Nueva jornada de manifestaciones en Cataluña por la libertad de expresión y de apoyo al rapero Pablo Hasél, encarcelado hace una semanas tras ser condenado a nueve meses de cárcel por enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Corona, así como a los detenidos durante los disturbios ocurridos tras su detención. En Barcelona, tras la protesta celebrada el sábado pro la tarde, radicales han prendido fuego a una furgoneta de la Guardia Urbana en La Rambla mientras los agentes que la ocupaban seguían dentro (al menos uno), aunque ha tenido tiempo de salir, indemne.
Unas 4.000 personas, según cifras de la Guardia Urbana, han asistido a la manifestación pacífica de Barcelona en apoyo al rapero Pablo Hasél. Al principio se han concentrado unas 400 en la plaza Universidad, donde empezaba la convocatoria a las 18.00, y después el grueso de manifestantes ha pasado por la Ronda Sant Antoni hasta el Mercat de Sant Antoni.
Los disturbios han empezado minutos después, con grupos violentos en la Rambla del Raval, el Portal de Santa Madrona, la avenida Drassanes, La Rambla, la plaza de Catalunya, la Rambla de Catalunya y calles adyacentes a ésta. Al alcanzar la plaza de Catalunya, minutos antes de que empezara el toque de queda (fijado a las 22 horas), se han ido dispersando en grupos más pequeños que han seguido causando algunos destrozos y levantando pequeñas barricadas por la Rambla de Cataluña y calles adyacentes.
Los destrozos más significativos se han producido en La Rambla. Además de atacar a la comisaria de la Guardia Urbana, sobre las 20.15, varios radicales han prendido fuego a una furgoneta de la Guardia Urbana en La Rambla mientras los agentes que la ocupaban seguían dentro (al menos uno), aunque han tenido tiempo de salir, indemnes. Varios encapuchados han lanzado objetos contra la furgoneta y otro ha tirado después líquido inflamable, momento en que ha empezado el fuego: algunos lo han aplaudido y uno ha gritado: "Hijo de puta. Va, sal corriendo, cabrón".
Los Mossos d'Esquadra han detenido a un total de 14 personas por los altercados y disturbios tras la manifestación, uno de ellos detenido durante la mañana de este domingo. Según han informado fuentes de los Mossos a Europa Press, entre los detenidos hay dos menores de edad y uno estaría relacionado con el ataque a la furgoneta de la Guardia Urbana.
Reacciones políticas
Tras estos incidentes, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha calificado como "inaceptables" estos actos de vandalismo y violencia. "Inaceptables los actos de vandalismo y violencia que está sufriendo esta noche Barcelona", ha señalado este sábado que también ha mandado todo su apoyo a la Guardia Urbana, Mossos y Policía. Por su parte, el candidato del PSC a las elecciones catalanas y diputado electo, Salvador Illa, ha mostrado su "apoyo sin fisuras" a los Mossos d'Esquadra, la Guardia Urbana de Barcelona y el resto de policías locales tras los disturbios de este sábado por la noche. "Nuestra condena sin matices a los actos de vandalismo y de violencia gratuita e injustificada que estamos viendo en las calles de Barcelona y otras ciudades catalanas", ha añadido en un tuit .
El president en funciones de la Generalitat, Pere Aragonès, ha lamentado los disturbios de este sábado por la noche en Barcelona. "El saqueo o destrozo de comercios, la quema de mobiliario o el ataque a trabajadores públicos no son ni libertad de expresión ni de manifestación", ha dicho en un tuit recogido por Europa Press. "Siempre junto al ejercicio de los derechos y las libertades de manera pacífica, nunca de los actos vandálicos o la violencia", ha añadido.
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha expresado su "condena rotunda a los hechos violentos después de una manifestación pacífica". "El derecho a la protesta es totalmente legítimo. La violencia y el vandalismo, no", ha añadido en un tuit recogido por Europa Press. Ha constatado su apoyo a la Guardia Urbana, a los agentes de la comisaría de La Rambla, a vecinos y a comerciantes afectados por los disturbios.
El presidente del Partido Popular, Pablo Casado, ha dicho que la "irresponsabilidad" de quienes desde el Gobierno de Pedro Sánchez "amparan y jalean" los disturbios callejeros "debe tener consecuencias". Asimismo, el líder popular ha criticado la "intolerable pasividad" del ayuntamiento de Barcelona y de la Generalitat de Cataluña ante los actos vandálicos. El líder del PP catalán, Alejandro Fernández, ha afirmado que disturbios como los de este sábado en Barcelona y la quema de un furgón policial sólo pueden gestionarse con "la receta de Margaret Thatcher". En un tuit recogido por Europa Press, ha dicho que así lo haría si hubiera gobernado tras las elecciones catalanas, en las que ha sido candidato, aunque ha añadido que "los electores han dejado claro que no" le quieren gobernando.
El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha señalado que los disturbios ocurridos en Barcelona "es el terrorismo callejero que alimentan los aliados del presidente del Gobierno". "Este es el terrorismo callejero que alimentan los aliados del presidente del gobierno, que ha mentido a los españoles y ha pactado con todos los enemigos de la Nación y la Libertad", ha criticado, al tiempo que ha apunta que Sánchez "tiene que irse a su casa hasta que la justicia le siente en el banquillo.
La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha criticado que separatistas y Podemos "alientan" las protestas en Barcelona "mientras el Gobierno de España mira hacia otro lado". "¿Hasta cuándo?", se ha preguntado este sábado la líder de la formación naranja en una publicación en su cuenta de Twitter. El líder de la formación naranja en Cataluña, Carlos Carrizosa, ha lamentado los disturbios y ha concluido que "cuando el separatismo y el populismo ponen en la diana a la policía y negocian cómo desprotegerla, los violentos se vienen arriba", tras la quema de un furgón de la Guardia Urbana con al menos un agente dentro, que ha podido salir. "Basta ya: los gobiernos deben cerrar filas con los agentes y la ley", ha añadido en un tuit recogido por Europa Press.
1.800 manifestantes en la protesta de la mañana en Barcelona
Por la mañana, unos 1.800 manifestantes, según cifras de la Guardia Urbana de Barcelona y recoge Europa Press, han recorrido este sábado algunas calles del barrio de Sants en apoyo a Carles, un vecino que fue detenido y encarcelado por las protestas a favor del rapero Pablo Hasél, y que ha salido en libertad.
La movilización ha sido convocada por el grupo de apoyo CarlesLlibertat en la plaza de Sants, y ha sido encabezada por una pancarta en que se leía 'Basta de represión. Libertad represaliadas. Cuidémonos, luchemos, salgamos a la calle". Algunos de los manifestantes han mostrado pancartas a favor de Carles, y han clamado contra "la represión" y en defensa de la libertad de expresión.
En su ruta, han pasado por delante del bar que regenta Carles, que ha acudido a la puerta para saludar a los movilizados. Carles fue puesto en libertad este viernes -lo encarcelaron tras ser detenido el lunes-, pero la jueza le ha prohibido manifestarse o ir a reuniones reivindicativas, por lo que no ha podido participar en la manifestación.
800 personas en Girona
Marlaska niega que los disturbios en Cataluña sean terrorismo callejero y pide ser "cautos en las calificaciones"
Unas 800 personas se han manifestado este sábado a mediodía en Girona a favor de la libertad de expresión bajo el lema "Sin libertad no hay futuro". El acto empezó en la plaza Pompeu Fabra, frente al edificio de la Generalitat, y ha avanzado por la calle Jaume I hasta terminar en la plaza 1 d'Octubre.
Se han oído consignas como "Girona será la tumba del fascismo", "Ni un paso atrás" y "Libertad Pablo Hasél", en un ambiente festivo. En la plaza 1 d'Octubre se han pronunciado varios discurso "contra la represión" y también ha habido actuaciones musicales, entre ellos raps.
La manifestación no ha tenido incidentes y ha habido presencia de personas de todas las edades y con banderas independentistas y de La Forja.
Nueva jornada de manifestaciones en Cataluña por la libertad de expresión y de apoyo al rapero Pablo Hasél, encarcelado hace una semanas tras ser condenado a nueve meses de cárcel por enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Corona, así como a los detenidos durante los disturbios ocurridos tras su detención. En Barcelona, tras la protesta celebrada el sábado pro la tarde, radicales han prendido fuego a una furgoneta de la Guardia Urbana en La Rambla mientras los agentes que la ocupaban seguían dentro (al menos uno), aunque ha tenido tiempo de salir, indemne.