El nuevo juez instructor reactiva el caso y cita a Francisco Serrano como investigado

El nuevo juez del caso Serrano ha reactivado la investigación que terminó con la carrera política del exlíder de Vox en Andalucía. En una auto de 18 de noviembre del juzgado de instrucción 16 de Sevilla, el juez Juan Gutiérrez Casillas cita a declarar el 8 de febrero de 2021 a Francisco Serrano y sus exsocios Francisco Pelegrín y Javier López en calidad de “investigados”. Entre los días 10 y 12 de febrero, el juez tomará declaración a cinco testigos, entre ellos el notario que acreditó la constitución de la empresa con la que supuestamente se cometió el fraude de subvenciones, la alcaldesa de Niebla, el municipio de Huelva donde debía construirse la fábrica que nunca fue culminada, y el ingeniero que hizo el peritaje de la maquinaria clave para cometer el presunto engaño. Serrano es investigado por un posible fraude de subvenciones de 2,48 millones de euros.

El caso, destapado por infoLibre, llegó al juzgado de instrucción 16 a raíz de que Francisco Serrano dimitiese en septiembre como parlamentario andaluz y renunciase así a su aforamiento, forzando que abandonase la investigación el anterior instructor, Miguel Pasquau, del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), que había puesto en el foco en los movimientos de dinero entre empresas del exjuez y político.

Serrano tardó en tomar la decisión de dejar el escaño. No lo hizo hasta septiembre de este año. Pudo hacerlo cuando la Fiscalía de Sevilla vio motivos para actuar contra él, en junio, y envió el caso a la Fiscalía Superior porque era aforado [ver aquí]. Pudo hacerlo cuando la Fiscalía Superior presentó la querella contra él, en julio [ver aquí y aquí]. Pudo hacerlo cuando el TSJA admitió la querella a trámite, también en julio [ver aquí].

Pero Serrano se resistía, a pesar de las presiones de sus antiguos compañeros. El juez Serrano se limitó a dejar Vox y a quedarse como no adscrito. ¿Cuándo dio el paso de dejar el acta? Una vez que el anterior instructor, Pasquau, magistrado sobre el que el propio Serrano ha manifestado en alguna ocasión su desagrado, dejó claro que la investigación iba por unos derroteros muy concisos: en busca del dinero. El juez Pasquau andaba ya detrás de los movimientos de dinero entre empresas del investigado [ver aquí].

La dimisión de Serrano forzó a Pasquau a suspender su declaración del dos veces candidato de Vox, prevista para el 8 de septiembre. El nuevo juez la fija ahora para el 8 de febrero, cinco meses después de la primera citación.

La investigación trata de esclarecer si Serrano y sus exsocios cometieron un fraude al obtener, mediante el engaño al Ministerio de Industria, un crédito de 2,48 millones de euros para la construcción de una fábrica que jamás fue culminada. El dinero no fue devuelto. El destino del dinero es otra de las incógnitas por resolver judicialmente.

En octubre del año pasado este periódico empezó a desvelar los hechos, que dieron lugar a una denuncia ante la Policía Nacional del vicepresidente de Facua, Rubén Sánchez, que ahora ejerce la acusación popular. Esta denuncia desencadenó una investigación, que de la Policía Nacional pasó a la Fiscalía, posteriormente al TSJA y de ahí al juzgado de Sevilla donde ahora se reactiva el caso [ver aquí el dosier completo del caso].