Este martes se ha celebrado el tercer debate sobre el estado de la ciudad de Madrid, el último antes de las próximas elecciones municipales. El alcalde de la capital, José Luis Martínez Almeida, quiere dejar un legado reconocible tras su paso por el consistorio como ha sucedido con sus antecesores, pero lo cierto es que después de sus tres años de mandato, son escasos los proyectos o las obras que se le atribuyen. Es más, sus principales hitos beben del mandato de la anterior alcaldesa, Manuela Carmena, pese a las críticas a las que ha sometido a su administración y las promesas que formuló en precampaña para destruir su legado, muchas de las cuales nunca se han llegado a cumplir.
Distrito financiero
El principal anuncio del alcalde madrileño ha consistido en la creación de un nuevo distrito en la capital con el objetivo de generar “una marca para la ciudad” y competir con otras potencias europeas, comparando el proyecto madrileño con la City de Londres (Reino Unido) o el Distrito Financiero de Frankfurt (Alemania). La idea que tiene Almeida es que esta City madrileña agrupare a las cinco torres y a Madrid Nuevo Norte, el gran proyecto urbanístico de la ciudad de los próximos años, que se firmó bajó el mandato de Manuela Carmena y generó una profunda división en grupo municipal de Ahora Madrid.
Este proyecto incluía la construcción de un centro de negocios que avaló el Ministerio de Fomento y el Distrito Castellana Norte (DCN), la empresa promotora del proyecto Madrid Nuevo Norte. Los tres organismos pactaron la construcción de esta City financiera sobre la actual estación de Chamartín y sus alrededores con la intención de albergar nuevas sedes de bancos y grandes multinacionales. Unas obras en las que también se prevé reconstruir la propia estación de Chamartín.
Municipalización biciMAD
Otra de las medidas estrella que ha anunciado el alcalde del PP es la ampliación del servicio municipal de BiciMAD, el servicio de préstamo de bicicletas, a todos los distritos de la ciudad, pese a la oposición inicial de Almeida a la municipalización, que llegó a recurrir ante la justicia. Un año después de llegar al consistorio, en septiembre de 2016, Carmena anunció que la gestión del servicio, que hasta entonces estaba en manos de la compañía Bonopark, pasaría a depender de la Empresa Municipal de Transportes (EMT), es decir, de una empresa pública ya existente.
Esta decisión fue recurrida por el PP de Almeida, entonces en la oposición, que presentó una demanda contra una concejal del equipo de Ahora Madrid, Inés Sabanés, y el gerente de la EMT, Álvaro Fernández Heredia, por presuntos delitos de malversación de caudales públicos y prevaricación, al sostener que había sospechas de irregularidades en esta operación. El Juzgado de Instrucción número 52 de Madrid archivó la querella interpuesta en mayo de 2019, dos días antes de las elecciones municipales. La sentencia llegó después de realizarse un informe perital que recogía que los 10,5 millones que se pagaron a Bonopark fueron justos y tras la petición de sobreseimiento por parte de la Fiscalía.
Madrid Central (Madrid 360)
Uno de los caballos de batalla de Almeida fue, desde el principio, los planes de movilidad impulsados por el anterior equipo de gobierno. Y, sobre todo, Madrid Central, la zona de bajas emisiones de la capital que echó a andar allá por 2018 y que consiguió reducir la contaminación en toda la ciudad hasta un 10%, en contra de lo que la derecha aseguraba que pasaría.
Nada más llegar a Cibeles, Almeida acordó una moratoria de multas de tres meses, lo que, de facto, implicaba dejar sin efecto el área anticontaminación. Una semana duró el anuncio. La medida fue rechazada por los tribunales. Una justicia que, al mismo tiempo, ha acabado derribando Madrid Central. Por un defecto de forma, con el visto bueno del Supremo –que todavía tiene que resolver otros procedimientos en este sentido– y a raíz de un recurso del PP, quien a toda prisa se ha visto obligado a preparar una nueva ordenanza de movilidad casi idéntica a la que había. Eso sí, invirtiendo 185.000 en borrar de las calles el nombre del proyecto estrella de Carmena, que ahora recibe el nombre de Distrito Centro.
Calles de sentido único
Después de criticar la decisión del consistorio de Carmena de establecer un sentido único peatonal en calles céntricas de la capital, Almeida lo ha implantado durante su mandato. Esta medida va encaminada a evitar las aglomeraciones en épocas como las fiestas de Navidad o el puente de la Constitución, en las que Madrid recibe a muchos turistas. “Carmena ha dicho que la solución es sentido único y pensamiento único”, argumentaba Almeida en 2017.“Los madrileños no somos un rebaño al que manejar al antojo de Podemos”, escribía la cuenta oficial PP de Madrid en otra ocasión, adjuntando un vídeo en el que se veía a un policía municipal restringiendo el paso de viandantes. Almeida le exigía entonces a la alcaldesa de Madrid “medidas más efectivas que el simplista sentido único”.
La Ciudad de la Música
Ha sido la vicealcaldesa Begoña Villacís la que ha anunciado durante su intervención en el debate que el festival Mad Cool se quedará en Madrid y se instalará el próximo año en Villaverde, al sur de la capital. En esa línea la dirigente de Ciudadanos ha planteado crear la Ciudad de la Música. “Llevamos tiempo trabajando en la localización de un nuevo centro de acumulación de talento, economía y creatividad en torno a la producción musical”, ha dicho.
Se trata de una iniciativa que bebe de otro proyecto llamado Reinventing Cities a propuesta del exconcejal de Cultura Guillermo Zapata: “Las líneas generales del proyecto las escribí yo y está en el programa de gobierno de la anterior legislatura”, explica Zapata. Bajo el nombre de Ciudad del Sonido, proponía acondicionar un espacio de 3.000 metros cuadrados con locales de ensayo, formación y encuentro, además de una residencia para los estudiantes de música. “La iniciativa quedó desierta porque falló la parte privada. Me pregunto cómo lo financiarán ahora. No han dicho nada”, ha manifestado Zapata en Twitter, que ha lamentado la apropiación de la medida por parte de Villacís.
Peatonalización de calles
Una de las primeras decisiones del equipo de gobierno formado por Almeida y Villacís fue revertir la semipeatonalización de la calle Galileo al eliminar las jardineras y bancos del espacio ganado a los coches. El consistorio liderado por Manuela Carmena peatonalizó otras calles, pero su mandato destacó especialmente por quitarle espacio al coche en vías principales y con más afluencia de vehículos como Gran Vía. Actualmente el ejecutivo de Almeida ha eliminado la circulación de la Puerta del Sol y calles adyacentes, así como peatonalizado otras como Hortaleza, arteria principal del barrio de Chueca. Este martes ha anunciado que renovará también la calle de Santa María de la Cabeza (ubicada en el distrito de Arganzuela) con una zona peatonal y más zonas verdes.
Protocolo anticontaminación
En septiembre de 2019 Almeida presentó 200 medidas para limitar el problema de la contaminación en la ciudad. Se trataba de medidas que ya estaban incluidas en el Plan A de Calidad del Aire impulsado por el Ayuntamiento de Manuela Carmena y aprobado en 2017 tras dos años de consulta pública y debates con actores interesados y expertos en movilidad. Otras complementaban o detallaban intenciones del Gobierno de Ahora Madrid.
El expediente de la segunda gran estafa al equipo de Almeida revela la existencia de otra empresa en la operación
Específicamente, en lo que se refiere al protocolo anticontaminación, distintos cargos públicos del PP como el propio alcalde de Madrid o la actual presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, lo tildaban como un “ataque a la movilidad de todos los madrileños” cuando el consistorio presidido por Carmena lo puso en marcha. Pese a las críticas, en enero de 2020, Almeida activó el protocolo por primera vez limitando a 70 kilómetros por hora la velocidad máxima de los vehículos en la M-30. Actualmente se aplica en función de los niveles de dióxido de nitrógeno y la previsión meteorológica bajo penas de multa de 200 euros.
La reforma de la plaza España
El proyecto de reforma de la Plaza España, una de las más emblemáticas de la capital, culminó a finales del pasado año. Se trata de una obra que se puso en marcha en 2015, con Manuela Carmena al frente del consistorio, con el objetivo de identificarse con proyectos que hicieran de Madrid una ciudad sostenible. El anterior equipo de gobierno lanzó un concurso que estuvo acompañado por la participación ciudadana, que pudo pronunciarse sobre la idoneidad del proyecto.
El día de la inauguración de la remodelada plaza –tras más de dos años de obras–, Almeida quiso lanzar un “reconocimiento al anterior equipo de gobierno que tuvo la visión de proyectar un cambio sustancial en un espacio urbano como el de la Plaza de España”. “Este equipo de gobierno recogió el testigo del proyecto que se había diseñado e ideado por el equipo anterior y ha conseguido culminarlo, pero creo que es un mensaje positivo el de la continuidad institucional”, afirmó.
Este martes se ha celebrado el tercer debate sobre el estado de la ciudad de Madrid, el último antes de las próximas elecciones municipales. El alcalde de la capital, José Luis Martínez Almeida, quiere dejar un legado reconocible tras su paso por el consistorio como ha sucedido con sus antecesores, pero lo cierto es que después de sus tres años de mandato, son escasos los proyectos o las obras que se le atribuyen. Es más, sus principales hitos beben del mandato de la anterior alcaldesa, Manuela Carmena, pese a las críticas a las que ha sometido a su administración y las promesas que formuló en precampaña para destruir su legado, muchas de las cuales nunca se han llegado a cumplir.