El PP no teme fisuras en su primer examen a la ley del aborto en el Congreso

La reforma de la ley del aborto, en fase de informe de los órganos consultivos antes de volver al Consejo de Ministros, vivirá este martes su primera prueba de fuego en el Congreso de los Diputados. Una iniciativa del Grupo Parlamentario Socialista sobre la "retirada del anteproyecto de Ley Orgánica por el que el Gobierno pretende revisar la legislación vigente en España sobre salud sexual y reproductiva e interrupción voluntaria del embarazo" en forma de proposición no de ley someterá a examen la unidad del Grupo Parlamentario Popular. 

No es un secreto que la reforma que ha partido del Ministerio de Justicia, en manos de Alberto Ruiz-Gallardón, no gusta ni dentro de su propio partido. Tampoco es un secreto que barones como el gallego Alberto Núñez-Feijóo o el extremeño José Antonio Monago no se sienten identificados con el texto. Pero, en última instancia, es del Grupo Parlamentario Popular de quien depende el avance de esta iniciativa que supone un viaje en el tiempo más allá de la ley de 1985. El PSOE busca que los diputados del PP se retraten, por ello, la votación será secreta y en urna. Fuentes del Grupo Parlamentario Popular consultadas por infoLibre se muestran convencidas de que los diputados actuarán con "responsabilidad" y conscientes de que el anteproyecto, que pasó por el Consejo de Ministros el 20 de diciembre, es susceptible de cambios. Es decir, que no se pondrán de manifiesto fisuras importantes.

"El PSOE quiere mostrar un PP dividido y eso no lo vamos a permitir porque sería dar herramientas al adversario en el principio de la batalla", reflexiona un diputado.

Hasta la fecha, la principal polémica dentro del Grupo Parlamentario Popular la ha protagonizado la diputada y vicepresidenta del Congreso, Celia Villalobos. En el primer Comité de Dirección del PP, celebrado a la vuelta de las vacaciones de Navidad en la sede nacional del partido, Villalobos mostró su malestar con este texto y pidió libertad de voto para el momento en el que éste sea votado en el Congreso de los Diputados.

En este momento, Rajoy no dio más respuesta que la de reclamar al ministro de Justicia que escuche a todos. No obstante, desde la dirección del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso los mensajes eran claros: no cabe salirse de la disciplina de voto. Primero, porque el PP es un partido en el que prima la unidad de discurso. Y, después, porque todos los diputados que concurrieron en la lista de la formación conservadora sabían que la reforma iba incluida en el programa.

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Los críticos del PP con esta reforma de la ley del aborto subrayan que del programa electoral con el que concurrieron a las generales de noviembre de 2011 no podía deducirse que el anteproyecto fuese a ser tan restrictivo.

Monago redobla su apuesta

Con el frente parlamentario ya abierto, Monago sigue poniendo en un aprieto a la formación a la que pertenece. Este lunes, la portavoz del PP extremeño, Francisca Rosa, mostró la disposición de la formación regional a consensuar con los socialistas una postura común respecto a la reforma de la ley del aborto.