En el día en que estoy escribiendo este artículo (29 de diciembre) los Juzgados de Lleida capital y los de Cervera se han quedado sin calefacción todo el día. Hace apenas dos semanas, como delegada de prevención de UGT, comuniqué a los Servicios Territoriales de Justicia que en una de las plantas de los juzgados de La Seu d’Urgell había encontrado hongos en varias placas del techo y que había trabajadoras afectadas por este motivo: una con problemas respiratorios y otras con problemas dérmicos. Unas semanas antes, el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Lleida se inundó por la rotura de un manguito y parte de la caída del techo que, por fortuna, no afectó a nadie. En uno de los despachos de Médicos Forenses aparece casi cada día algún que otro tipo de insecto y desprende olores que hacen que sea de uso obligado poner algún tipo de ambientador para poder trabajar con cierta normalidad.
¿A quién responsabilizamos de estas constantes deficiencias? Pues señalamos, principalmente, al Departament de Justicia y a la empresa de mantenimiento CLECE. Empezaremos por señalar que dicha empresa pertenece a ACS, cuyo máximo accionista es Florentino Pérez.
A finales de 2015, la empresa del presidente del Real Madrid era adjudicataria de al menos 318 edificios del Gobierno catalán. ¿Casualidad? Desconocemos si existen o no las casualidades. Lo que sí podemos aseverar sin ninguna duda es que CLECE no está respondiendo de manera eficaz a la labor que se le adjudicó en su momento por parte de la Coordinadora Ejecutiva del Plan de Inversiones de la Administración de Justicia en Catalunya, la Sra. María Pérez Cardenal.
El circuito de validación de reparaciones es, además, ineficaz y difícil de comprender, puesto que los responsables de los Servicios Territoriales de Justicia de Lleida no pueden ordenar directamente que CLECE realice las reparaciones oportunas. ¿Por qué? Porque desde Barcelona ordenan primero una comunicación de la avería y, tras una reunión de un equipo técnico, deciden si la avería se repara o no. ¿Acaso no sería más eficaz una orden directa desde Lleida? Si la Sra. Pérez Cardenal consideró en su momento a CLECE óptima para llevar el mantenimiento de todos los órganos judiciales de Lleida, imaginamos que lo hizo con la mejor voluntad, y nos gusta pensar que confía en el equipo de técnicos que trabajan en los Servicios Territoriales de Lleida. La voluntad, no obstante, no evita el frío, ni los hongos, ni las inundaciones. Lo que nos demuestra el Departament de Justicia, que tanto nos exige, es ineficacia y dejadez de funciones. Nuestra salud laboral les importa poco. El caso es que quienes podemos enfermar somos nosotros, y si lo hacemos, además, se nos recorta parte de nuestro salario. ¿Tendremos que demandar a la Administración por hacernos enfermar? Exigimos una solución inmediata ante estos problemas, puesto que en caso contrario volveremos a denunciar ante Inspección de Trabajo.
Por último, tan solo un apunte: estudiando las adjudicaciones llevadas a cabo por el Departament de Justicia para el mantenimiento de los edificios judiciales de Catalunya, me doy cuenta que en ella están implicadas empresas como la nombrada ACS de Florentino Pérez, Ferrovial, cuyo presidente es Rafael del Pino Calvo-Sotelo, Valoriza Falicities, perteneciente al grupo Sacyr, que tiene como principal accionista a la familia Carceller, y añado por último la imprescindible UTE Fomento de Construcciones y Contratas: Accionista mayoritario, Carlos Slim y con el 20% Esther Koplovitz.
Pues bien, antes de la adjudicación de los contratos, al menos Sacyr y FCC ya figuraban como empresas susceptibles de no ser contratadas al estar implicadas en la trama destapada por el Sr. Bárcenas del Partido Popular, y también Florentino Pérez en ACS se encontraba ya en apuros que se habían hecho públicos. ¿No hubiera sido más oportuno optar por empresas sin presunción de corrupción?
¿Ve algo extraño el Govern català? Dejen de recortar a los servidores públicos y a la ciudadanía y pónganse a hacer su trabajo. Tres casualidades ya son muchas.
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*Responsable de UGT-Justicia-Lleida. Delegada de Prevención de Riesgos Laborales
En el día en que estoy escribiendo este artículo (29 de diciembre) los Juzgados de Lleida capital y los de Cervera se han quedado sin calefacción todo el día. Hace apenas dos semanas, como delegada de prevención de UGT, comuniqué a los Servicios Territoriales de Justicia que en una de las plantas de los juzgados de La Seu d’Urgell había encontrado hongos en varias placas del techo y que había trabajadoras afectadas por este motivo: una con problemas respiratorios y otras con problemas dérmicos. Unas semanas antes, el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Lleida se inundó por la rotura de un manguito y parte de la caída del techo que, por fortuna, no afectó a nadie. En uno de los despachos de Médicos Forenses aparece casi cada día algún que otro tipo de insecto y desprende olores que hacen que sea de uso obligado poner algún tipo de ambientador para poder trabajar con cierta normalidad.