El Parlament aprobó este jueves, con los votos de CiU, ERC, ICV-EUiA y tres diputados del PSC pedir al Congreso el traspaso de la competencia para poder convocar un referéndum de autodeterminación [consulta la resolución aquí], un paso con el que quieren visualizar el no del Estado y ganar legitimidad internacional. La proposición salió adelante por 87 votos a favor, 43 en contra y tres abstenciones.
En sus respectivas intervenciones en el pleno, el líder de CiU en el Parlament, Jordi Turull; la portavoz de ICV-EUiA, Dolors Camats, y la secretaria general de ERC, Marta Rovira, ensalzaron la repercusión internacional que tendrá la negativa del Congreso a autorizar un referéndum en Cataluña.
También PSC, PP y Ciutadans –que votaron contra el traspaso– dieron por hecho el no de la Cámara Baja, mientras que desde la CUP –que se abstuvo– el diputado Quim Arrufat defendió que no es el Congreso quien debe pronunciarse sobre si los catalanes votan sobre su futuro, sino que el proceso debe negociarse en Cataluña.
Joan Ignasi Elena, Marina Geli y Núria Ventura fueron los tres diputados del PSC que se desmarcaron de la disciplina de voto del partido, y votaron sí. Al final, de los 20 diputados del Grupo Socialista, tercera fuerza en la Cámara catalana, 16 parlamentarios acataron el mandato del Consell Nacional –el máximo órgano de dirección–, los críticos apoyaron la iniciativa y el alcalde de Lleida Àngel Ros ya no asistió a la Cámara porque ayer miércoles renunció al acta. La quinta diputada del sector soberanista, Rocío Martínez-Sampere, anunció antes del pleno que votaría no con sus compañeros pero añadió que había presentado su dimisión como miembro de la ejecutiva del SPC y del Secretariado, el núcleo duro de la cúpula socialista. Martínez-Sampere era partidaria de abstenerse, pero argumentó que "una sola abstención" en el grupo de poco hubiera servido. Aseguró que en su decisión no pesó únicamente su posible candidatura a las elecciones primarias del PSC de Barcelona para ser candidata a alcaldesa, una decisión que aún no ha anunciado.
Voto "en conciencia y por fidelidad" al programa
La dirección del PSC reclamó a los tres parlamentarios que se desmarcaron de la directriz del partido que devuelvan su acta. Así lo declaró en los pasillos de la Cámara el portavoz del grupo, Maurici Lucena, quien concretó que Geli, Elena y Ventura tienen de plazo "hasta el domingo". Dijo sentir una "profunda decepción" por que los tres hayan demostrado, con su actitud, un "lamentable poco espíritu de equip". Al preguntársele si el PSC prevé expulsarles, aseguró que el único escenario que contempla ahora la cúpula es que renuncien a sus escaños y explicó que hoy, antes del almuerzo, se reunirá con cada uno de ellos para trasladarle esta petición de "sentido común". Ayer mismo, en Madrid, el primer secretario, Pere Navarro, invitó a los parlamentarios del sector soberanista a seguir el ejemplo de Ros y dejar su escaño.
Geli, Elena y Ventura, sin embargo, dijeron en rueda de prensa que no piensan dejar su acta, porque su decisión sólo expresa una discrepancia política, no "problemas éticos o de comportamiento indigno". Subrayaron haber votado "en conciencia y por fidelidad" al programa electoral de 2012, que defendía el derecho a decidir, siempre de forma legal y acordada con el Estado.
Los tres parlamentarios tampoco se plantean abandonar el PSC ni, en el caso de Geli y Elena, la ejecutiva de la que forman parte. Argumentaron que lo único que hacen es representar el "pluralismo" del partido. Geli alegó que son "la cara, la voz y el voto" de centenares de concejales socialistas que en muchos ayuntamientos catalanes tampoco han acatado la disciplina de voto y han apoyado pedir al Estado la transferencia a la Generalitat para celebrar la consulta. Ventura explicó que no podían faltar "al compromiso con los ciudadanos de Cataluña" que adquirieron en las elecciones autonómicas, y está convencida de poder rehacer la unidad socialista rota este jueves con la votación.
En los días previos a este pleno extraordinario, la dirección socialista había argumentado que el no tiene el aplastante apoyo del Consell Nacional y de la ejecutiva del partido, pero los diputados díscolos han replicado que este no equipara el PSC con el PP y a Ciutadans no, que votaron este jueves lo mismo.
La exdiputada Laia Bonet se va de la ejecutiva
Geli reivindicó que no mantiene el acta por el hecho de conservar el sueldo –"Puedo volver a hacer de médica en el hospital Josep Trueta"–, sino por seguir representando la pluralidad y la complejidad del PSC, que considera además un reflejo de la sociedad catalana. Elena aseguró que ha sido una decisión difícil, que han trabajado para lograr una solución consensuada, y que finalmente se desmarcaron "para garantizar la credibilidad del proyecto del PSC en la defensa inequívoca del derecho a decidir".
Geli recalcó que no son independentistas y que están absolutamente en contra de una eventual declaración unilateral de independencia, y concluyó que romper la disciplina de voto también evidencia su compromiso con los electores e incluso con la familia.
Ver másLa propuesta del Parlament podría debatirse en marzo
Los tres diputados comunicaron su decisión de desmarcarse a Navarro en una "breve conversación" antes de empezar el pleno, y prevén nuevas conversaciones estos días para abordar las discrepancias.
La fractura interna del PSC se evidenció también con otro gesto: la exdiputada y precandidata a las primarias por Barcelona Laia Bonet también presentó su dimisión en la ejecutiva. Bonet también avisó de que no ocupará un escaño en el Parlament en caso de que se produzcan dimisiones y corra la lista.
El Parlament aprobó este jueves, con los votos de CiU, ERC, ICV-EUiA y tres diputados del PSC pedir al Congreso el traspaso de la competencia para poder convocar un referéndum de autodeterminación [consulta la resolución aquí], un paso con el que quieren visualizar el no del Estado y ganar legitimidad internacional. La proposición salió adelante por 87 votos a favor, 43 en contra y tres abstenciones.