El Gobierno respondió este viernes en la rueda posterior al Consejo de Ministros a la advertencia lanzada por el líder socialista, Pedro Sánchez, tras reunirse el jueves con Mariano Rajoy en el palacio de La Moncloa: el PSOE tomará medidas legislativas si no dialoga con Cataluña. El portavoz del Ejecutivo sostuvo que, en la reunión, el secretario general del principal partido de la oposición "no puso de relieve ninguna de ellas". Pero, dijo, las estudiarán con "enorme interés".
En todo caso, el Gobierno está interesado en conocer las medidas concretas que se proponen. "Nos gustaría conocer la iniciativa, no hablar en abstracto", añadió Íñigo Méndez de Vigo.
El portavoz de Moncloa señaló que "diálogo ha habido siempre, lo hay y lo habrá", pero lamentó que desde la otra parte, desde la Generalitat de Cataluña, no haya la misma disposición. "Para bailar el tango hacen falta dos", sostuvo.
Méndez de Vigo consideró que el Gobierno de Puigdemont "supedita todo el diálogo a que se celebre un referéndum", por lo que en ese escenario es "muy difícil llegar a ningún tipo de acuerdo".
La aplicación del artículo 155
Ante la posible utilización del artículo 155 de la Constitución para frenar el referéndum, el también ministro de Educación insistió en que se irán tomando decisiones desde el Gobierno en función de los pasos que vayan dando los independentistas. "No voy a entrar en qué medidas tomará el Gobierno porque las medidas se corresponderán con lo que lleven a cabo los secesionistas", dijo al tiempo que añadió que "hasta ahora no ha habido más que anuncios de anuncios".
En el Gobierno y en el PP son conscientes de que, a medida que se se vaya acercando la fecha, incrementarán las presiones desde sectores "políticos y mediáticos" para que se anuncien medidas concretas como la aplicación del artículo 155 de la Constitución. Este contempla lo siguiente: "Si una comunidad autónoma no cumpliere las obligaciones que la Constitución u otras leyes le impongan, o actuare de forma que atente gravemente al interés general de España, el Gobierno, previo requerimiento al presidente de la comunidad autónoma y, en el caso de no ser atendido, con la aprobación por mayoría absoluta del Senado, podrá adoptar las medidas necesarias para obligar a aquélla al cumplimiento forzoso de dichas obligaciones o para la protección del mencionado interés general".
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La aplicación del 155 requiere más tiempo que las 24 horas de las que habló Santamaría el martes. El artículo 189 del Reglamento del Senado marca el proceso: el Gobierno deberá presentar ante el presidente de la Cámara una escrito en el que se manifieste el contenido y alcance de las medidas propuestas, así como la justificación de haberse realizado el correspondiente requerimiento al presidente de la Comunidad Autónoma y la de su incumplimiento por parte de ésta.
Cumplido este trámite la Mesa del Senado "remitirá dicho escrito y documentación aneja a la Comisión General de las Comunidades Autónomas, o bien procederá a constituir una Comisión". A partir de ahí, el presidente del Senado, dará un plazo al presidente autonómico para formular alegaciones. Es la Comisión la que decide si procede elevar a Pleno la propuesta del Gobierno, que para salir adelante necesita el voto favorable de la mayoría absoluta de los senadores.
A diferencia de lo que ocurre en el Congreso, el Partido Popular tiene mayoría absoluta en el Senado.
El Gobierno respondió este viernes en la rueda posterior al Consejo de Ministros a la advertencia lanzada por el líder socialista, Pedro Sánchez, tras reunirse el jueves con Mariano Rajoy en el palacio de La Moncloa: el PSOE tomará medidas legislativas si no dialoga con Cataluña. El portavoz del Ejecutivo sostuvo que, en la reunión, el secretario general del principal partido de la oposición "no puso de relieve ninguna de ellas". Pero, dijo, las estudiarán con "enorme interés".