Grecia
Lo que se juega Podemos en el laberinto griego
"Si Grecia sale del euro, nosotros nos vamos a llevar un buen golpe". Es la reflexión que circula entre algunos dirigentes de la cúpula de Podemos a tenor de los últimos acontecimientos que se están produciendo en el país, una situación ante los que los partidos españoles se han posicionado y que, según los expertos consultados por infoLibre, tendrá un impacto en las próximas elecciones generales en España.
Los hechos se suceden muy rápido en los últimos días. Tras la ruptura de las negociaciones entre Grecia y sus acreedores, el pasado domingo el referéndum convocado por el Gobierno heleno sobre las propuestas de la troika certificó la tajante oposición de la ciudadanía, que las rechazó con una mayoría aplastante. Este lunes, los principales partidos fijaron su posición con respecto a la delicada situación de Grecia: mientras que el PP alertó de que "la bandera del corralito es mala para hacer campaña en España”, Podemos aseguró que el resultado de la consulta "es un sí a una Europa de los derechos sociales y de la prosperidad". El PSOE, por su parte, criticó que sus dos rivales tratasen de "instrumentalizar en su beneficio" la convulsa situación en Atenas.
Lo cierto, en cualquier caso, es que el tema de Grecia se ha colado como un vendaval en las agendas europeas, y la española no es una excepción. La postura de Podemos no es nueva, ya que su secretario general, Pablo Iglesias, siempre se ha mostrado muy cercano al primer ministro griego, Alexis Tsipras, con quien ha celebrado varios actos y junto a quien apareció incluso en la campaña para las elecciones generales griegas. Los conservadores, de igual forma, llevan tiempo alertando frente al "populismo" que, a su juicio, representan Syriza y Podemos.
Pero, ¿tendrá esta rápida sucesión de acontecimientos en Grecia impacto en las elecciones generales españolas? Los expertos consultados por infoLibre coinciden en asegurar que es un tema que influirá en el votante, aunque sostienen que puede ser menos determinante de lo que ahora mismo –en mitad de las durísimas negociaciones y con la salida del euro planeando sobre Grecia– parece. En cualquier caso, los especialistas señalan que aún es pronto para conocer a quién beneficiará y a quién perjudicará la situación: habrá que esperar a que se llegue a un acuerdo para valorar con mayor precisión su efecto en las generales españolas.
La clave, el poso que quede en la opinión pública
Hoy por hoy, en cualquier caso, se pueden sacar conclusiones. Y la primera es que los discursos de Podemos y el PP sobre Grecia son los más coherentes para con sus electorados en la situación actual. Así lo asegura Lluís Orriols, profesor de Ciencia Política en la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M), que sostiene que ambos partidos "tienen motivos para seguir en esta línea", aunque hace hincapié en que será el desenlace de la historia y, sobre todo, el discurso que consiga instalarse en la opinión pública, los que determinen cómo afectará a uno y a otro el problema griego.
"Si los ciudadanos griegos han votado en referéndum que no aceptan las condiciones y ahora el Eurogrupo hace caso y cambia las condiciones, en lo que se pone el acento es en que los recortes no eran inevitables, cuando el Gobierno ha basado su estrategia en que no había otras alternativas", explica el politólogo, que señala que para que el PP no vea "destrozado su argumentario" debe utilizar la estrategia de atacar a Tsipras "para que cale en la opinión pública la idea de que Grecia tiene que hacer lo que tiene que hacer".
Desde el punto de vista de Podemos, la situación es diferente. "Buscar complicidades con Syriza te puede ayudar si sale bien y consiguen un buen acuerdo", asevera Orriols, que no obstante sostiene que el partido de Pablo Iglesias "tenía más margen" para escoger su discurso que el PP, "que ya tenía las políticas hechas". En cualquier caso, señala el experto, si Grecia no consigue pactar con los acreedores y se ve abocada a situaciones extremas, como un abandono del euro, la táctica elegida por Podemos ofrece al partido vías de escape. Pero, en cualquier caso, el efecto de la situación será "marginal" en las generales, afirma.
El tiempo, un factor clave
"Lo decisivo será cómo se gestione el discurso: si Grecia acaba mal, podrá explicarse por la mala actuación del Gobierno o por la intransigencia de la troika, que quiere dar una lección a otros países", relata Orriols, que no obstante duda de que el problema griego pueda afectar excesivamente a Podemos. "Les puede ir mal, si la negociación termina mal, de cara a un electorado moderado que puede sufrir por la incertidumbre, pero tienen un electorado fiel y bastante numeroso que no va a cambiar de voto, y además a Podemos ya le está costando cada vez más entrar en el electorado moderado", remacha.
Belén Barreiro, directora de la empresa demoscópica MyWord y expresidenta del CIS, coincide en que "en función del desarrollo de las negociaciones en los próximos días, puede beneficiarse el PP o Podemos". No obstante, hace hincapié en que cuando quedan –previsiblemente– más de cuatro meses para las elecciones, hacer pronósticos de hasta qué punto afectará a la decisión de los votantes es "aventurado": "El resultado del referéndum beneficiaría al PP porque podría beneficiarse del miedo que genera la incertidumbre, pero quizá dentro de una semana, con la negociación, se transforme el miedo en otra cosa", explica la socióloga, que no obstante señala que a los conservadores "les beneficia" la inestabilidad, ya que "moviliza" a sus potenciales votantes.
Pero "como queda tanto tiempo y la política va a toda mecha, igual dentro de tres meses hay algo que nos parece más importante", abunda Barreiro, que coincide en su argumento con Fermín Bouza, catedrático de Sociología en la Universidad Complutense de Madrid (UCM), que afirma que la situación en Grecia "no va a ser muy decisiva" de cara a las generales. "Si el asunto se resuelve bien, su influencia va a ir debilitándose, tanto más cuando el PP entienda que no le es rentable. A finales de noviembre es probable que sea un vago recuerdo en la memoria", sostiene Bouza.
"Meter miedo con la radicalidad es perder el tiempo"
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"Los apoyos de Podemos son unos apoyos relativamente insólitos, de clases medias, más numerosos que otros sectores sociales y más que el PP y el PSOE", continúa el sociólogo, que señala que "meter miedo con Podemos y la radicalidad es un poco perder el tiempo, porque las gentes que dan el paso al voto de grupo a Podemos han asmilado hace mucho tiempo cuál es su posición y por qué van a votarles". Bouza, sin embargo, discrepa de Barreiro en que la inestabilidad beneficie al PP.
"Identificar a Podemos con la radicalidad no les sirve, pero es que además se les puede volver en contra. Esa identificación, en un momento en el que las cosas pueden acabar bastante bien para los griegos, podría suponer a quien juegue con estas cosas una pérdida de votos", sostiene el catedrático, que es optimista con respecto a la permanencia de Grecia en el euro. Y, en cuanto a la opinión pública, explica que en la situación actual "a la gente le parece que si alguien es un poco radical no pasa nada, y si les va bien a estos radicales el mensaje calará".
En cualquier caso, lo que es un hecho es que "el exito o el fracaso de Grecia va a ser utilizado en las narrativas nacionales", tal y como señala Lluís Orriols. Por lo pronto, el Eurogrupo tiene programada una reunión este mismo martes para abordar la crisis de Grecia y negociar sus propuestas. Será, tan sólo, el próximo capítulo de la crisis griega.