El proceso de confección de la candidatura de Izquierda Unida para las elecciones europeas entra en tiempo de descuento. Tras meses hablando sobre los ejes programáticos claves –el combate a la troika y las políticas neoliberales– y sobre las potenciales alianzas –ninguna de ellas aún cerrada–, la federación de Cayo Lara se embarca definitivamente en el proceso de discusión de la lista. Y de su cabecera, claro. Y ahí las dudas sobre idoneidad de un tercer mandato del eurodiputado Willy Meyer persisten. Nada está claro aún y, como analizan diversos dirigentes, "todo puede pasar".
Ayer miércoles se constituyó la comisión ad hoc para la construcción de una candidatura de consenso al Parlamento Europeo, formada por 15 responsables (cinco nombrados a propuesta del coordinador, los coordinadores de las cinco federaciones más grandes, cuatro representantes de las distintas sensibilidades y el secretario federal de Organización). Su misión es presentar, el próximo 1 de marzo, una lista de acuerdo al Consejo Político Federal de IU, su máximo órgano de dirección. En la reunión se pactó un calendario de trabajo y el funcionamiento básico. Y aunque no se debatió expresamente sobre el número uno, varios de los asistentes al encuentro se llevaron la impresión de que "no existe unanimidad" en torno a Meyer, y se cree, en algunos sectores, que el contexto político, con una IU al alza, "exige una mayor audacia". No se cuestiona "el mérito y el trabajo" del europarlamentario, su hoja de servicio, pero sí si es quizá el mejor cartel para los comicios del 25 de mayo. "Es verdad que todo esto se ve sotto voce, porque no se ha entrado a fondo en la reunión", precisaba un barón.
Hace cinco años, de cara a las anteriores europeas, el nombre de Meyer apenas suscitó controversia. El camino hacia las elecciones de 2014, en cambio, sí se ha presentado algo más cuesta arriba para él, sin que nadie pueda prejuzgar qué pasará finalmente. Con mayor nitidez, le apoyan las direcciones de Andalucía –su federación de origen–, Madrid, miembros de la ejecutiva federal y, singularmente, su coordinador, Cayo Lara, según dejó ver él mismo el lunes en rueda de prensa. No son pocas agarraderas orgánicas, porque los dos territorios son los dos más grandes de IU. A partir de ahí, la posición de otros territorios es más difusa. Murcia, por ejemplo, ha aprobado que la cabeza de lista sea una mujer, dado que el número dos, previsiblemente, será un hombre, Ernest Urtasun, pues ese es el candidato que ha elegido Iniciativa per Catalunya Verds (ICV) en primarias entre militantes. Los ecosocialistas ya ocuparon ese puesto en 2009 y 2004, y se cuenta con que repetirá casilla.
Defensa del coordinador andaluz
"Willy tal vez no representa lo mejor para este momento, en un debate de apertura a la sociedad como el que tenemos. Podría ser incluso uno de los miembros de la candidatura, pero tal vez no el uno. Hay gente que prefiere que lidere una mujer, que se dé un mensaje de cercanía a los movimientos sociales, una política de combate...", subraya uno de los dirigentes territoriales, que pide expresamente el anonimato. Las reservas se explican porque el debate se halla en un punto muy "inicial" y porque aún queda recorrido, dado que las federaciones tendrán hasta el 20 de febrero para elevar sus propuestas a Olimpo, la sede federal. Además, ayer la cuestión de los nombres fue "más secundaria". De hecho, quien mentó a Meyer fue el coordinador andaluz, Antonio Maíllo, "dentro de una valoración positiva de su trabajo en Europa y en el marco general de una candidatura que debe seguir representando el discurso contra la troika y el bipartidismo", según resumía otra responsable. En ese aprobado general coincide la mayoría de IU.
Los otros dos nombres propios son los de Marina Albiol y Adoración Guamán, propuestos ya formalmente por Esquerra Unida del País Valencià (EUPV). La primera, de 31 años, es diputada por Castellón en Les Corts y ha sido un visible ariete contra la gestión del PP y del hoy condenado Carlos Fabra, y es vista con muy buenos ojos por los sectores que más recelan de Meyer. La segunda, profesora de Derecho del Trabajo en Valencia y candidata al Senado en las generales de 2011. El tercer aspirante valenciano es el médico Asensio García. Marga Sanz, la coordinadora de EUPV, sí aclaró que la federación no postula a Albiol como cabecera de cartel. Lo que quiere la dirección es "tener una buena posición" en la candidatura, como en 2009, cuando la alicantina Esther López Barceló ocupó el número cuatro (la tres si se descuenta al representante de ICV).
Así las cosas, "todo puede pasar", según verbalizan varios dirigentes. Que Meyer repita por tercera vez –es eurodiputado desde 2004–, que pueda encabezar Albiol o que surja incluso un tercer nombre. El puzle, desde luego, no será fácil de armar, ya que IU debe contentar a sus federaciones y sus sensibilidades, integrar a los representantes de las fuerzas aliadas e incluir a activistas de movimientos sociales que le permitan dar proyección hacia el exterior. Además, según plantearon este miércoles algunos responsables, ha de discutirse "toda la lista a la vez", no el número uno de forma separada.
Los apoyos orgánicos de Meyer
La necesidad de lanzar un mensaje distinto para una coyuntura distinta a la de 2009 ya se venía comentando en la dirigencia de IU desde hace meses. Pero, según opinan varios responsables contactados por este diario, ha "apuntalado" esa intención la irrupción de Podemos, la plataforma de lanzamiento del profesor y tertuliano Pablo Iglesias. Sin embargo, Meyer tiene a su favor su peso e influencia en Andalucía, en el PCE y en el ámbito federal –es secretario de Política Internacional y uno de los hombres de total confianza de Lara–, el respeto y valoración de su trabajo en el conjunto de IU y que enfrente no hay ningún "candidato fuerte" y con tanto anclaje orgánico. Este periódico no logró contactar con Meyer en los dos últimos días.
Desde la dirección federal, su secretario de Organización, Miguel Reneses, subrayaba que aún es pronto para hablar de cabeza de lista, porque "no existe ninguna propuesta formal". De hecho, Meyer no ha abierto aún la boca y la dirección andaluza, la que previsiblemente le postulará, aún no se ha reunido y elevado a Olimpo su nombre. De hecho, lo que se acordó en la reunión es remitir una circular a las federaciones, para que remitan a la comisión de consenso, antes del 20 de febrero, no sólo sus propias propuestas –un hombre y una mujer para incorporarse a la lista completa–, sino sus opiniones sobre la ordenación de la candidatura y del cabeza de cartel. La cita, que se celebró en Olimpo por espacio de algo más de dos horas, fue "positiva y en tono constructivo", y se pactó adoptar las siguientes decisiones por acuerdo "y no por votación". La siguiente reunión de la comisión será el próximo 7 de febrero, día antes de la Conferencia sobre Modelo de Estado.
"El objetivo, desde luego, es lograr una candidatura de consenso para presentarla al Consejo Político del 1 de marzo", aseguró Reneses a infoLibre. Si esa meta no fuera posible, el máximo órgano de dirección entre asambleas, compuesto por más de 200 cuadros, deberá votar entre las distintas listas que compitan. En este último extremo, Meyer necesitaría un respaldo del 60%, porque esta sería su tercera legislatura. Un apoyo que tal vez no tendría tan al alcance de la mano. Sobre los nombres, la cúpula federal es cauta, aunque no niega que "existen opiniones diversas".
Primarias abiertas en IzAb
La palabra la tienen ahora, en primera instancia, las federaciones. Según se aprobó en el último Consejo Político, el pasado 11 de enero, podrán elegir a sus candidatos (un hombre y una mujer) como ellas quieran, sin excluir el procedimiento de primarias. Así hará, por ejemplo, Murcia.
Izquierda Abierta, el partido de Gaspar Llamazares y Montse Muñoz, designará a su representante en la lista por primarias abiertas a los ciudadanos. De hecho, sus militantes tienen de plazo hasta el 26 de enero para recoger los avales (un mínimo de 50 y un máximo de 70). De momento, compiten los andaluces Tasio Oliver, Juanma García Arcos y Mar Cambrollé y los madrileños Pedro Chaves y Marta Ávila. La votación será el 23 de febrero. IzAb volvió a recordar en la sesión de ayer la necesidad de componer la lista a través de primarias ciudadanas, pero esa alternativa está descartada, por la exigencia de IU de componer su plancha con distintos componentes.
Uno de esos componentes son los partidos socios. Las cosas en ese punto están en stand by. La alianza con Anova se encuentra aún parada por el estallido interno de la formación de Xosé Manuel Beiras, como tampoco hay respuesta final de Chunta Aragonesista. Con ICV todo está más amarrado. La unión con Equo sí que está bastante más lejana. Otro de los acuerdos de ayer es, precisamente, seguir realizando "un llamamiento" a la participación de colectivos sociales y fuerzas políticas para, juntos, llegar al 25 de mayo con un frente amplio contra la troika y las políticas de austeridad. La dirección no se niega a sentarse con Podemos, pero no está dispuesta a ir a remolque de Iglesias, porque defiende que la federación es la fuerza mayoritaria.
De cualquier modo, es una obsesión clásica de IU el proyecto, más que las caras. Como resalta un alto cargo territorial, "la bondad de la lista residirá en la propuesta para Europa y en un conjunto de nombres con los que se identifiquen lo que se mueve en la calle. Y ese movimiento es muy diverso, en intereses y generacionalmente".
Todo está por coser, extramuros de IU y en la propia IU. Tarea que han de ir armando los 15 miembros de la comisión de consenso, cuya composición es conocida. Los dirigentes nombrados a propuesta deLara son Enrique Santiago, responsable de Convergencia Político-Social; Lola Sánchez Tudela, responsable de Finanzas, y José Antonio Pujante, José Miguel Nuin y Adolfo Barrena, líderes de IU en Murcia, Navarra y Aragón. En representación de las federaciones grandes, sus coordinadores: Antonio Maíllo (Andalucía), Eddy Sánchez (Madrid), Marga Sanz (País Valencià), Manuel González Orviz (Asturias) y Joan Josep Nuet (Cataluña, EUiA). Y como cabezas de las distintas sensibilidades de IU, Fernando Sánchez (PCE), Antonio Cortés (Izquierda Abierta), José Antonio Mesa (Colectivo de Unidad de Trabajadores) y Santos Chiches (corriente federal EnComún). Reneses hace el número 15. Ellos tienen en sus manos parir una candidatura de unidad. Y, como recuerda un barón territorial, en IU el partido se juega "casi siempre a la prórroga".
El proceso de confección de la candidatura de Izquierda Unida para las elecciones europeas entra en tiempo de descuento. Tras meses hablando sobre los ejes programáticos claves –el combate a la troika y las políticas neoliberales– y sobre las potenciales alianzas –ninguna de ellas aún cerrada–, la federación de Cayo Lara se embarca definitivamente en el proceso de discusión de la lista. Y de su cabecera, claro. Y ahí las dudas sobre idoneidad de un tercer mandato del eurodiputado Willy Meyer persisten. Nada está claro aún y, como analizan diversos dirigentes, "todo puede pasar".