Un total de 95 personas se han adherido al plan de bajas voluntarias y nueve han pedido prejubilarse como parte del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de Unidad Editorial. Suman por tanto 104 trabajadores, que se restarán de los 160 despidos acordados por los comités de empresa con la dirección del grupo al término de la negociación del ERE.
La cifra de bajas voluntarias no es aún definitiva, a la espera de que durante esta misma semana la empresa vete a alguno de los trabajadores adheridos al plan. Una vez que estas personas hayan dejado la empresa, a partir del próximo lunes, comenzarán los despidos, en principio de 56 trabajadores.
En El Mundo, la más afectada por los despidos de las principales cabeceras, se han apuntado al plan de bajas voluntarias 15 personas en Madrid –la cifra total de despidos era 38–, una en Sevilla y otra en Málaga –ambas ediciones locales desaparecerán: el número de despidos previsto era de 13–, tres en Baleares –siete despidos iniciales–, cuatro en Bilbao –cinco despidos–, uno en Alicante, uno en Valencia y ninguno en Barcelona. En Madrid sólo se ha sumado un trabajador al plan de prejubilaciones. Según los cálculos de la propia empresa, apenas 30 empleados superaban en todo el grupo los 57 años, la edad a partir de la cual ofrece Unidad Editorial la prejubilación.
Los trabajadores, tanto los adheridos a las bajas voluntarias como los finalmente despedidos recibirán indemnizaciones de 37 días por año trabajado, más una paga lineal de 5.000 euros, con un tope de 24 mensualidades. Los prejubilados con 57 años recibirán el 60% del salario neto. Quienes tengan más de 60 años percibirán el 70% y quienes sobrepasen los 61 años, el 80%. La empresa les pagará el convenio especial con la Seguridad Social hasta los 63 años, dos años más de lo que establece la ley.
Máxima incertidumbre
Unidad Editorial, y en especial El Mundo, vive días turbulentos, lo que parece haber animado a muchos a abandonar el grupo. El pasado 25 de mayo fue destituido como director del periódico David Jiménez, justo cuando cumplía un año en el puesto. Pocos días después le seguía la responsable de su edición digital, Virginia P. Alonso. El día 31 abandonó también la cabecera el antecesor de Jiménez, Casimiro García-Abadillo, que sólo duró en el cargo un poco más: 15 meses tras suceder a Pedro J. Ramírez, igualmente despedido.
Desde hace un par de semanas se ha hecho carga de El Mundo su anterior responsable de Opinión, Pedro García-Cuartango, comandado por otro histórico de la etapa de Pedro J., Rafael Moyano. Pero su mandato, según ellos mismos anunciaron a la plantilla, es "provisional", en principio hasta septiembre.
Mientras, en Milán, un empresario de televisión, Urbano Cairo, lanzaba una OPA contra RCS Mediagroup, la matriz italiana de Unidad Editorial. El folleto de la operación acaba de ser aprobada por la CNMV italiana: se abrirá el próximo día 13 y deberá concluirse el 8 de julio, según publica la prensa italiana. El pasado mes de mayo, no obstante, una firma de capital riesgo, apoyada en otros accionistas de RCS, lanzaba a su vez una contra OPA en apoyo de los actuales gestores del grupo editor de Il Corriere della Sera.
Así, la negociación del ERE ha sido un proceso muy poco pacífico. Por primera vez en la historia del grupo los trabajadores llevaron a cabo tres días de huelga que impidieron la publicación de El Mundo y sólo permitieron la de Marca y Expansión con contenidos muy mermados.
Ahora, tras el ERE, la dirección de El Mundo reconoce que con una plantilla reducida tendrá dificultades para cubrir turnos de fin de semana y vacaciones. Por tanto, va a reorganizar el periódico en dos macrosecciones: Mundo 1 y Mundo 2. En la primera se agruparán Opinión, Nacional, Economía e Internacional. En la segunda, los contenidos blandos: desde Sociedad y Cultura hasta Deportes. Es decir, las secciones dejarán de ser compartimentos estancos y, cuando sea necesario, redactores de economía deberán trabajar para internacional o los de nacional para opinión.
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La tirada media de 'El Mundo' se desploma un 38,5%
Según la memoria económica del ERE, de las cabeceras de Unidad Editorial es El Mundo la que atraviesa una “situación económica y productiva menos favorable”. Su tirada media ha caído un 38,5% desde 2012. La de Marca, un 30,1% y la de Expansión, un 21,9%. El Mundo también ha recortado su difusión más que El País, que la ha reducido un 30,6% desde 2012, y que Abc, con un 36,8% de desplome. En internet, elmundo.es perdió en octubre de 2014 su liderazgo ante elpais.com, según los datos de Comscore.
La plantilla de Unidad Editorial ha sufrido cuatro ERE desde 2009. En 2008, consumada la fusión de Unedisa –El Mundo– con Recoletos –Marca, Expansión, Telva–, el grupo resultante contaba con 2.391 empleados fijos. Ahora quedan sólo 1.433: la plantilla se ha recortado en un 40%. A partir del 11 de junio, 160 menos.
Un total de 95 personas se han adherido al plan de bajas voluntarias y nueve han pedido prejubilarse como parte del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de Unidad Editorial. Suman por tanto 104 trabajadores, que se restarán de los 160 despidos acordados por los comités de empresa con la dirección del grupo al término de la negociación del ERE.