Los juzgados de lo mercantil están cada vez más atascados. En la actualidad, el tiempo medio de resolución de un procedimiento en estos órganos judiciales es el doble que hace una década, según los datos que este martes hizo públicos el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). En concreto, los juzgados de lo mercantil tardaron en despachar un asunto en 2017 casi un año y medio, una demora que les coloca como los órganos unipersonales más lentos de toda la justicia española, muy por detrás de los juzgados de lo Penal y lo Social, cuyo tiempo medio de resolución se sitúa en los 9,6 y 9,4 meses, respectivamente. Estos plazos de espera ponen al descubierto, según los jueces consultados por infoLibre, el “enorme colapso” en el que se encuentran sumidos desde hace años estos órganos judiciales y la falta de medidas efectivas por parte de la Administración para poner fin de una vez por todas al enorme bloqueo.
Durante la última década, el tiempo medio de resolución de procedimientos en los juzgados de lo mercantil ha experimentado una escalada constante, pasando de los 8,6 meses que se registraron en 2008 a los 17,1 –casi un año y medio– de 2017, prácticamente el doble, según la herramienta de medición que el CGPJ ha puesto en marcha. De hecho, es el único órgano judicial que desde hace diez años no experimenta un recorte en el plazo de demora. De los 8,6 meses que se tardaba en 2008 se pasó a los 9 meses en 2009 y a los 10,7 meses en 2010. El aumento de estos tiempos de resolución superó el año durante los momentos más duros de la crisis económica: 12,3 meses en 2011, 13,2 meses en 2012, 13,8 meses en 2013 y 14,5 meses en 2014. Y esta tendencia se mantuvo tras el maremoto financiero. En 2015, escaló hasta los 14,7 meses, y en los dos años posteriores ascendió hasta los 15,8 y los 17,1 meses, respectivamente.
A preguntas de este diario, el Ministerio de Justicia calla. Sí que hacen un diagnóstico de la situación los jueces y magistrados de lo mercantil, que achacan este aumento constante al atasco en el que se encuentra sumida esta jurisdicción, que según el magistrado de lo mercantil de la Audiencia Provincial de Sevilla Conrado Gallardo nació “colapsada”. “Se creó un número de órganos insuficiente para la cantidad de pleitos que había. Y esta situación, en lugar de mejorar, ha ido empeorando”, asevera Gallardo. El magistrado se queja de que están saturados. Año tras año, el número de asuntos pendientes en estos órganos judiciales no deja de aumentar, lo que agrava todavía más la situación. Solo en 2015, los casos a la espera de resolución se incrementaron desde los 58.345 registrados al inicio de año hasta los 74.239 a cierre del ejercicio. “Es una pelota que no para de crecer y que provoca este incremento de tiempo”, apunta.
“Ningún remedio”
El magistrado señala que parte importante de este colapso nació durante la crisis económica y se agravó a raíz de las cláusulas suelo. “Las quiebras continuas dispararon los concursos en las empresas”, concreta. Coincide con este diagnóstico Juan Antonio Lozano, actual magistrado de la Sección Primera Civil de la Audiencia Provincial de Almería y miembro del Secretariado de Juezas y Jueces para la Democracia. “Hasta 2015, todo lo relacionado con las cláusulas suelo iba a parar a los juzgados mercantiles. En cuanto a los concursos, los dos años [de espera para la resolución] no te los quita nadie”, sostiene el jurista, que hasta 2013 estuvo destinado en el Juzgado de lo Mercantil de la ciudad andaluza. En concreto, según los datos del Consejo General del Poder Judicial, en 2017 un procedimiento concursal en los juzgados de lo mercantil españoles tardó en resolverse de media unos 49 meses, es decir, unos cuatro años.
Ante este colapso, Gallardo lamenta que no se haya puesto en marcha “ningún remedio”. “Si el número de pleitos aumenta sin parar y el número de jueces permanece estancado, va a seguir incrementándose el tiempo de resolución. Esto, por tanto, requiere planificación y tiempo. Y, hasta el momento, se está viendo una dejadez enorme por parte del Poder Legislativo, Ejecutivo y Judicial”, apostilla el magistrado de la Audiencia Provincial de Sevilla, que recuerda que las buenas sentencias requieren “tiempo” y que esta sobrecarga no ayuda. En este sentido, Gallardo considera fundamental incrementar el número de efectivos para acabar con el atasco. “Hasta el momento, lo que se ha estado haciendo es intentar resolver la situación a base de reforzar juzgados”, explica. De hecho, según los datos del CGPJ, en 2017 el 42,5% de las sentencias en los mercantiles fueron dictadas por jueces de refuerzo –en 2008, la cifra se situaba en el 1,59%–.
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Aumentar juzgados
Además, el magistrado cree que es necesario aumentar el número de juzgados de lo mercantil –actualmente hay 64 por toda la geografía española–. “En Sevilla, se creó uno que nació colapsado. Ahora, estamos en tres. Pero aquí hacen falta seis o siete”, critica Gallardo en conversación telefónica con infoLibre. En el caso de Madrid, este martes el Ministerio de Justicia ha dado su visto bueno al Ejecutivo regional para que cree otros ocho juzgados de lo mercantil que eviten el “colapso absoluto” del que alertó el pasado mes de octubre el Servicio de Inspección del CGPJ. “Lo que debería hacerse es un proceso de cambio en la planta judicial que termine con la concepción decimonónica existente. Y si no, coger el toro por los cuernos y decir que cada juzgado es un órgano judicial que puede tener varios jueces, de forma que los casos que lleguen puedan ser repartidos entre todos”, sentencia José Antonio Lozano.
Por comunidades autónomas, los juzgados de lo mercantil de Andalucía son los que tienen un tiempo de resolución de procedimientos más elevado: 25,1 meses, es decir, unos dos años. También por encima de la media española se encuentran los madrileños –19,2 meses de demora–, los murcianos –tardan 18,2 meses en resolver un caso– y los castellanoleoneses –17,2 meses–. En el extremo contrario, sólo en cuatro regiones los tiempos medios de resolución de procedimientos en los juzgados de lo mercantil se encuentran por debajo del año. En Asturias y Galicia, un asunto tarda en resolverse 11,5 meses y 11,8 meses, respectivamente. Una demora que se reduce hasta los 9,7 meses en el País Vasco y los 8,6 meses en Baleares.
Los juzgados de lo mercantil están cada vez más atascados. En la actualidad, el tiempo medio de resolución de un procedimiento en estos órganos judiciales es el doble que hace una década, según los datos que este martes hizo públicos el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). En concreto, los juzgados de lo mercantil tardaron en despachar un asunto en 2017 casi un año y medio, una demora que les coloca como los órganos unipersonales más lentos de toda la justicia española, muy por detrás de los juzgados de lo Penal y lo Social, cuyo tiempo medio de resolución se sitúa en los 9,6 y 9,4 meses, respectivamente. Estos plazos de espera ponen al descubierto, según los jueces consultados por infoLibre, el “enorme colapso” en el que se encuentran sumidos desde hace años estos órganos judiciales y la falta de medidas efectivas por parte de la Administración para poner fin de una vez por todas al enorme bloqueo.