Dos meses después de anunciar una moción de censura contra Pedro Sánchez, parece que Vox ha encontrado a su candidato para defenderla en el Congreso: el ex dirigente comunista y economista Ramón Tamames. Desde su entorno confirman a infoLibre que está sopesando la oferta del partido ultra y el próximo martes anunciará su decisión tras reunirse con el presidente de Vox, Santiago Abascal, para negociar los detalles. Estas fuentes admiten que la balanza se inclina a favor de aceptar el encargo ante la necesidad de "combatir" a un Gobierno que él mismo tilda de "miserable". "¿Cuál es la preocupación del Gobierno Frankenstein? El aborto, la prostitución, la menstruación dolorosa, buscar audios de hace 12 años, buscar las corrupciones del PP de Esperancita para ver si consiguen machacar la figura de Feijóo... Es un Gobierno bastante miserable", aseguró en una reciente entrevista con El Mundo.
Tamames es un economista, respetado fundamentalmente por su obra de referencia Estructura económica de España, exdirigente del Partido Comunista de España (PCE), formación a la que se afilió en el año 1956 para combatir al régimen franquista. Fue detenido por participar como representante de la formación en una manifestación contra la dictadura y pasó doce meses encarcelado. Fue diputado por Madrid y primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Madrid durante la alcaldía del socialista Enrique Tierno Galván. Tamames también participó en la creación de Izquierda Unida en 1986, pero tres años más tarde se marchó al extinto CDS. Poco después abandonó la política institucional.
El veterano político ocupaba su escaño durante el intento del golpe de Estado del 23F de 1981. Y su nombre figuraba en la quiniela para "un Gobierno de salvación nacional" rubricada por el general Alfonso Armada. Su compañero de filas y exlíder del PCE Felipe Alcaraz rememora ese episodio en conversación con infoLibre. “Cuando me he enterado de que está valorando la propuesta de Vox, inmediatamente he dado un salto mental de cuarenta años a cuando estuvimos secuestrados en el Congreso. Él figuraba en la lista de ministros que Armada le enseñó a Tejero. Esto me recuerda a ese entramado del gobierno de concentración”, explica. Es más, Alcaraz recuerda la frase de Tamames cuando Tejero apareció en el Congreso: “Dijo 'coño, el chino'. Le pregunté por esas palabras en varias ocasiones y nunca me dio una respuesta clara. Sería por el bigote de Tejero”, apunta el exdirigente entre risas.
A Alcaraz no le sorprende del todo el viraje de su antiguo colega, con el que ya no tiene relación. "Hace tiempo que inició un camino hacia el neoliberalismo. Su deriva hacia la derecha ha sido constante", explica. "Pasó de luchar por las libertades en el franquismo a aceptar la norma dominante y meterse en los entresijos de la derecha", prosigue. Sin embargo, el exlíder del PCE cree que Tamames "no puede aceptar" ser el candidato de Vox, un partido "heredero" del franquismo. "Rompería con su imagen de luchador antifranquista. Es una ruptura total con su propia historia. Si lo hiciera, culminaría su trayectoria de manera muy triste", zanja.
El filofranquismo de Vox
Lo cierto es que Vox y militancia antifranquista parecen, efectivamente, antónimos. El partido de Abascal ni reniega del franquismo, ni lo condena, ni hace un juicio severo, ni siquiera crítico del mismo. "Somos herederos de nuestra historia", sostienen para justificar su posición. La defensa de la legitimidad del golpe de Estado de 1936 y la apuesta por una dictadura como el mal menor forman parte de la columna vertebral de su discurso.
El propio Abascal culpa del inicio de la guerra no a los generales sublevados, sino a la República y, en concreto, "al PSOE y los separatistas", situando la revolución de 1934 como el inicio del conflicto. El exsecretario de organización, Javier Ortega Smith, llegó a decir que el bando franquista fusiló en la Guerra Civil a sus adversarios "sin odio, con amor". En 2016 el número dos del partido, Ignacio Garriga, escribió en Twitter: "18 de julio. Hoy agradezco a mis abuelos que en un día como hoy se lanzaron a defender nuestros principios". El tuit sigue ahí publicado.
La formación ultraderechista también se opone a la retirada de calles a franquistas y reclama la derogación de la normativa de memoria histórica, al igual que plantea Tamames. "¿Ahora hay que prohibir todo eso? ¿Toda esa historia? Deje usted, Sánchez, a los muertos y defiéndalos con la historia, no con el Boletín Oficial del Estado", aseguró el economista en una entrevista con El Confidencial.
Cuando se produjo el debate y la posterior aprobación de la norma en el Congreso, los portavoces de Vox defendieron que la historia es subjetiva y que el régimen franquista se caracterizó por ser un periodo de "paz y prosperidad". Esas fueron las palabras del diputado ultra Francisco José Contreras, que también justificó desde la tribuna el asesinato del anarquista Salvador Puig Antich, asegurando que el régimen de Francisco Franco lo ejecutó —con la técnica del garrote vil— porque mató a un policía, Francisco Anguas, pese a que su "juicio" estuvo repleto de irregularidades.
Las dificultades de Abascal para encontrar a su candidato
No es la primera vez que la formación liderada por Abascal presenta una moción de censura. Ya lo hizo en octubre de 2020 y se saldó con el menor apoyo de la historia de la democracia a una moción de censura. Apenas 52 votos a favor frente a 298 en contra. Entonces, el aspirante a la presidencia del Gobierno fue el propio Abascal ante la falta de candidatos alternativos.
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Entonces, Vox tanteó sin éxito como candidato a Jaime Mayor Oreja, que declinó la propuesta. En esta ocasión han surgido otros nombres, como el de la exlíder de UPyD Rosa Díez, el del exdiputado de UPN Carlos García Adanero, el del exparlamentario de Ciudadanos Marcos de Quinto, el del expresidente de la Comunidad de Madrid Joaquín Leguina, o el de la actual diputada del PP Cayetana Álvarez de Toledo.
La formación ultra cree que, con Tamames como candidato, podrá obtener el apoyo de las otras fuerzas situadas en el bloque de la derecha, al ser un candidato "independiente" que incluso militó en el PCE. La moción presentada en 2020 se saldó con un contundente rechazo del entonces líder del PP, Pablo Casado, que enarboló un duro discurso contra Abascal que dinamitó las relaciones entre ambos. Tampoco la apoyó Ciudadanos.
En esta ocasión, Alberto Núñez Feijóo ya anunció públicamente que el PP no se opondría a la iniciativa, lo que implica, como mínimo, una abstención. Un cambio de posición que consolida el discurso cada vez más complaciente de Feijóo con la ultraderecha. El nuevo líder del PP parece haber enterrado sus críticas a Vox. Y las razones que le llevaron, en la moción de censura de 2020, a aplaudir de manera entusiasta la decisión de Pablo Casado de votar en contra. Pero sus criticas han desaparecido por completo después de que, según todas las encuestas, sólo podrá gobernar España si llega a acuerdos con Vox.
Dos meses después de anunciar una moción de censura contra Pedro Sánchez, parece que Vox ha encontrado a su candidato para defenderla en el Congreso: el ex dirigente comunista y economista Ramón Tamames. Desde su entorno confirman a infoLibre que está sopesando la oferta del partido ultra y el próximo martes anunciará su decisión tras reunirse con el presidente de Vox, Santiago Abascal, para negociar los detalles. Estas fuentes admiten que la balanza se inclina a favor de aceptar el encargo ante la necesidad de "combatir" a un Gobierno que él mismo tilda de "miserable". "¿Cuál es la preocupación del Gobierno Frankenstein? El aborto, la prostitución, la menstruación dolorosa, buscar audios de hace 12 años, buscar las corrupciones del PP de Esperancita para ver si consiguen machacar la figura de Feijóo... Es un Gobierno bastante miserable", aseguró en una reciente entrevista con El Mundo.