Esperanza Aguirre fue accionista de la empresa Savial SL, dedicada a la explotación agrícola y ganadera, como mínimo durante 13 años. Sin embargo, la dirigente del PP se niega a dar cualquier tipo de explicación sobre dicha empresa con el argumento de que es "machista" preguntarle, puesto que el administrador único de la compañía es su marido. Las principales dudas afectan sin embargo a la actuación de la propia Aguirre, que entre otras cuestiones se niega a explicar si cumplió con la Ley de Incompatibilidades de los Altos Cargos cuando fue elegida presidenta madrileña o en qué precio valoró la supuesta donación a su marido de las participaciones que tenía en dicha empresa. Ni siquiera aclara si esa presunta donación se declaró ante Hacienda.
infoLibre trasladó a Aguirre nueve preguntas relacionadas con Savial SL, a través de su portavoz de comunicación, pero no respondió a ninguna (ver todas las preguntas al final de esta información en La caja negra).
Como desveló ayer este periódico, Savial SL adquirió en 2006 y 2007 acciones con cotización en Bolsa por valor de 3.079.421 euros. Así consta en documentos depositados por Savial SL en el Registro Mercantil de Madrid, a los que ha tenido acceso infoLibre. Parte de esas acciones las adquirió gracias a préstamos del BSCH y por la "caja de Cataluña" –en los documentos que constan en el Registro no queda claro si esa entidad financiera es Caixa Catalunya o La Caixa–, concedidos a pesar de que la compañía tenía desde 2005 fondos propios negativos. Esa situación obligaba a reequilibrar el capital o a disolver la empresa, pero no se adoptó ninguna de las dos opciones.
Savial SL fue constituida en 1993 con un capital social de 3.005 euros, que es el que mantiene en la actualidad. Su sede social está en un palacete en el centro de Madrid donde residen Esperanza Aguirre y su marido. La sociedad fue creada por tres personas: el marido de la dirigente del PP, Fernando Ramírez de Haro, nombrado administrador único y que suscribió el 51% de las participaciones; Aguirre, que se quedó con el 39% del capital; y un cuñado de la dirigente del PP, Juan Ramírez de Haro (fallecido en 2009), que recibió el 10% de las participaciones.
Cuando infoLibre desveló el año pasado que Savial SL se había embolsado millonarias subvenciones públicas, Aguirre aseguró que las participaciones que tenía en la compañía se las había "donado" a su marido en 2005.
La obligación de declarar los bienes
Dos años antes de esa supuesta donación, Esperanza Aguirre se convirtió en presidenta de la Comunidad de Madrid. En aquel momento ya estaba vigente la Ley 14/1995 de Incompatibilidades de Altos Cargos de la Comunidad de Madrid, que establece la obligación de éstos de realizar una declaración notarial de actividades y otra de bienes. Esta última debe incluir "la totalidad de sus bienes, derechos y obligaciones". La norma también contempla la posibilidad de presentar una declaración de los bienes del cónyuge, cuando "voluntariamente se preste a ello".
La declaración de bienes debe presentarse "en el improrrogable plazo de los dos meses siguientes a las fechas de toma de posesión y cese" en el Registro de Bienes y Derechos Patrimoniales. Las declaraciones son secretas y sólo pueden tener acceso a ellas los grupos parlamentarios de la Asamblea de Madrid, aunque no podrán hacer fotocopias y deberán consultarlas durante un tiempo tasado en el despacho de la Presidencia de la Cámara.
Pues bien, Esperanza Aguirre tomo posesión como presidenta madrileña el 21 de noviembre de 2003, así que antes de que finalizase enero de 2004 tenía la obligación legal de presentar su doble declaración notarial. Según su propia confesión, en aquel momento aún no había donado las participaciones de Savial SL a su marido, así que formaban parte de su patrimonio. No eran acciones de una compañía insignificante: en 2003 declaró que tenía 11 trabajadores en plantilla, el importe neto de su cifra de negocios ascendió a 591.243 euros y además ingresó otros 145.000 euros por subvenciones públicas.
"¿Incluyó Aguirre en su primera declaración de bienes las participaciones que tenía en aquel momento en Savial SL?". Esa fue una de las preguntas que infoLibre planteó a la dirigente del PP. No hubo respuesta. Si no lo hizo, incumplió la ley.
El impuesto de donaciones
Aguirre sostiene que donó las acciones a su marido en 2005, pero no ha mostrado ningún documento que respalde su versión. Este periódico ha intentado conocer, sin éxito, la fecha exacta de la supuesta donación, el precio en que se valoraron las participaciones y si la operación se declaró ante Hacienda.
El valor otorgado a las participaciones es clave para saber si Aguirre y su marido cumplieron o no con la Agencia Tributaria. Estas operaciones están gravadas con el Impuesto de Sucesiones y Donaciones (ISD), que en su art. 9.b señala que la base imponible en las donaciones será "el valor neto de los bienes y derechos adquiridos, entendiéndose como tal el valor real de los bienes y derechos minorado por las cargas y deudas que fueren deducibles". Además de su actividad agrícola y ganadera, Savial SL es propietaria de importantes latifundios en Ávila y Guadalajara. Todo ello lo tuvo que tener el matrimonio Ramírez de Haro-Aguirre a la hora de fijar "el valor real" de las participaciones que la entonces presidenta madrileña tenía en la empresa.
"¿En qué importe se valoraron dichas participaciones al realizar la donación?", preguntó este periódico a la dirigente del PP. Tampoco hubo respuesta. Así que es imposible saber si Aguirre y su marido valoraron correctamente las participaciones o si lo hicieron por un importe más bajo del real para pagar menos impuestos. El pago en sí ya era responsabilidad de Ramírez de Haro, sujeto tributario obligado a abonar el impuesto.
Las mamandurrias
Más allá del posible cumplimiento de la Ley de Incompatibilidades y de la correcta declaración de la donación ante Hacienda –en el caso de que realmente se haya producido–, la actuación de Aguirre en Savial SL plantea otra cuestión sobre la hipocresía del discurso de Aguirre. Son múltiples sus declaraciones criticando a quienes reciben subvenciones públicas, aunque entre ellas destaca especialmente una afirmación realizada en julio de 2012: “Los subsidios, subvenciones y mamandurrias tienen que acabarse”. Pues bien, Savial SL se ha embolsado millones de euros en lo que Aguirre llama mamandurrias.
En las cuentas que las empresas presentan en el Registro Mercantil, las subvenciones públicas relacionadas con la actividad de la sociedad se incluyen en un capítulo denominado "otros ingresos de explotación". La mayoría de los años, las subvenciones públicas que Savial SL admitió haber recibido coinciden al céntimo con el importe declarado en la partida de "otros ingresos de explotación". Así ocurrió por ejemplo con las cuentas de los años 2011, 2012 y 2014. En otros ejercicios, esa partida es ligeramente superior a las subvenciones recibidas, como en 2013. Ello es así porque "otros ingresos de explotación" incluye a veces otros conceptos, como arrendamientos.
Pues bien: entre 1993 y 2014, la suma de las cantidades consignadas por Savial SL como "otros ingresos de explotación" asciende a 4,59 millones de euros. Y si tenemos en cuenta sólo el periodo de tiempo en que Aguirre confiesa haber sido accionista, hasta 2005, el importe asciende a 2,51 millones de euros. La práctica totalidad de esas cantidades se corresponde con subvenciones públicas.
Esperanza Aguirre no es la única política que ha sido dueña de una empresa que se ha lucrado con importantes cantidades de dinero público. Pero si es la única, que se conozca, que ha atacado con fiereza a los perceptores de subvenciones tras embolsarse millones de euros en subvenciones.
La actual portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid tampoco ha querido pronunciarse sobre este asunto.
Las gestiones de Aguirre
Un cuarto bloque de cuestiones que plantea la relación de Aguirre con Savial SL se refiere a las posibles gestiones realizadas en favor de la empresa de la que era accionista.
La empresa creada por el matrimonio Ramírez de Haro-Aguirre ha disfrutado de una importante financiación de los bancos, hasta el punto de que su deuda con entidades de crédito llegó a alcanzar los 6,88 millones de euros en 2011. Resultan especialmente llamativos los préstamos que percibió en 2006 y 2007, cuando la compañía admitía tener fondos propios negativos, una situación que obligaba a reequilibrar el capital o a disolver la empresa. El marido de Aguirre y administrador único de la sociedad no hizo ninguna de las dos cosas. Pero ello no fue obstáculo para que los bancos financiaran generosamente a Savial SL. En concreto, parte de las acciones las adquirió gracias a préstamos concedidos por el BSCH y por la "caja de Cataluña", según consta en las memorias de la empresa de 2006 y 2007. En dichos documentos no queda claro si esa entidad financiera es Caixa Catalunya –ahora una filial del BBVA– o La Caixa.
¿Realizó Aguirre alguna gestión ante las entidades financieras para que le concedieran préstamos a Savial SL, bien durante los 13 años en los que fue accionista o con posterioridad? Esa fue otra de las preguntas planteadas por infoLibre y que permanecen sin respuesta.
De momento, Esperanza Aguirre se esconde en el silencio. Cuando un periodista de laSexta le preguntó por Savial SL, este lunes en el Ayuntamiento, contestó malhumorada que no iba a responder a esa pregunta porque era "machista". Y luego se limitó a repetir un escueto "otra pregunta", ante el intento del periodista de que se pronunciara sobre una empresa que ella fundó, de la que fue accionista al menos 13 años y que se embolsó millones de euros de los contribuyentes vía subvenciones públicas.
AGUIRRE NO RESPONDE
infoLibre trasladó a Esperanza Aguirre nueve preguntas relacionadas con Savial SL, a través de su portavoz de comunicación, pero la dirigente del PP no respondió a ninguna. Las preguntas planteadas fueron las siguientes:
1. ¿En qué fecha exacta donó Esperanza Aguirre a su marido las participaciones que tenía de Savial SL?
2. ¿En qué importe se valoraron dichas participaciones al realizar la donación?
3. ¿Se declaró la donación a Hacienda? En caso afirmativo, ¿cuánto se pagó por el Impuesto de Sucesiones y Donaciones?
4. Desde que se fundó Savial SL en 1993, ¿realizó en algún momento Aguirre gestiones ante entidades financieras para la concesión de préstamos a dicha sociedad?
5. ¿Adoptó Aguirre alguna decisión, como presidenta de la Comunidad de Madrid, que favoreciese los intereses de los bancos que prestaron hasta 6,8 millones de euros a Savial SL pese a tener esta compañía fondos propios negativos?
6. Durante el tiempo que Aguirre admite haber sido accionista de Savial SL (1993-2005), la empresa declaró “otros ingresos de explotación” por un valor total de 2.509.560 euros. ¿Se corresponde esta cantidad de forma íntegra con subvenciones públicas recibidas por la compañía? En caso de que no sea así, ¿qué cantidad de la partida “otros ingresos de explotación” no son subvenciones públicas?
7. ¿Cómo valora Aguirre que una empresa de la que tenía el 39% del capital se embolsase cantidades millonarias en subvenciones públicas, algo que ella ha definido públicamente como “mamandurrias”?
8. Cuando fue elegida presidenta de la Comunidad de Madrid en 2003, los altos cargos tenían la obligación de realizar una declaración de bienes, de acuerdo con la Ley 14/1995, de 21 de abril, de Incompatibilidades de Altos Cargos de la Comunidad de Madrid. ¿Incluyó Aguirre en su primera declaración de bienes las participaciones que tenía en aquel momento en Savial SL?
9. Dicha Ley 14/1995, y las normas que la desarrollaron, indican que los cónyuges de los altos cargos también podían presentar de forma voluntaria su declaración de bienes. ¿En algún momento, entre los años 2003 y 2012, presentó el marido de Aguirre la declaración de bienes a la que se refiere el artículo 10 de dicha ley?
Esperanza Aguirre fue accionista de la empresa Savial SL, dedicada a la explotación agrícola y ganadera, como mínimo durante 13 años. Sin embargo, la dirigente del PP se niega a dar cualquier tipo de explicación sobre dicha empresa con el argumento de que es "machista" preguntarle, puesto que el administrador único de la compañía es su marido. Las principales dudas afectan sin embargo a la actuación de la propia Aguirre, que entre otras cuestiones se niega a explicar si cumplió con la Ley de Incompatibilidades de los Altos Cargos cuando fue elegida presidenta madrileña o en qué precio valoró la supuesta donación a su marido de las participaciones que tenía en dicha empresa. Ni siquiera aclara si esa presunta donación se declaró ante Hacienda.