luchaban por la democracia en este periodo de la historia de Brasil.