Dos voces para la legislatura más crispada: Óscar Puente dará respuesta a los insultos de Miguel Tellado

Están en las antípodas ideológicas, pero Óscar Puente y Miguel Tellado comparten más cosas de las que imaginan. Curtidos en política regional y hombres de confianza de sus líderes, al nuevo ministro de Transportes y al recién nombrado portavoz parlamentario del PP les une una misión importante. La de poner el punto ácido que no pueden emplear Pedro Sánchez ni Alberto Núñez Feijóo.

En octubre, el presidente del Gobierno demostró que Óscar Puente desempeñaría un papel importante en esta nueva legislatura cuando lo eligió, por sorpresa, para dar la réplica a Alberto Núñez Feijóo en la investidura fallida del popular. Esta semana, el presidente del PP confiaba en Miguel Tellado para acrecentar la estrategia de confrontación contra el Gobierno desde la portavocía del Congreso, sustituyendo en el cargo a Cuca Gamarra. 

1/ De máxima confianza de Sánchez y Feijóo

El perfil de Miguel Tellado y de Óscar Puente se podría encuadrar dentro del estilo conocido como bulldog o dóberman, que define a los políticos que utilizan un discurso duro contra el adversario, con contundencia y sin pelos en la lengua. “Es normal este reparto de roles de poli bueno y poli malo entre líderes y números dos. Existen muchos precedentes. González y Guerra, Aznar y Cascos, Zapatero y Caldera, Rajoy y Cospedal... Siempre se necesita tener lugartenientes con un perfil más duro”, explica el politólogo Eduardo Bayón.

Sánchez y Feijóo han situado estratégicamente a estos dos políticos. El mensaje es claro: estamos preparados para afrontar una legislatura aún más polarizada. Como avanzaba esta semana Toni Aira, profesor de la UPF Barcelona School of Management, “se está premiando a quien apuesta por el exabrupto, en unas relaciones políticas entre el PP y el PSOE que ya vienen contundentes de casa”. Muy posiblemente, Puente y Tellado tensarán, cada uno desde su posición, las relaciones entre los dos partidos mayoritarios, aunque hasta el momento es Tellado quien ha empleado de forma constante el insulto como herramienta de oposición.  

2 / El barro como zona de confort

A ninguno de los dos les importa perder las formas, bajar al barro o hacer “comparaciones chuscas”, en palabras de Puente. Hace unos días, Miguel Tellado dijo que Sánchez “debería abandonar España en un maletero como Puigdemont” y que está dispuesto a “prostituir la democracia y la Constitución para satisfacer su ego y su propio ombligo”. Incluso, llegó a justificar el acoso que Puente sufrió en el tren de Valladolid a Madrid, durante la semana de la investidura de Feijóo.

Precisamente, el exalcalde fue muy duro en la réplica a Feijóo, algo que molestó mucho a los populares, y lo hizo con el famoso episodio “de ganador a ganador” y con un punto chulesco que desmontó el argumentario del PP de la lista más votada. Esta semana, el socialista volvía hacer unas declaraciones desafortunadas comparando la ley de amnistía con casarse tras un embarazo. Un discurso ágil y aparentemente improvisado muy habitual en este tipo de perfil político. 

3/ Hombres de extrema confianza

Son fieles escuderos. Tellado era el hombre fuerte de Feijóo en Galicia y es conocido por ser un fontanero en el partido, encargado de mantener unidas las filas y de que no haya contestación interna. “Pero no es solo Tellado”, puntualiza Bayón. “El PP ha diseñado un equipo para dar la batalla cultural contra Sánchez y cerrar el paso a Vox”.

Junto a él, Feijóo ha recuperado a Cayetana Álvarez de Toledo y Rafael Hernando como portavoces parlamentarios adjuntos. Dos políticos de estilo igual o más incendiario que Tellado que ya pasaron por el mismo puesto en el pasado. “En su día, acabaron desechados. Esto volverá a pasar cuando el PP se dé cuenta de que tiene que competir por los votantes del PSOE y no por los de Vox”, añade el politólogo. 

Además de sustituir al presidente en la investidura fallida, Óscar Puente es, desde hace años, un político de extrema confianza de Sánchez. Fue leal al actual presidente del Gobierno hasta cuando el partido le dio la espalda, abandonó su escaño y empezó de cero para enfrentarse a Susana Díaz en las primarias. Puente siempre estuvo con él. 

4/ Curtidos en la política local y regional

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Antes de aterrizar en Madrid, Tellado fue diputado en el parlamento autonómico gallego, donde también ejerció como portavoz. Feijóo le nombró secretario general del PP de Galicia y dirigió las dos últimas campañas con las que el expresidente de la Xunta ganó con mayoría absoluta. 

Por su parte, el primer puesto de Óscar Puente en el PSOE de Valladolid fue el de vicesecretario general de la Ejecutiva Provincial. Aunque no funcionó como portavoz federal, en 2015 se convirtió en el alcalde de la capital de Castilla y León. Con un discurso incendiario en redes sociales, su mandato no estuvo exento de polémicas y se convirtió muy pronto en un perfil mediático más allá de su ciudad. 

5/ No es lo mismo ministro que portavoz

Sin duda, el exalcalde es el más guerrero de un consejo de ministros con perfil muy político pensado para protegerse de los continuos ataques del PP. Aunque, al contrario que Telladodesde la portavocía del Congreso, la posición institucional de Puente, según algunos expertos, puede verle obligado rebajar el tono que veía utilizando hasta ahora. Veremos si finalmente opta por moderarse o sacar a pasear, como solo él sabe, un discurso duro con el que defenderse del acoso y derribo que el PP cultivará sin remordimientos.