El aumento del 20% en la partida destinada a becas generales –engañosa porque el Gobierno ha endurecido su acceso y eso hará que más de 10.000 universitarios se queden sin ellas, según admite Educación– no eclipsa la consolidación de los recortes que sí sufren otras partidas del ministerio de José Ignacio Wert.
El presupuesto educativo del Gobierno central aumentará un 10,6% el próximo año. Pasa de 1.944 millones a 2.150 en 2014, según el proyecto presentado por el Ejecutivo este lunes en el Congreso. A pesar de este aumento, el departamento de Wert sigue teniendo un 24% menos de presupuesto que hace tres años. En 2011 fueron 2.843 millones de euros. Y eso se deja notar en algunos programas que sí sufren recortes.
Es el caso del dinero para Secundaria, FP y Escuelas Oficiales de Idiomas. Esta partida, que será en 2014 de 100,93 millones de euros, sufre para el año que viene un recorte del 7%. Sin embargo, si es echa la vista atrás este apartado atesora un recorte acumulado del 70% desde 2011. La partida que más baja (-71,8%) es la dedicada a los servicios complementarios de la enseñanza, con un recorte muy drástico en el programa de cobertura de libros de texto, que pierde 18,52 millones y se queda sólo con 7,28 millones en 2014.
Tampoco remonta el dinero dedicado a los alumnos con más dificultades, que se engloba en la partida de Educación compensatoria y que se dirige a asegurar la igualdad de oportunidades. El próximo año aumentará sólo un 0,8%, es decir, 400.000 euros. Se queda con 53,26 millones. Y eso a pesar de que el año pasado se recortó un 68%. En 2012 esta partida alcanzó los 169,5 millones. Este recorte, señalan los expertos, es especialmente grave por tratarse de programas de refuerzo para los alumnos que van peor y porque se engloba dentro de un sistema educativo que todavía tiene muchas carencias. Según datos del propio ministerio, en el año 2011, el porcentaje de población de 18 a 24 años que no ha completado el nivel de Secundaria 2ª etapa y no sigue ningún tipo de educación o formación, era del 26,5%, casi el doble que la media europea.
También consolida su recorte el presupuesto para formación al profesorado. Aumenta 490.000 euros (un 14,1%), de 3,45 a 3.94 millones de euros, aunque se mantiene muy lejos de los presupuestado en años anteriores. Desde 2011 el dinero dedicado a la formación de los docentes ha caído en picado –48,39 millones–, un 92,5%. Otro de los programas que consolida un presupuesto a la baja es el dedicado a la enseñanza universitaria. Desciende 2,11 millones de euros, un 1,7%. Respecto a 2011, el recorte es de 279,25 millones de euros, un 69,9%.
En porcentaje, la partida que más aumenta –un 28,3%– es la dedicada al deporte escolar y en la Universidad, que tendrá 2,37 millones de euros en 2014, aunque se queda muy lejos de los 13,31 de 2012 y más aún de los 16,54 de 2011.
Becas
Habrá más dinero para becas generales –246 millones más– pero será más difícil tenerlas este curso tras el endurecimiento de los requisitos académicos para mantenerla o acceder a ella. No parecen desdeñables entonces las previsiones de diferentes expertos que, cuando el ministro Wert anunció esta subida, dijeron que difícilmente tendrá un impacto real. El capítulo de becas representa el 67,4% del presupuesto y el aumento se centra en la compensación a las universidades de los precios públicos por los servicios académicos correspondientes a los alumnos becarios exentos de su pago (+105,4 millones), las becas y ayudas de carácter general para universitarios y no universitarios (+107,4 millones) y la compensación a las universidades por las bonificaciones a alumnos de familias numerosas (+37,1 millones).
Sin embargo, el programa de becas Erasmus vuelve a sufrir otro fuerte recorte. Desde 2011 el recorte acumulado supera el 70%, desde los 62,7 millones de euros previsto para 2011 a los 18,1 presupuestados para 2014.
Piden cuatro años de cárcel para cuatro profesores y un activista por participar en una protesta contra los recortes educativos
De hecho, cuando el ministro anunció la subida en la partida de becas generales, la izquierda parlamentaria ya calificó este anuncio de farsa, pues, aunque se mantienen los umbrales de renta, el endurecimiento de los requisitos académicos dejará sin las ayudas más cuantiosas a decenas de miles de estudiantes. Para recibir cualquier ayuda monetaria los alumnos universitarios tendrán que tener al menos un 6,5 de media. Y, para mantenerla, aprobar entre el 65 y el 100% de los créditos en función de la rama y la nota obtenida en las materias superadas.
El ministro de Educación, en una entrevista en TVE, cifró en unos 10.000 el número de estudiantes con una puntuación académica de entre el 5 y el 5,5 que no accederán a la exención de tasas de acuerdo con los requisitos establecidos en el nuevo reglamento. Y eso que ese cálculo no incluye a los que pueden perderla por no alcanzar el número de aprobados que se requiere para mantenerla.
El nuevo reglamento, que cuenta con la oposición de alumnos, padres y docentes e incluso autonomías del PP, trae también cambios en la cantidad de dinero a la que tienen derecho los becarios. Este montante se reducirá entre 500 y 2.000 euros para todos los alumnos, aunque se completará con una cuantía de dinero variable que dependerá de la renta, los resultados académicos y el presupuesto disponible.
El aumento del 20% en la partida destinada a becas generales –engañosa porque el Gobierno ha endurecido su acceso y eso hará que más de 10.000 universitarios se queden sin ellas, según admite Educación– no eclipsa la consolidación de los recortes que sí sufren otras partidas del ministerio de José Ignacio Wert.