Aznar reprende al PP y a Aguirre por su trato a Botella

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Por momentos, este domingo, Madrid Río, el parque que se ubica a ambas orillas del Manzanares, parecía el Polo Norte. El Partido Popular de Madrid eligió este emplazamiento para uno de sus días grandes de campaña, ese en el que José María Aznar, actúa como estrella invitada. La culpa más inmediata de la frialdad, de los gestos helados, la tiene el plantón que Esperanza Aguirre dio a Ana Botella el pasado viernes en los actos institucionales del día de la ciudad de Madrid. Aunque la relación de Aguirre con el matrimonio Aznar-Botella ya lleva años en el congelador.

La candidata del PP de Madrid a la Alcaldía fue la primera en subir al escenario. Daba igual lo que dijese. Daban igual las flores que dedicase al presidente de honor del PP. Ni éste, ni su mujer, la alcaldesa saliente, se molestaron en aplaudir a Aguirre, en lanzar una sonrisa cómplice. Acaso un amago por parte de Aznar cuando la presidenta del PP de Madrid tuvo que interrumpir su intervención aquejada de un ataque de tos. "La alergia", diría Aguirre.

De ajustar cuentas se encargaría Aznar en su intervención. En lo político, su discurso fueron retazos de los que ha venido ofreciendo en los últimos días en Zaragoza, Logroño y Ávila: mucho orgullo PP y mucha llamada al voto al PP y no a populistas o a aquellos –Ciudadanos– que quieren poner edad a la política. Pero, estando en Madrid, no quiso perder la oportunidad de, además de pedir el voto para las candidatas, defender a la alcaldesa saliente. Todo, "pese a las circunstancias", es decir, pese a estar hablando de su propia mujer. Aznar se encargó de dejar claro que no está muy contento con el trato que Botella ha recibido del partido del que es presidente de honor. A tenor de sus palabras, no le sentó nada bien que Aguirre se convirtiera el pasado viernes en la protagonista ausente del acto de entrega de las medallas de oro del Ayuntamiento de Madrid, la ciudad que aspira a gobernar.

El también presidente de la fundación FAES, el laboratorio de ideas de los conservadores, señaló que en los últimos años han pasado cosas "ingratas e injustas", pero que en la ciudad de Madrid "se reconoce el proyecto del Partido Popular". Por si Aguirre no lo tenía claro, Aznar le recordó que su mujer "deja un legado como nadie lo ha recibido ni recibirá".

Mientras Botella no mudaba el gesto, su marido ponía el énfasis en que "nadie ha contribuido como Madrid a sanear las cuentas públicas de España entera". "Lo digo porque es la verdad y con orgullo y agradecimiento", sentenció. Y acto seguido lanzó su tirón de orejas a su partido: "Que es [el agradecimiento] lo que se merece recibir del PP y de los madrileños".

La soledad de la alcaldesa

Es público, porque se filtró de un comité ejecutivo regional del PP de Madrid, que Botella se sintió muy poco respaldada por su partido tras los trágicos sucesos del Madrid Arena, en noviembre de 2012, donde perdieron la vida cinco adolescentes. En su equipo también efean al PP de Madrid y al nacional que estuvo sola en la crisis de la huelga de basuras y cuando se produjeron las muertes por la caída de árboles en la capital el año pasado. A esto hay que sumar las presiones que sobre ella ejercieron los aguirristas a cuenta de la candidatura al Ayuntamiento de Madrid y que llevaron a la todavía alcaldesa a dar un paso al frente y ser ella misma la que se descartaba de la carrera electoral.

"Aquí se han bajado los impuestos. Querida alcaldesa. Querida Ana. Enhorabuena y gracias".

Y aplausos. Más aplausos. Pero Botella seguía sin inmutarse mientras Aznar dejaba claro que si para algo se había trasladado desde su casa a Madrid Río era para defender los años de Botella en la política. "Treinta años de servicio público ejemplar. En los buenos tiempos y en los malos", prosiguió. 

"A partir del 25 de mayo el legado no es losa ni hipoteca, será una gran oportunidad de hacer más grande nuestro proyecto", zanjó la primera parte de su intervención.

Botella ajusta cuentas con Aguirre

De impuestos también habló Botella, que siguió a Aguirre en el turno de palabra. Lo hizo para recordar a la que quiere ser su sustituta que si en noviembre ella es alcaldesa bajarán los impuestos. Y bajarán porque así lo ha previsto ella. Pero no fue éste el único toque que lanzó a la que un día fue su amiga y hoy está muy distanciada. Aguirre había señalado que aboga por un Madrid más seguro, más limpio y más libre. Y la alcaldesa le respondió: "Más seguro, más verde, también, pero más libre, lo dudo. Integrador, como siempre ha sido".

Las fuentes consultadas por infoLibre ponen el motivo directo del plantón de Aguirre a Botella del viernes en una reciente entrevista que la alcaldesa concedió a El País. “Me dolió muchísimo que Esperanza Aguirre relegara a mi gente”, era el titular. Aludía las negociaciones en el seno del PP de Madrid para la elaboración de las listas. Y la alcaldesa llegaba a admitir que llamó a Mariano Rajoy para que mediara en el conflicto.

Los ataques a Podemos y a Ciudadanos no faltaron en ni los discursos. Ni en el del presidente de honor del PP ni en el de las candidatas Aguirre y Cifuentes.

"Recuperar y ampliar el proyeco de centralidad"

Más allá de la defensa a Botella, Aznar estructuró su intervención en cuatro ejes: continuidad, perseverancia, estabilidad y renovación.

En lo relacionado con la continuidad, el líder de FAES abogó por la perpetuidad del PP en el poder: "Tienen mucha razón nuestros candidatos, que si vuelve la izquierda volverán las políticas que ponen en riesgo el bienestar". "Volverán las políticas de molestar y de meterse en la vida de todo el mundo", vaticinó. 

A su juicio, el PP tiene que "recuperar y ampliar el proyecto de centralidad". Y en este proyecto, Madrid es el "símbolo".

En el apartado de estabilidad, aprovechó para sacudir a Ciudadanos y Podemos. "Me tendrían que explicar por qué ahora resulta que el mejor candidato es el que no conoce nadie y por qué la inexperiencia es una virtud y una garantía". Y continuó en el bloque dedicado a la perseverancia: "El populismo es la mejor receta para ir directo a la quiebra y la pobreza. No se trata de que la izquierda venga peinada para un lado o para otro. Se trata de que no venga", añadió.

Aznar definió la renovación como "una mezcla inteligente de la continuidad, de la estabilidad y de la perseverancia". "Con la corrección de todas aquellas cosas que no van bien, que no se han hecho bien o que necesitan ser corregidas, reformadas o modificadas", matizó antes de volver a atacar a los partidos que han alterado el mapa electoral en los últimos meses. 

"La renovación no es descubrir la pólvora todas las mañanas los que se creen muy listos. Ni es que este país tenga que empezar desde cero cada 30 años. ¿Quién ha dicho que la Constitución española no sirve? ¿Quién ha dicho que nuestro sistema democrático no sirve? ¿Quién ha dicho que nuestro sistema institucional no sirve? Habrá que renovarlo. Habrá que cambiar algunas cosas. Pero la base esencial de los pilares democráticos de España, de nuestro éxito histórico, no la pueden romper a patadas cuatro revolucionarios de salón importados desde Venezuela", dijo en alusión directa a Podemos.

Aznar "Y yo digo, y perdón por la expresión, ¡tócate!"

"Estos que dicen que quieren para España un proceso constituyente que reconozca el derecho a la libre autodeterminación. Muy bien. Ustedes quieren un proceso constituyente para cargarse eso que se llama España. Que dicen 'nosotros, si estamos, en la oposición vamos a sacar a la gente a la calle'. Eso es, unos demócratas de toda la vida. Y que dicen 'somos socialdemócratas. ¿Y dónde lo hemos aprendido? En Marx y en Engels'. Y yo digo, y perdón por la expresión, ¡tócate!. En Marx y en Engels. El Capital y El Manifiesto Comunista", ironizó.

"Los herederos de Marx y Engels, entre otros, fueron Lenin y Stalin. Que para que se enteren algunos que todavía además dicen que son profesores universitarios, asesinaron por millones a los socialdemócratas que conocían. Para entendernos", dijo entre aplausos. "Y por si fuera poco, ahora descubren las virtudes de Venezuela, donde nos dicen, a priori, que no son partidarios de que los líderes de la oposición estén en la cárcel, pero como te empeñes un poco, os metemos en la cárcel a todos. Es una cosa extraordinaria", zanjó.

Al igual que en sus mítines anteriores, Aznar hizo un llamamiento a que los votantes descontentos del PP se acerquen de nuevo. Y terminó con un ¡Viva España!".Aguirre se olvida del "hijoputa"

En su intervención, la presidente del PP de Madrid y candidata a la Alcaldía prefirió hablar más de pasado que de futuro. de todo lo que ha conseguido Madrid con los Gobiernos conservadores. Y retó a "quien quiera" que encuentre en las hemerotecas un "solo" insulto suyo "contra un adversario político".

La candidata se olvidó, por ejemplo, de que en plena crisis por el control de Caja Madrid, fue cazada por un micrófono refiriéndose como "hijoputa" a uno de los consejeros.

En su ración diaria de ataques a quienes le disputan el consistorio se preguntó "qué harán si consiguen la Alcaldía esa mezcla de socialistas, comunistas y bolivarianos. Aunque todo indica que, en esa coalición de perdedores, acabará mandando el más radical, el que tiene como modelo la Venezuela de Maduro". 

Cifuentes: elecciones trascendentales

Por su parte, la candidata del PP a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, advirtió de que estas elecciones son "trascendentales" porque está en juego "un modelo de prosperidad" que ha costado muchísimo conseguir. 

La candidata señaló que "concurren a la cita partidos que ya han gobernado" y de los que ya se conoce lo que hacen cuando gobiernan. "Ese PSOE de Zapatero que arruinó España y que además, de dejar una herencia de "millones en facturas sin pagar", dejan otra que se llama Ángel Gabilondo, que fue ministro de Zapatero, dijo

Por último, señaló que los comunistas que ahora dicen ser "socialdemócratas", "comunistas hasta hace un año bolcheviques". "Cuidado con Podemos: esas ovejitas que son lobos disfrazados de ovejitas que van a dar el gobierno, si tienen posibilidad, a una coalición de izquierdas", que no gobernará Gabilondo, sino Podemos, mantuvo.

Aznar no cita a Rajoy y Rajoy sí, pero...

En ninguno de los mítines que hasta este domingo ofreció Aznar hubo mención expresa por su parte a Mariano Rajoy, el hombre al que cedió el control del PP. Rajoy, sin embargo, sí lo citó en un acto de campaña que clausuraba en Burgos. Pero no como expresidente del PP y del Gobierno, sino como expresidente de Castilla y León, tierra en la que se encontraba.

Ha sido en Burgos, en el mitin en el que ha participado junto al presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera. Y ha sido un día después de la participación del propio Aznar en la campaña de esta comunidad.

Aznar, citado en el juzgado por decir que Venezuela financió a Podemos

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Junto a Aznar, el presidente de los conservadores citó a Jesús Posada, Juan José Lucas y Juan Vicente Herrera. Este último es el actual presidente castellanoleonés y candidato.

"Gente seria y formal que se toma las cosas como hay que tomárselas cuando están en juego intereses de los ciudadanos", dijo de ellos.

Un día antes, Aznar había clausurado un mitin en Ávila. Ni Aznar ni Rajoy coincidirán en esta campaña.

Por momentos, este domingo, Madrid Río, el parque que se ubica a ambas orillas del Manzanares, parecía el Polo Norte. El Partido Popular de Madrid eligió este emplazamiento para uno de sus días grandes de campaña, ese en el que José María Aznar, actúa como estrella invitada. La culpa más inmediata de la frialdad, de los gestos helados, la tiene el plantón que Esperanza Aguirre dio a Ana Botella el pasado viernes en los actos institucionales del día de la ciudad de Madrid. Aunque la relación de Aguirre con el matrimonio Aznar-Botella ya lleva años en el congelador.

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