Aguirre se lava las manos en la comisión de investigación sobre la corrupción en Madrid

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No nombró a Salvador Victoria, no supo nada de los presuntos tejemanejes de Cándido Cerón, los más de cien millones invertidos en la abandonada Ciudad de la Justicia no se han perdido y sus personas más cercanas ya no están imputadas, sino investigadas. Este fue el tono general de la declaración de este viernes por la mañana de la presidenta del PP madrileño, Esperanza Aguirre, en la comisión de investigación de la corrupción de la Asamblea de Madrid.

Aguirre, que llegó a la Asamblea pasadas las ocho de la mañana, no compareció hasta poco antes de las dos de la tarde. Nada más llegar, ante numerosas cámaras y micrófonos de los medios de comunicación, lanzó sus primeras andanadas contra Podemos, un partido que según la expresidenta de la Comunidad tenía intención de llamarla "corrupta" y "vieja" en relación a la trama Púnica.Púnica

Pero la propia Aguirre tuvo que reconocer que la comparecencia siguió otros derroteros: "El señor Espinar se ha comportado de una forma educadísima conmigo, aunque no quiero lanzarle el capote para el segundo turno, que yo sí soy muy taurina", aseguró la dirigente del PP a preguntas del parlamentario de la formación morada Ramón Espinar.

Zafra, de Ciudadanos

Pero pese a responder a casi todas las preguntas de los grupos de la oposición, en sus contestaciones Aguirre se lavó las manos. Como por ejemplo cuando el muy incisivo diputado de Ciudadanos César Zafra le preguntó por la conversación en la que el exconsejero habría instado a que Indra pagara 10.000 euros al empresario Alejandro de Pedro, al que el PP encargaba labores de posicionamiento online, alegando que era algo que se hacía "toda la vida".

A este respecto, Aguirre aseguró que le "chocaba", y precisó que cuando ocurrió, ella " no estaba en política". "Estaba en el PP de Madrid, pero no en la Comunidad", apostilló.

"No escuché si Victoria dijo eso. Yo estoy muy en desacuerdo. Nunca que yo haya sabido, se ha hecho semejante cosa y me parece indignante. Estoy en desacuerdo, no lo he visto jamás y espero no verlo. No sé lo que hizo el señor Victoria", ha remarcado Aguirre, que ha asegurado que es algo que "no se ha hecho en la vida".

Amparo de la mesa

"¿Qué estaba haciendo?", insistió varias veces el diputado de Ciudadanos, quien criticó por "extraño" que la presidenta del PP de Madrid no supiera lo que estaba pasando y que se estaba usando [la empresa de informática] ICM "como una tómbola".

Entonces Aguirre pidió amparo a la mesa afirmando que ella no venía a comparecer para explicar lo que hacía en esos años, y sin responder directamente a la pregunta continuó hablando sobre el tema diciendo que ella no había nombrado a Victoria, pero es una persona que tenía "toda" su confianza". "Sí, de momento sí. Si se demuestra que ha hecho algún ilícito dejará de tenerla", afirmó la expresidenta, que sufrió la contestación de Zafra: "Como usted diría no me cuente mamandurrias".

"La mano en el fuego"

Por quién sí puso Aguirre "la mano en el fuego" fue por otras dos investigadas en la trama que investiga en la Audiencia Nacional el juez Eloy Velasco. "Yo le pedí que se viniera conmigo al Ayuntamiento de Madrid, pero decidió abandonar la política", resaltó Aguirre, que defendió a la exconsejera de Educación.

Pero la defensa más cerrada de Aguirre fue la que hizo a su exjefa de prensa Isabel Gallego. "Es una periodista que no ha cometido ningún ilícito penal y que no está imputada sino investigada", aseguró la dirigente del PP, a preguntas de la diputada del PSOE Encarnación Moya.

Al ser preguntada por lo que ha hizo la expresidenta para evitar la corrupción, aseguró que en el momento que tuvo conocimiento "del menor indicio cesarle, a él y a todos". Aunque en ese momento Aguirre tuvo que oir que su jefa de prensa Isabel Gallego está imputada y sigue siendo su jefa de prensa: "Hay imputaciones e imputaciones. No son cosas iguales".

"Yo no intervine en su nombramiento"

La diputada del PSOE Encarnación Moya, que realizó preguntas de gran calado, se interesó por los motivos por los que nombró a Cándido Cerón al frente de la agencia de Informática de la Comunidad de Madrid (ICM), cuyo nombre aparece en el sumario de la Púnica, ya que adjudicó contratos por 5 millones de euros a la empresa Avanzit, con la que estaba vinculado. Pero Aguirre volvió a repartir responsabilidades: "Cerón lo nombra [la actual consejera] Engracia Hidalgo. Y en Caja Madrid lo nombra o el consejero de Hacienda [Antonio] Beteta o Engracia Hidalgo. Yo no intervine en su nombramiento", espetó la dirigente del PP.

"¿Pero entonces de dónde le podría venir ese poder a Cerón, que acabó en Caja Madrid?", le espetó la diputada del PSOE, que sólo obtuvo la respuesta: "A mí me lo contaron a toro pasado".

También llamó la atención de los partidos de la oposición la defensa que hizo Aguirre de la conocida como Ciudad de la Justicia. Un conjunto de edificios en la zona norte de Madrid en los que el Gobierno autonómico invirtió más de 100 millones de euros: "De este asunto me he enterado al leer las declaraciones del señor [Silvano] Corujo. Lo que pasó ahí es que a partir de 2008 decidimos suspender la idea de la Ciudad de la Justicia, que usted puede considerar que era una obra megalómana y no le quitaría la razón, pero que no le iba a constar ni un euro a los contribuyentes", dijo Aguirre.

La duración de la crisis

Pero ante la insistencia de la diputada Moya de por qué siguieron invirtiendo en esas obras cuando ya sabían que la iban a parar, Aguirre pasó de repente a defender estas infraestructuras: "Los ciento y pico millones de euros no están tirados, están ahí. En todas las carreteras que están preparadas. Lo que pasa es que nosotros no sabíamos lo que iba a durar la crisis económica", se defendió la que fuera ministra de Sanidad del Gobierno de José María Aznar.

Aguirre aprovechó las preguntas del diputado del PP Alfonso Serrano para apuntar la responsabilidad del ex secretario general del PSOE madrileño en la trama Púnica. "Yo estoy aquí, pero [el número dos de la trama] David Marjaliza aportó las facturas de que le pagó la campaña a Gómez, pero no le han querido llamar a la Asamblea".

33 años en política

La que fuera también presidenta del Senado, también fue interpelada sobre las encuestas que investiga el juez Velasco como parte de la financiación irregular: "Las encuestas que encarga el PP de Madrid las paga el PP de Madrid", salió al paso la expresidenta madrileña, que aseguró que ha podido cometer muchos errores ya que ha permanecido 33 años en política y ha manejado "más de 200.000 millones de euros. Yo he nombrado a más de 500 altos cargos, y dos me han salido rana, Francisco Granados y Alberto López Viejo".

Aguirre, que hasta en tres ocasiones lamentó la lentitud de la justicia, contestó al diputado de Podemos Ramón Espinar, que la había comparado con el expresidente italiano Silvio Berlusconi, por defenderse atacando a los jueces, que siempre calificaba de comunistas: "Por cierto, y en este caso todo el mundo sabe que el juez [Eloy Velasco] fue alto cargo del PP. Y ahí lo dejo", espetó la líder de la oposición en el Ayuntamiento de Madrid.

No nombró a Salvador Victoria, no supo nada de los presuntos tejemanejes de Cándido Cerón, los más de cien millones invertidos en la abandonada Ciudad de la Justicia no se han perdido y sus personas más cercanas ya no están imputadas, sino investigadas. Este fue el tono general de la declaración de este viernes por la mañana de la presidenta del PP madrileño, Esperanza Aguirre, en la comisión de investigación de la corrupción de la Asamblea de Madrid.

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