El Juzgado Criminal y Correccional Federal número 1 de la República Argentina, dirigido por la jueza María Servini, ha rechazado dar carpetazo a la conocida como querella argentina. La magistrada desestima así la petición de archivo solicitada por el exministro de Interior Rodolfo Martín Villa al entender que los hechos que se le imputan pueden constituir crímenes contra la humanidad y, por lo tanto, resultan imprescriptibles.
La defensa de Martín Villa, imputado por una docena de homicidios durante la Transición —mientras ostentaba las carteras de Relaciones Sindicales e Interior—, presentó a mediados de julio un escrito pidiendo el sobreseimiento de la causa por prescripción de los delitos o insubsistencia de la acción al considerarse inocente de los delitos imputados y no haber sido juzgado en un plazo razonable de tiempo.
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Pero la jueza argentina ha rechazado decretar el archivo. Lo ha hecho al entender, por un lado, que los hechos pueden considerarse crímenes contra la humanidad, lo que los hace imprescriptibles. Además, según ha informado Ceaqua en un comunicado, Servini entiende que en ningún momento se ha violado el derecho de Martín Villa a ser juzgado en un plazo razonable. Sobre todo si se atiende a la complejidad del asunto, a la cantidad de partes procesales o a la multitud de pruebas practicadas y pendientes de ser realizadas.
El Juzgado Criminal y Correccional Federal número 1 de la República Argentina, dirigido por la jueza María Servini, ha rechazado dar carpetazo a la conocida como querella argentina. La magistrada desestima así la petición de archivo solicitada por el exministro de Interior Rodolfo Martín Villa al entender que los hechos que se le imputan pueden constituir crímenes contra la humanidad y, por lo tanto, resultan imprescriptibles.