La Unión Profesional de Fiscales (UPF) ha subrayado este miércoles que algunos de los nombres que el fiscal general del Estado, José Manuel Maza, ha propuesto para ocupar puestos de la cúpula fiscal suponen "un claro retroceso en la pretendida autonomía" del Ministerio Fiscal porque su designación solo puede explicarse "desde un interés eminentemente político e ideológico".
En un comunicado tras conocerse la treintena de nombramientos que el fiscal general del Estado propondrá al Consejo de Ministros para ocupar puestos en la cúpula fiscal, la asociación destaca especialmente el caso de la Fiscalía Superior de Murcia, para la que se ha propuesto a José Luis Díaz Manzanera para sustituir a Manuel López Bernal, que es quien ha solicitado la imputación del presidente autonómico, Pedro Antonio Sánchez.
"Es especial el caso de Murcia, en el que si algún ejemplo había que dar a la sociedad para apuntalar la confianza en la Fiscalía era mantener al Fiscal Superior frente a las intolerables presiones y la imagen de nuestra Institución que han tratado de dar algunos políticos", ha criticado la UPF, que recuerda que López Bernal no acudirá como Fiscal Superior el día 6 de marzo a la toma de declaración en calidad de investigado del todavía Presidente de la Comunidad Autónoma de Murcia, según ha informado Europa Press.
"Hemos entendido el mensaje", ha ironizado la asociación de fiscales, que ha subrayado que confiaba en que el mandato de Maza supusiera "de una manera clara y rotunda" el afianzamiento de la autonomía en el Ministerio Fiscal respecto al Poder Ejecutivo. Pero, por contra, estas propuestas y la no renovación de algunos fiscales en sus plazas –"casualmente en su mayoría asociados" a la UPF, denuncia– suponen "un claro retroceso" en esa pretendida autonomía.
El caso de Javier Zaragoza o José Luis Bueren
La UPF cita algunos de esos casos en los que considera que su propuesta o no renovación "solo pueden explicarse desde un interés eminentemente político e ideológico" como son los supuestos de Javier Zaragoza al frente de la fiscalía de la Audiencia Nacional o José Bueren como encargado de la Unidad de Apoyo de la Fiscalía.
En el caso del fiscal Zaragoza, al que se refiere como "irremplazable", ha subrayado su papel en la lucha antiterrorista y ha incidido en que esa experiencia debería ser aprovechada para combatir el terrorismo internacional.
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Mientras, en el caso de Bueren ha aludido a su papel en la negociación directa con el Ministerio de Justicia y la "manifiesta confrontación" de la Unidad de Apoyo dirigida por Consuelo Madrigal con el equipo ministerial.
Igualmente ha considerado que "únicamente" puede explicarse "por motivos ideológicos" el relevo de Juan Calparsoro al frente de la Fiscalía Superior del País Vasco. "Parece un castigo a los años de dedicación al servicio del estado de Derecho y la democracia española en una coyuntura tan complicada como ha sido la culminación del proceso de paz, contribuyendo con su lealtad institucional al momento histórico del fin de la violencia en el País Vasco y la derrota del terrorismo", ha alegado.
En cualquier caso, la asociación de fiscales ha felicitado a los propuestos y ha enfatizado que sus críticas son "una llamada de atención" para constatar que el modelo de Fiscalía al que aspira "es el de profesionales integrados en una institución al servicio de los ciudadanos, sin deudas que pagar a la clase política y con una total y absoluta autonomía del Poder Ejecutivo".
La Unión Profesional de Fiscales (UPF) ha subrayado este miércoles que algunos de los nombres que el fiscal general del Estado, José Manuel Maza, ha propuesto para ocupar puestos de la cúpula fiscal suponen "un claro retroceso en la pretendida autonomía" del Ministerio Fiscal porque su designación solo puede explicarse "desde un interés eminentemente político e ideológico".