El abogado Benet Salellas anunció este miércoles que llevará a Fiscalía al testigo clave que sirvió para condenar a 11 inmigrantes del Raval a seis años de cárcel por supuestamente planear un atentado en el Metro de Barcelona en 2008, alegando que pudo mentir durante el juicio en la Audiencia Nacional en 2009.
Lo ha dicho en rueda de prensa en el Parlament junto a David Fernández (CUP), David Companyon (ICV-EUiA), Oriol Amorós (ERC) y dos de los condenados, tras una investigación publicada por infoLibre y El Periódico que apunta a que este testigo mintió al presentarse como un terrorista arrepentido cuando en realidad era un confidente.
Salellas explicó que, como dudan de que la Fiscalía actúe de oficio, presentarán una denuncia contra quien se hacía llamar Asim Iqbal para que lo citen como imputado, y, una vez se demuestre que mintió y se le condene, se pueda dar "un primer paso" para reabrir el caso.
Considera que se cometió una grave injusticia contra estos ciudadanos: "Se centraba en construir un relato muy grave de atentado indiscriminado en base a la declaración falsa de un testigo protegido", sostiene Salellas, uno de los abogados que los defendió en juicio.
Dijo que, en la instrucción, el juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno rechazó su solicitu de investigar a este testigo, igual que hizo después "sistemáticamente" el presidente del tribunal que lo juzgó, Javier Gómez Bermúdez; cuando en 2011 Wikileaks publicó información de este testigo, pidieron la revisión del caso, pero también fue rechazado, según Salellas.
Como nadie podrá devolverles los años en la cárcel, al menos considera que deberían ser indemnizados y debería invitarse a los que fueron deportados a que puedan volver a Barcelona: "Es una petición de mínimos", considera el abogado, que también ha reclamado una investigación desde el punto de vista político y policial.
David Fernández (CUP) recalcó que estos 11 vecinos fueron condenados sin pruebas en una operación que considera de islamofobia con la intención de arrojar "una sombra permanente sobre la comunidad pakistaní del Raval".
"Nada devolverá el sufrimiento a estas 11 familias. Nos sumamos a la petición de reabrir el caso. Tenemos que aprender de estos montajes", sostuvo en la misma línea el diputado ecosocialista David Companyon. Oriol Amorós (ERC) hizo hincapié en que "es inadmisible que se vulneren derechos y libertades" con la justificación de combatir un problema tan grave como es el yihadismo, y considera que en este caso hubo un engaño general por interés político.
Poco antes de la rueda de prensa, el diputado David Fernández preguntó sobre este caso al conseller de Interior, Jordi Jané, durante la sesión de control al Govern en el Parlament. Jané recordó que hay mecanismos para reabrir los casos ya sentenciados y que "las sentencias tampoco son infalibles".
"Si efectivamente fuera verdad, si hay nuevos hechos, lo que toca es llevarlo a la Justicia", y recalcó que respeta la independencia del poder judicial pero también las investigaciones periodísticas.
El abogado Benet Salellas anunció este miércoles que llevará a Fiscalía al testigo clave que sirvió para condenar a 11 inmigrantes del Raval a seis años de cárcel por supuestamente planear un atentado en el Metro de Barcelona en 2008, alegando que pudo mentir durante el juicio en la Audiencia Nacional en 2009.