La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha anunciado este miércoles que el Ayuntamiento contratará los servicios de la empresa pública Tragsa para cumplir los servicios mínimos mientras dure la huelga de limpieza viaria, una acción que pondrá en marcha si las concesionarias no alcanzan un acuerdo con los trabajadores en el plazo de 48 horas.
Asimismo, Botella ha anunciado que pondrá en conocimiento de la Fiscalía el supuesto incumplimiento de los servicios mínimos para que vele por los derechos de la ciudadanía si no se llega a un acuerdo. Además, la primera edil ha asegurado que "no existe riesgo" para la salud de los madrileños.
Por su parte, la Confederación de Consumidores y Usuarios de Madrid (CECU Madrid) ha informado que las quejas que ha recibido la organización por la situación que se encuentra la ciudad se han "intensificado" y reclama al Ayuntamiento de Madrid que ejerza una mediación lo "más rápido posible" para tratar de resolver el conflicto. En general, según detalla CECU, el tono de esas quejas es de "preocupación, cuando no de irritación", frente a la situación en que se encuentran numerosas zonas de Madrid, por lo que la organización solicita al consistorio madrileño que, dada la "gravedad" que está alcanzado el problema, ejerza una mediación "lo más rápida posible" que permita impulsar el dialogo entre las partes y "resolver el problema".
Además, la Confederación de Comercio de Madrid (COCEM) ha afirmado que se encuentran "muy preocupados" por la huelga debido a "la imagen que se está proyectando en el exterior". Por este motivo, piden "que se cumplan los servicios mínimos" y "que se tomen medidas" para que esta situación no se extienda más. En declaraciones a Europa Press Televisión, el presidente de COCEM, Hilario Alfaro, ha asegurado que "hay mucha diferencia entre las calles por donde han pasado los piquetes y las que no" por ello, han exigido a los responsables que, aunque el derecho a huelga sea constitucional y haya que respetarlo, se "respete también el derecho a trabajar".
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Asimismo, desde la confederación madrileña han trasladado su preocupación por el hecho de que la huelga pueda continuar hasta el periodo navideño, puesto que consideran que "se está deteriorando la imagen que estamos proyectando fuera". "Están todos los periódicos internacionales sacando las imágenes y si ven esa foto de Madrid, muchos turistas pensarán si venir o no", ha añadido Alfaro.
En este sentido, los secretarios de Acción Sindical de CC.OO. y UGT, Ramón Górriz y Toni Ferrer, respectivamente, han acusado al Ayuntamiento de Madrid de no querer solucionar la huelga al plantear propuestas "inaceptables" para los trabajadores, por lo que han pedido a la alcaldesa, Ana Botella, que si "no está en condiciones, deje paso a quien pueda proporcionar una solución negociada a este conflicto". Además, ha condenado los actos "vandálicos" que las autoridades municipales han asociado a los paros.
Así, los sindicalistas han denunciado que el Ayuntamiento de Madrid decidió reducir el servicio de limpieza para poder costear los intereses de su deuda. "La alcaldesa debería decirle a los ciudadanos cuál es el problema real, el origen de este conflicto", han indicado. "Los sindicatos hemos hecho propuestas que han sido rechazadas, y no vamos a aceptar centenares de despidos y una reducción del 40% de los salarios. La alcaldesa debería decirle a las ciudadanos cuál es el problema real, y si no está en condiciones, que deje paso a quien pueda proporcionar una solución negociada en este conflicto", ha afirmado Górriz.
La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha anunciado este miércoles que el Ayuntamiento contratará los servicios de la empresa pública Tragsa para cumplir los servicios mínimos mientras dure la huelga de limpieza viaria, una acción que pondrá en marcha si las concesionarias no alcanzan un acuerdo con los trabajadores en el plazo de 48 horas.