"Mal resultado". En el PSOE no ocultan el golpe que ha supuesto este 18F, que ha conllevado la pérdida de cinco escaños en el Parlamento gallego, quedándose como tercera fuerza con sólo nueve diputados y sin poder sumar con el BNG para arrebatar el PP la Xunta de Galicia tras unos días en los que creyeron que había esperanza para la victoria. En la cúpula de Ferraz hacen varias reflexiones después de este descalabro y fuentes de la dirección subrayan que principalmente se ha producido una "transferencia de voto" del PSdG hacia el BNG, recordando que han perdido cinco escaños en tanto que los de Ana Pontón han incrementado su grupo en seis.
La dirección del PSOE también pone el foco en que el bloque progresista ha logrado un escaño más (34) respecto a las elecciones de 2020. Por lo que ha habido principalmente "vasos comunicantes" en el electorado progresista y lo que le ha faltado al PSOE es haber movilizado "voto nuevo" en esta cita electoral. Además, en Ferraz reconocen que no se ha cumplido su teoría de que podía haber cambio sí aumentaba la participación (se ha incrementado un 18% respecto a hace cuatro años). El análisis que hacen en el núcleo duro del PSOE es que precisamente se ha movilizado la derecha ante el miedo de que se pudiera perder la Xunta de Galicia.
El PSOE descarta que sea un voto de castigo por la amnistía
Los socialistas, a pesar de los grandes titulares, hacen también la reflexión "con datos empíricos" de que el Partido Popular ha bajado en dos escaños y ha reducido el porcentaje de voto en medio punto respecto a las elecciones de 2020. Remarcan al hilo en el entorno de Pedro Sánchez que el bloque progresista ha aumentado un escaño en relación a aquella cita.
En Ferraz analizan que se ha votado "en clave gallega" y descartan que haya habido una gran influencia de la política nacional en la cita del 18F. "La gente no ha ido en brazos al PP por la amnistía", insisten en la cúpula del partido, donde ponen de ejemplo que la formación que más ha crecido, el BNG, es una de las defensoras de la medida de gracia en el Congreso de los Diputados.
El bloque progresista pincha: el BNG logra su mejor resultado pero no suma por el desplome del PSdG
A pesar de la euforia en el PP, en Ferraz indican que a nivel nacional no va a suponer un cambio en el panorama político. "Estamos donde estábamos", resumen en la sala de máquinas del socialismo, donde sostienen que sí hubiera sido un terremoto en el caso de que los populares hubieran perdido su feudo gallego. "Es un mal resultado, pero otros llevan la penitencia en otros sitios", reflejan en relación al papel residual de los populares, por ejemplo, en el País Vasco y en Cataluña. De hecho, la próxima cita electoral serán los comicios de Euskadi, sin fecha aún, pero con la vista puesta en el 21 de abril.
"Besteiro va a seguir"
Lo que también traslada el PSOE en estas horas es que la confianza de Pedro Sánchez es total en José Ramón Gómez Besteiro, que se ha estrenado en unas elecciones con el peor resultado de su historia en la comunidad. Desde Ferraz ahondan en su apoyo al candidato: "Va a seguir y va a liderar el proyecto". Incluso dejan caer que será el aspirante de nuevo dentro de cuatro años, apuntan las fuentes del partido.
En Ferraz comentan que a Besteiro "le ha faltado tiempo" y sostienen que Alfonso Rueda convocó elecciones anticipadas para frenar a la oposición. Además, defienden la estrategia de no enfrentarse directamente en la campaña contra Ana Pontón: "Si la izquierda se pelea, la izquierda baja". "Pontón lleva ocho años picando piedra. Tiene un alto nivel de conocimiento y se ha concentrado más el voto en ella", resumen. Los socialistas tienen la intención de hacer oposición desde el primer momento y con la idea de crear un proyecto alternativo al PP que encabece el PSdG. Su teoría es que un cambio liderado por los socialistas es mucho más factible, por lo que no renuncian a superar al Bloque dentro de cuatro años. La noche del 18F les deja con cinco diputados menos y unas 46.000 papeletas perdidas.
"Mal resultado". En el PSOE no ocultan el golpe que ha supuesto este 18F, que ha conllevado la pérdida de cinco escaños en el Parlamento gallego, quedándose como tercera fuerza con sólo nueve diputados y sin poder sumar con el BNG para arrebatar el PP la Xunta de Galicia tras unos días en los que creyeron que había esperanza para la victoria. En la cúpula de Ferraz hacen varias reflexiones después de este descalabro y fuentes de la dirección subrayan que principalmente se ha producido una "transferencia de voto" del PSdG hacia el BNG, recordando que han perdido cinco escaños en tanto que los de Ana Pontón han incrementado su grupo en seis.