Apple

La competencia se ensaña con Apple por su defensa de la privacidad y las comisiones de la App Store

La Apple Store en Marina Bay Sands en Singapur.

"Algunas cosas no deberían compartirse. El iPhone te ayuda a protegerlas. Privacidad. Eso es el iPhone". Así de claro es el último anuncio de Apple que lleva todo el mes de septiembre repitiéndose en televisiones y webs de medio mundo. El imperio de la manzana mordida ha dado de esta forma un último paso público con una estrategia que llevan implementando en los últimos tiempos para marcar territorio frente al resto de dispositivos, prácticamente todos, con sistema operativo marca Google. "La privacidad es un derecho fundamental. Y también es uno de nuestros principales valores", asegura en su página oficial al tiempo que apunta que sus usuarios deben poder "decidir qué compartes y con quién". "En Apple diseñamos nuestros productos para proteger tu privacidad y darte el control de tu información. La tarea no siempre es sencilla, pero es el tipo de innovación en el que creemos", afirma la compañía que dirige Tim Cook. Una filosofía que ya implementó su fundador, Steve Jobs, y que su sucesor ha llevado al extremo.

"Es absolutamente cierto que Apple protege más tu privacidad que Google", admite César Córcoles, profesor de los Estudios de Informática, Multimedia y Telecomunicación de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC). Este experto reconoce que la tecnológica lleva años posicionándose clara y abiertamente como una especie de adalid o defensor de la privacidad de sus usuarios. Algo que le ha granjeado el aplauso de sus consumidores y las críticas de la competencia. "Le va bien y le supone un argumento de venta", expone y también apunta a que mientras la compañía californiana obtiene sus ingresos de vender productos como móviles u ordenadores, Google, en cambio, lo obtiene de recopilar datos personales de sus clientes y de la "publicidad".

Por esta razón, el pasado agosto a Apple anunció que en su nuevo sistema operativo, el iOS 14 (y que ya está disponible desde el 16 de septiembre), no estaría permitido rastrear a los usuarios utilizando su identificador único de dispositivo sin permiso explícito. Una ventaja para el usuario, pero una piedra en el zapato para empresas como Facebook, que fue uno de los primeros en quejarse asegurando que este cambio recortaría sus ingresos en dispositivos Apple en un 50%. ¿La razón? Este identificador único permite la recogida de datos y el rastreo necesario para que los anunciantes puedan mostrar publicidad segmentada. La red social cuenta con una red publicitaria que permite mostrar anuncios personalizados cuando los usuarios navegan en otras webs o aplicaciones. Google también tiene una red similar. Ambas compañías dependen de cada detalle de la vida digital de sus clientes para dirigirles de forma óptima estas publicidades. Cuando Apple implementó en 2017 una función similar en su navegador web Safari, el coste de llegar a los usuarios disminuyó en un 60%, según The Information.

Tal fue la campaña, que finalmente en Cupertino pusieron el freno de mano y pospusieron esta modificación hasta el inicio de 2021 para darle tiempo a los desarrolladores a adaptarse a este cambio. Perdieron sus usuarios, temporalmente, y ganaron este juego "técnico", por ahora, en Silicon Valley. "Creemos que la tecnología debe proteger el derecho fundamental de los usuarios a la privacidad, y eso significa brindarles a los usuarios herramientas para comprender qué aplicaciones y sitios web pueden compartir sus datos con otras empresas con fines publicitarios o de medición de publicidad, así como las herramientas para revocar el permiso para este seguimiento", aseguró Apple en un comunicado en el que explicaba que esto le ofrecerá a sus usuarios "la capacidad de permitir o rechazar" ese seguimiento que posibilita la ultrapersonalización de la publicidad.

Córcoles explica que el botón de 'me gusta' de Facebook, o de cualquier otra plataforma como Google, presente en gran parte de las webs en la actualidad, "es un caballo de Troya que le da muchísima información a Facebook". "Si de golpe, tú quitas esa posibilidad de trazado, muchas cosas por las que tú navegas dentro del dispositivo iOS, se van a quedar sin esa información", admite y apunta a que empresas como el imperio tecnológico de Mark Zuckerberg "monetizan casi y exclusivamente a través de la publicidad que ofrecen".

Las protestas airadas de Facebook no fueron una sorpresa en el imperio de la manzana. "Son muy conscientes de que le están cortando sus fuentes de ingresos a empresas como Facebook y Google", reconoce Córcoles que apunta a que "Apple tiene un interés a favor de sus usuarios" aunque tenga "efectos negativos para dos empresas que le han supuesto problemas en el pasado". También saben los de Tim Cook lo que ambas tecnológicas pueden hacer: "Son lo suficientemente importantes como para salir y decir públicamente que han eliminado su aplicación de la Apple Store porque sus condiciones son abusivas", explica este profesor de la UOC. "Tendrán a sus usuarios frustrados, pero también estarán frustrados con Apple", puntualiza.

"Prácticas desleales" por el servicio Apple One

Aunque Apple ha dado marcha atrás hasta 2021, no es la única polémica en la que se ha visto inmersa recientemente. Acusaciones similares, en este caso que lleva a cabo "prácticas desleales", surgieron después de que el pasado 16 de septiembre anunciara su servicio Apple One. Mientras todos sus usuarios se desilusionaban al ver que el nuevo iPhone tendría que esperar, los californianos implementaron esta oferta con la que aglutinan sus suscripciones en sus plataformas de música, vídeo, juegos y fotos en un solo pack.

Tim Cook durante el último evento de Apple

Spotify fue el primero en saltar asegurando que esta oferta supone una "amenaza a nuestras libertades colectivas de escuchar, aprender, crear y conectar". No es la primera vez que este servicio de música se posiciona en contra de Apple. El año pasado acusó a la tecnológica ante la Comisión Europea de prácticas anticompetitivas asegurando que actúan "como jugador y árbitro para perjudicar deliberadamente a otros desarrolladores de aplicaciones".

El problema radica no sólo en el hecho de que la tecnológica ponga a disposición de sus usuarios y a golpe de un sólo click su plataforma de música y streaming, sin tener que estar pendiente de dos cuentas diferentes: una en Spotify y otra en Netflix o HBO, por ejemplo. Esto mismo lo hace Amazon con su servicio Prime poniendo a disposición de sus usuarios un servicio de paquetería junto a un servicio de series y películas, música y biblioteca de libros. Las críticas radican en el hecho de que Apple además cobra a todos estos servicios por tener sus aplicaciones en la App Store.

Las comisiones del 30%

"Si tu vendes servicios y contratas este servicio a través de Apple, Apple se lleva una comisión del 30%. Si contratas Spotify y pagas 10 euros al mes y lo has contratado a través de un dispositivo Apple le pagas 7 a Spotify y 3 se los queda Apple", explica Córcoles que matiza que esto tampoco es ningún invento de la creación de Steve Jobs: "Google lo hace con Android, los quioscos cobran por vender periódicos y cuando vas al mercado pagas más dinero a la persona que tiene el puesto y a todos los intermediarios que a la persona que ha cultivado la pieza de fruta". En ambos casos, las comisiones que se llevan son del 30% el primer año, y 15% a partir del segundo. "También es cierto que si eres muy grande como Amazon, Apple está dispuesto a hacerte un descuento", asegura este experto.

¿Es justo que Apple cobre esta comisión? "Personalmente, opino que tiene derecho a llevarse una parte de la tajada porque ha creado un ecosistema muy importante. También quiero pensar que si todas estas empresas que ofrecen servicios en dispositivos como el iPhone y el iPad no los ofrecieran, probablemente el iPhone y el iPad no tendrían el mismo éxito", admite el profesor de la UOC. Esta práctica llevó a Tim Cook a comparecer el pasado 29 de julio en el Congreso de los EEUU ante acusaciones de monopolio al no aplicar dicha ratio en sus aplicaciones (como iTunes), lo que supondría una desventaja para el resto de desarrolladores.

Pero, ¿por qué atacar a Apple y no a Google cuando ambas hacen lo mismo? Fácil. En los dispositivos Android, las aplicaciones tienen la opción de colocar un enlace para llevar a cabo la transacción en el navegador. Con esta maniobra, no tienen que pagar la comisión. "Apple lo eliminó en algún momento de sus términos y condiciones y le dijo a los desarrolladores que esto no se podía hacer", explica Córcoles que también señala que, posteriormente "se ha puesto más dura" y obliga a las plataformas que ofrecen un determinado servicio a que tienen que "ofrecer el enlace dentro" y además "no pueden decirle al usuario dentro de la aplicación que si contratan así el 30% se lo queda Apple, mientras que si lo contrataras en la web, Apple no vería ni un duro".

Y, de repente, en lo que llevamos de 2020, muchas plataformas han comenzado a salir para criticar abiertamente a la tecnológica californiana por este "impuesto". "Apple como empresa tiene que defender su territorio y no puede permitir que todo el mundo se le vaya, porque se le iría una parte de sus ingresos. Y lo que están haciendo estas otras empresas es dejar a Apple mal ante la imagen pública", explica Córcoles que también avisa que este problema no llega hasta los usuarios: " No son conscientes de que esto está pasando".

Coalición contra Apple

El último movimiento sobre este tema se ha producido este mismo septiembre, el pasado día 24. Una serie de desarrolladores, entre los que se encontraba Spotify, Match Group (matriz de Tinder), Epic Games o el lobby de los editores de diarios europeos News Media Europe (entre cuyos miembros se encuentra la Asociación de Medios de Información, que en España aglutina a la mayoría de grandes medios, y el Consejo Europeo de Editores), han decidido sumar fuerzas para criticar a Apple con respecto a esta comisión. La Coalición para la Justicia de Apps (CAF, por sus siglas en inglés) tiene entre sus objetivos defender que las plataformas realicen las reformas necesarias para "preservar" la elección del consumidor y asegurar un "campo de juego nivelado" para los desarrolladores de aplicaciones y videojuegos que "dependen" de las tiendas "más populares". Aunque en el comunicado se asegura que defienden sus principios respecto a todos los servicios, sólo se nombra a Apple y a la App Store.

Fruto de esta guerra también se encuentra la batalla librada este verano entre Apple y Epic Games, la compañía propietaria del videojuego Fornite. Tras acusaciones mutuas, el asunto ha llegado hasta los juzgados con demandas cruzadas. Apple acusa a Epic de incumplimiento de contrato por implantar un sistema de pagos externo, mientras que la dueña de Fornite demandó a la tecnológica por eliminar su aplicaciónFornite de la App Store. ¿Los perjudicados de todo este lío? Los usuarios.

"Con la pandemia hay tecnologías que han llegado para quedarse": 2021 será más digital, más móvil y… ¿más seguro?

"Con la pandemia hay tecnologías que han llegado para quedarse": 2021 será más digital, más móvil y… ¿más seguro?

Críticas por la llegada del iOS 14

Para rematar el mes de septiembre, siempre sinónimo en Cupertino de lanzamiento de nuevos productos (aunque este 2020, han tenido que posponer la llegada de la joya de la corona, el iPhone, al 13 de octubre por la pandemia del coronavirus), tras el lanzamiento por sorpresa el pasado día 16 del nuevo sistema operativo, el iOS 14, varios desarrolladores de plataformas publicaron mensajes en redes sociales para mostrar su decepción y enfado por la decisión de Apple. "Podría llegar a pasar que las aplicaciones sufran problemas", admite Córcoles porque con esta actualización se puede cambiar parte del código que usan las appsapps.

"Las plataformas llaman al sistema operativo y le dicen: 'oye, hazme esto'. Si esa llamada cambia con el nuevo sistema, la app deja de funcionarapp ", explica este experto que señala que los mayores problemas son para aquellas empresas pequeñas, no para un Spotify o un Amazon con miles de desarrolladores en sus plantillas. De todas formas, esta llegada precipitada "no va a tener efectos catastróficos" ya que el iOS 14 "no ha hecho grandes revoluciones, pero sí se pueden romper cosas", reconoce este profesor de la UOC. Sin embargo, apunta que, de haber problemas, los usuarios "no le van a echar la culpa a Apple sino al desarrollador de esa aplicación que ha dejado de funcionar".

Más sobre este tema
stats