Vecinos del barrio de Tetuán celebraron el desalojo que se llevó a cabo este viernes en el Hogar Social Ramiro de Ledesma, edificio donde llevaban instalados desde agosto unos okupas extrema derecha, ya que pondrá fin a la tensión que ha reinado en la zona durante las últimas semanas con motivo de los diferentes altercados vividos.
A primera hora de la mañana, agentes de la Policía Nacional irrumpieron en el edificio. Tres de los okupas que se encontraban en su interior lo abandonaron sin incidentes.
Ver másMultitudinaria movilización en Dresde (Alemania) contra el racismo y la xenofobia
"Todos los días había policía, lo que generaba mucha tensión. Este domingo, hubo una manifestación y los agentes no paraban de parar a la gente en la calle", relató una de las vecinas. Otra insistió en que "una casa que no es de ellos no se debe de ocupar". "Cada uno que ocupe lo suyo. Me parece bien que se hayan ido", señaló.
"Pienso que no ayuda no es lo que parece. Yo soy inmigrante y pienso que okupa es ilegal. Ser okupa está mal porque a nosotros el Estado nos obliga a hacer muchas cosas y procuramos hacerlas legales. Ha sido difícil vivir en esta situación por el miedo", declaró otra vecina.
Los okupas, que repartían comida a los vecinos pero sólo a los españoles, habían bautizado el edificio como Hogar Social Ramiro de Ledesma. El miércoles les llegó la orden judicial de desalojo, pero anunciaron que la recurrirían.
Vecinos del barrio de Tetuán celebraron el desalojo que se llevó a cabo este viernes en el Hogar Social Ramiro de Ledesma, edificio donde llevaban instalados desde agosto unos okupas extrema derecha, ya que pondrá fin a la tensión que ha reinado en la zona durante las últimas semanas con motivo de los diferentes altercados vividos.