Tsipras jura como primer ministro con el apoyo de los diputados de la derecha nacionalista

El líder de Syriza, Alexis Tsipras, ya es primer ministro de Grecia. El político, que este domingo venció con claridad las elecciones generales de su país, ha jurado su cargo este mismo lunes alrededor de las tres de la tarde ante el presidente de la República, Karolos Papoulias, en la primera ceremonia de este tipo no religiosa que se celebra en Grecia.

Syriza ha alcanzado en tiempo récord un acuerdo con la formación de derecha nacionalista Griegos Independientes

, que rechaza el rescate financiero internacional, según ha afirmado el líder de la formación conservadora en declaraciones a la prensa, según informa Europa Press. Su líder, Panos Kamennos, ha anunciado que Tsipras anunciará hoy la composición del Gobierno, "en el que participará Griegos Independientes".

"Quiero anunciar que, desde este momento, hay un gobierno en el país. Los Griegos Independientes dan un voto de confianza al primer ministro, Alexis Tsipras. Hay un principio de acuerdo", afirmó el líder de Griegos Independientes, Panos Kammenos, tras reunirse con el cabeza de lista de Syriza, Alexis Tsipras, en la sede de su partido en Atenas. El pacto entre dos partidos opuestos marca una alianza poco habitual entre dos partidos unidos por el rechazo al programa de rescate impulsado por el Fondo Monetario Internacional y la Unión Europea.

Homenaje a las víctimas del nazismo

El primer acto de Tsipras como primer ministro fue un homenaje a las víctimas del nazismo. Concretamente, depositó una corona de flores en el campo de tiro de Kesarianí –una pequeña población cercana a Atenas–, lugar en el que fueron fusilados cerca de 200 comunistas durante la ocupación nazi de la capital griega.

Yanis Varoufakis, ministro de Finanzas

Syriza prevé designar al economista Yanis Varoufakis como próximo ministro de Finanzas de Grecia, según han revelado a Reuters tres responsables del partido ganador de las elecciones griegas de este domingo. Los ojos de toda Europa y de medio mundo estarán puestos en las decisiones económicas que adopte el nuevo ejecutivo heleno, por lo que la dirección de esta cartera será una de las claves del nuevo gobierno.

Nacido en Atenas en 1961, Varoufakis es economista, profesor y escritor con la doble nacionalidad greco-australiana. Trabajó como asesor económico de Yorgos Papandréu, primer ministro de Grecia como líder del PASOK de octubre de 2009 a noviembre de 2011. Sin embargo, después criticaría con fervor a este Gobierno y comenzaría una relación de estrecha colaboración con Syriza. Tras el arranque de la crisis económica mundial en 2008 se convirtió en participante activo en debates, tertulias y foros sobre esta materia. 

El Eurogrupo marca las líneas rojas

El Eurogrupo felicitó este lunes al líder de Syriza, Alexis Tsipras, por su victoria electoral, deseándole "éxito" en su tarea como nuevo primer ministro y ofreciéndole "diálogo constructivo" para que Grecia siga en la eurozona, aunque le han avisado de que para ello deberá "cumplir las reglas".

Por ello, se mostraron poco dispuestos a una de las principales demandas de Syriza, una quita a la deuda griega o incluso una reestructuración de los plazos de vencimiento y de los intereses. El presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, dejó claro que "no hay mucho apoyo en la eurozona para una condonación del valor nominal" de la deuda helena. Por su parte, el comisario de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, dijo que Atenas debe pagar la deuda porque ésta responde al "esfuerzo" que hicieron el resto de Estados miembros para ayudar durante la crisis.

El director del Fondo de Rescate, Klaus Regling, resaltó que el Eurogrupo ya tomó medidas en 2012 para aliviar el peso de la deuda helena, alargando los vencimientos hasta situarlos en alrededor de 32 años y reduciendo los tipos de interés. Ello equivale, según apuntó, a una reducción del 40 por ciento en el valor neto de la deuda griega. "No hay una sobrecarga de deuda en Grecia, al menos no en los dos próximos años si las reformas continúan", apostilló.

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Tanto Dijsselbloem como Moscovici y Regling apuntaron que un nuevo alargamiento de los plazos o recorte de los intereses de la deuda helena no es una cuestión "urgente" o "prioritaria". No obstante, otros países como Francia o Irlanda sí se mostraron dispuestos a hablar de esta cuestión. 

Dijsselbloem no descartó que las negociaciones vayan a ser "difíciles" y pidió que el diálogo no se lleve a cabo a través de los medios de comunicación. "Vamos a adoptar un enfoque muy pragmático basado en la ambición clara de las dos partes de que Grecia siga en la eurozona, lo que significa que se tienen que aplicar las reglas y los acuerdos", señaló el político holandés.

Más allá de los buenos propósitos y las advertencias, el Eurogrupo apenas pudo concretar cuál será su nueva política hacia Grecia a la espera de conocer la posición negociadora de Syriza. Así, ni siquiera ofreció prorrogar el actual rescate, que vence el próximo 28 de febrero, como estaba previsto, y dejó en suspenso la idea de una línea de crédito preventiva para el futuro. "Si han oído rumores sobre la extensión del rescate otros seis meses, son sólo rumores", dijo Dijsselbloem, que añadió: "Corresponde al nuevo Gobierno decirnos cuáles son sus ambiciones por lo que se refiere al futuro del programa".