Todo comenzó con una denuncia de la Red Solidaria con la Ocupación de Palestina (Rescop) el pasado martes. En un comunicado, esta ONG advertía de que el carguero Borkum procedente de Chennai (India había parado en suelo español, concretamente en Las Palmas de Gran Canaria, y preveía hacerlo también en Cartagena (Murcia) para acabar en el puerto de Ashdod, ubicado a apenas 30 kilómetros de la Franja de Gaza, en Israel. La asociación denunciaba que el barco contenía 20 toneladas de motores de cohetes, 12,5 toneladas con carga explosiva, 1.500 kilos de sustancias explosivas y 740 kilos de cargas, propulsores para cañón. Así, desde la organización solicitaban al Gobierno detener al Borkum, inspeccionar su carga e impedir su salida si , tras la revisión, se confirmaba que portaba material militar dirigido a Israel.
El comunicado de Rescop llegó tras comprobar los códigos de identificación de cada contenedor a bordo del carguero. Sin embargo, el Gobierno, a través del ministro Óscar Puente, no tardó en desmentir que el destino del buque fuera Israel. "Algunos andan enredando con un barco (Borkum) que hará escala en Cartagena y que, según ellos, lleva armas a Israel. FALSO. El barco ya tocó suelo español en Las Palmas, donde pasó aduana. Su carga se dirige a la República Checa, a donde llegará tras ser descargada en Eslovenia (Koper)", explicó Puente en X, antes Twitter. Con todo, la explicación del ministro socialista no convenció ni a Sumar, socio minoritario del Ejecutivo, ni a Podemos, que a través de dos denuncias —los primeros ante la Fiscalía General del Estado y los segundos ante la Audiencia Nacional— reclamaban el bloqueo del carguero.
Ante la polémica suscitada y con el ministro Puente acusando a los dirigentes de Sumar y Podemos de difundir "bulos" y acudir a los tribunales sin tener "pruebas ni el mínimo rigor", el Borkum acabó suspendiendo su escala en Cartagena —pese a tener el permiso del ministerio de Exteriores— después de estar fondeando en aguas del cabo Tiñoso, donde se había convocado una concentración de protesta. Finalmente el armador, de nacionalidad alemana, puso este viernes rumbo a Eslovenia. Allí, según aseguran desde el ala socialista del Gobierno, se descargará el material para transportarlo por carretera a República Checa.
Tanto Sumar como Podemos celebraron la decisión del Borkum de no atracar en Cartagena ya que, a su juicio, la marcha del buque confirma que tenían razón. "Victoria! Teníamos razón. Esperamos las disculpas mañana. La presión social sirve, plantar cara sirve", escribía el portavoz parlamentario de Sumar, Íñigo Errejón. "Estaba todo tan claro y nos lo estábamos inventando todo tanto que… el Borkum evita entrar en el puerto de Cartagena", ironizaba, por su parte, la número dos de Podemos, Irene Montero. Para Rescop, sin embargo, la "victoria no es del Gobierno" sino suya y de la ciudadanía. "Ha quedado demostrado que la presión de la sociedad civil funciona", asegura su portavoz, Ana Sánchez.
Desde Rescop creen que la decisión del Borkum, tomada por el armador del barco, "parece confirmar que se intentaba evitar una revisión de la carga" y desconfían de la versión ofrecida por el ala socialista, pese a que el Gobierno de la República Checa emitió un informe en el que aseguraban que el armamento iba a ser utilizado para "tareas de seguridad nacional", según informó El País. "No es un argumento que desmienta el destino final, a la vista de que este tipo de cargueros hacen varias escalas y que República Checa es uno de los principales exportadores de armas a Israel en la actualidad", señalan en la Red Solidaria Contra la Ocupación, que pretende "seguir presionando para que ni este, ni ningún otro cargamento de armas llegue a Israel".
Exteriores deniega que un segundo buque atraque en España
En plena polémica sobre el destino final del carguero Borkum, el ministerio de Exteriores denegó el permiso de escala en España a un segundo buque, el Marianne Danica, un barco que zarpó de Madrás (India) con destino al puerto de Haifa (Israel). Al igual que el barco alemán, solicitó permisos para realizar un tránsito por aguas españolas y una escala en el puerto de Cartagena, programada para el martes 21 de mayo. Desde el ala socialista creen que tanto Rescop como Podemos y Sumar confundieron a este carguero con el Borkum.
El permiso fue denegado ya que el destinatario de la carga de 26,8 toneladas de armamento es la compañía Israel Cargo Logistics (ICL). Según aseguró el ministro del ramo, José Manuel Albares, en TVE es la primera vez que el Gobierno niega la autorización para hacer escala a un buque con armas para Israel. "Es el primer caso, el primer barco detectado con cargamento de armamento para Israel, es la continuación de una política consistente, explícita y conocida por todo el mundo", afirmó, al tiempo que repitió que "no se conceden nuevas licencias de exportación de armamento a Israel desde 7 de octubre".
Lo cierto es que el artículo 6.3 del Tratado de Comercio de Armas prohíbe expresamente el tránsito de esos productos con destino a países que puedan estar violando, entre otros, el derecho internacional humanitario. El reglamento que regula el comercio de material de defensa también señala que se puede cancelar un cargamento si hay "indicios" de que se pueda estar usando en un escenario bélico.
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"Que se tenga noticia de dos cargueros distintos, con armas para Israel y haciendo el mismo trayecto a través del puerto de Cartagena, hace temer que esa haya sido una ruta habitual de otros transportes de armas", subrayan en Rescop. "Deben investigarse a fondo los permisos de escala concedidos hasta la fecha y extremar las inspecciones de documentación y carga de los buques para impedir que esto vuelva a ocurrir", continúan. La asociación considera que sus denuncias han permitido abrir el debate en España y también agradecen la presión ejercida tanto por parte de Sumar como de Podemos.
El ala socialista no esconde su malestar con Sumar
En el ala socialista del Ejecutivo no esconden su malestar con su socio y con el que lo fuera la pasada legislatura y han tachado de "bulo" las acusaciones de ambas formaciones: "Simple y llanamente se han equivocado de barco", aseguró este viernes la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que tachó de "respetable" que el carguero Borkum no atracara en el el puerto de Cartagena. "Estaba claro el destino final del barco y de la carga del propio barco, que era República Checa", aseguró también el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, en declaraciones a Onda Cero.
Más comedido ha sido el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que en una entrevista en laSexta ha señalado que "no comprende" el malentendido que se ha producido con su socio de Gobierno. Precisamente este jueves altos representantes de PSOE y Sumar celebraron la primera reunión de la comisión de seguimiento de la coalición de Gobierno, donde los de Yolanda Díaz pidieron más coordinación y más medidas sociales. Sumar quiere que el "punto y aparte" anunciado por Sánchez hace unas semanas desemboque en cambios de calado dirigidos a la regeneración democrática.
Todo comenzó con una denuncia de la Red Solidaria con la Ocupación de Palestina (Rescop) el pasado martes. En un comunicado, esta ONG advertía de que el carguero Borkum procedente de Chennai (India había parado en suelo español, concretamente en Las Palmas de Gran Canaria, y preveía hacerlo también en Cartagena (Murcia) para acabar en el puerto de Ashdod, ubicado a apenas 30 kilómetros de la Franja de Gaza, en Israel. La asociación denunciaba que el barco contenía 20 toneladas de motores de cohetes, 12,5 toneladas con carga explosiva, 1.500 kilos de sustancias explosivas y 740 kilos de cargas, propulsores para cañón. Así, desde la organización solicitaban al Gobierno detener al Borkum, inspeccionar su carga e impedir su salida si , tras la revisión, se confirmaba que portaba material militar dirigido a Israel.