Europa Laica reclama al Gobierno de Asturias que frene el acuerdo con la Iglesia para la formación del profesorado

Europa Laica ve "inadmisible" que el Gobierno de Asturias (PSOE) haya cedido a una entidad de la Iglesia católica, en este caso la Facultad Padre Ossó, "la formación del profesorado de la escuela Pública en áreas estratégicas" como la diversidad. Esta entidad laicista pide al Ejecutivo del Principado, concretamente a la recién nombrada consejera de Educación, la paralización inmediata del convenio que pone en manos de una entidad confesional la formación sobre género de los docentes de la escuela pública y concertada.

Tal y como ha publicado infoLibre, el Gobierno del Principado de Asturias ha confiado a esta facultad de la Iglesia la formación del profesorado para la "atención a la diversidad" y la prevención de la "violencia de género" a través de un convenio entre la Consejería de Educación y Cultura y esta entidad cuyo patronato está presidido por Jesús Sanz Montes, arzobispo de Oviedo. El convenio acuerda el "desarrollo de actividades educativas de atención a la diversidad en los centros docentes financiados con fondos públicos", es decir, públicos y concertados. Y añade que ambas instituciones –la consejería y la facultad– trabajarán "por la equidad, la inclusión y la respuesta a la diversidad" mediante la formación del profesorado y los programas de innovación.

"Prioritariamente –señala el convenio– se tratará de programas que aborden alguna o algunas de las siguientes materias: el absentismo, la resolución de conflictos, la educación para la salud, la prevención de conductas xenófobas y racistas, la violencia de género, el acoso escolar y la inclusión de jóvenes con discapacidad".

"En los pasos finales de la legislatura acabada", señala Asturias Laica en un comunicado, "el consejero de Educación saliente [Genaro Alonso], aprovechando el colapso producido en el sistema educativo por el final del curso y la convocatoria de unas muy amplias oposiciones, decide someter la formación del profesorado de la escuela pública a una entidad bajo el control del obispado". Asturias Laica lamenta que una entidad "confesional" se haga cargo de la formación del profesorado en "los aspectos socialmente más sensibles", como "acoso escolar, violencia de género y violencia racista". "Para la iglesia católica ha sido de gran importancia estratégica controlar la formación del profesorado como base para controlar la educación. Forma parte indisoluble de su historia, pero alcanzó uno de sus máximos durante la dictadura, al amparo de aquel “Caudillo por la gracia de dios” que la buscó (y la encontró) como aliada para perpetrar su golpe de Estado (llevándolo bajo palio)", señala la entidad laicista, para la cual los acuerdos con la Santa Sede de 1976-1979 "constituyen el último bastión desde el que defienden su control sobre esa educación, control que le resulta crucial en unos tiempos en que se encuentra debilitada por la imparable secularización de la sociedad".

"Nos parece inadmisible el intento realizado por el ya cesado [consejero de Educación]. Es muy grave que se haga coincidir un debilitamiento de los centros de formación del profesorado con una cesión inasumible de competencias formativas a una institución teledirigida por la Iglesia católica", añade el colectivo, integrado en Europa Laica. La entidad se dirige a la recién nombrada consejera de Educación, Carmen Suárez, "para requerirle la inmediata paralización del acuerdo urdido por su antecesor". "Es imprescindible que el sistema público sea el garante de la formación de su profesorado así como que una rigurosa ejecución del principio de separación iglesias/Estado necesario en un Estado aconfesional impida la intromisión de una institución decididamente confesional en esa formación del profesorado. Consecuentemente hacemos un llamamiento a todas aquellas organizaciones implicadas en la defensa de una Escuela Pública y Laica para actuar contra esta inadmisible cesión", concluye.

Una facultad de la Iglesia

El Gobierno de Asturias fía la formación sobre género del profesorado a una facultad de la Iglesia

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La Facultad Padre Ossó está ideológicamente marcada por su adscripción religiosa. Incluida por la Conferencia Episcopal Española (CEE) en su listado de "centros de la Iglesia", nació en 1965 como Escuela de Magisterio de la Iglesia Padre Enrique de Ossó, bajo la gestión de la Institución Teresiana. José Prieto, firmante del convenio junto a Genaro Alonso, es el primer decano laico en sus 50 años de historia. "La Institución Teresiana permanece ligada al centro en su pertenencia al patronato de la fundación canónica que lo rige, al que también pertenecen los Escolapios, San Vicente de Paúl [...], el Seminario Metropolitano de Oviedo y el Arzobispado", señalaba la diócesis de Oviedo en 2016.

La Facultad Padre Ossó, un centro privado adscrito a la Universidad de Oviedo, hace gala de su ligazón religiosa. "El Departamento de Pastoral y Voluntariado constituye también una pieza importante del centro y es fiel reflejo de nuestra identidad cristiana", señala en su web. La facultad, aclara un portavoz de la misma, "responde bajo la razón social Fundación Educativa Padre Ossó", inscrita en el Registro de Entidades Religiosas del Ministerio de Justicia.

El presidente del patronato de la facultad es Jesús Sanz Montes, arzobispo de Oviedo, distinguido por su adscripción al sector más duro del episcopado y contrario a la regulación del aborto, la Educación para la Ciudadanía, el matrimonio homosexual y la "ideología de género". La facultad cuyo patronato preside este arzobispo es la que va a formar a los profesores en atención a la diversidad.