Este miércoles, el programa de laSexta El Intermedio se hizo eco de la advertencia de la defensora del pueblo Soledad Becerril sobre las "graves carencias" de las urgencias hospitalarias a raíz de un estudio conjunto con los defensores del pueblo de algunas Comunidades Autónomas.
Este estudio alerta de que las insuficiencias de las urgencias de la sanidad española "aumentan el error humano y con ello el riesgo de mortalidad". "Algo que era de esperar teniendo en cuenta el dramático corte que ha sufrido la sanidad", quiso apuntar la presentadora del programa, Sandra Sabatés, quien enumeró algunos ejemplos de dichos recortes.
Así, Sabatés apuntó que en el último verano había 28.500 menos que hace dos años. "¿De qué recortes estás hablado? El lunes en Espejo Público Esperanza Aguirre dejó muy claro que es mentira que ha habido recortes", recordó el Gran Wyoming. Y es que la presidenta del PP madrileño llegó a decir en el programa matinal de Antena 3 que "en España no ha habido recortes ni en sanidad ni en educación".
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El informe de los defensores del pueblo denuncia, entre otras cosas, que en las urgencias "faltan profesionales especializados en todas las franjas horarias y todos los días de la semana. Un hueco que cubren médicos residentes que aún no han terminado su formación y a los que se les carga de una excesiva responsabilidad", mencionó Sabatés. "Y date con un canto en los dientes. No me extrañaría que dentro de poco directamente te manden un video tutorial sobre cómo operarte tú mismo de las vegetaciones", ironizó Wyoming.
El estudio también critica la saturación de las urgencias, que provoca un "menoscabo de la intimidad y de la dignidad de los pacientes". En esta línea, también denuncia la "falta de medios para garantizar una muerte digna a los pacietnes en fase terminal".
El informe tampoco olvida a uno de los "colectivos más vulnerables", los inmigrantes que se encuentran en situación irregular y que, por consiguiente, carecen de tarjeta sanitaria. La defensora del pueblo recuerda que estos "tienen derecho a recibir del sistema público atención sanitaria de urgencia". "Estas son las consecuencias de la mercantilización de la sanidad. Ninguna persona debería dejar de ir al hospital por miedo a que le claven como si se trata de un restaurante de cinco tenedores", criticó Wyoming.