El PSOE reformará su código ético para impedir un nuevo 'caso Carmona'

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El malestar es mayúsculo. El fichaje como vicepresidente de Iberdrola del excandidato socialista a la Alcaldía de Madrid Antonio Miguel Carmona ha sido recibido en Moncloa y en la calle Ferraz como toda una declaración de guerra. La polémica contratación llega en plena batalla del Ejecutivo de Pedro Sánchez con las eléctricas a cuenta de las medidas aprobadas para rebajar la factura de la luz, algo que todas las fuentes consultadas no consideran, ni mucho menos, casual. Y la reacción parece que no se hará esperar. Según ha podido saber infoLibre, la Secretaría de Organización del partido propondrá en los próximos días una reforma específica del código ético socialista para evitar que casos como el de Carmona puedan repetirse en el futuro.

Por el momento no han trascendido más detalles de esa reforma, que podría incluir como requisito obligatorio una consulta previa a los órganos del partido. En cualquier caso, se trata de un paso importante porque, hasta el día de hoy, en los estatutos del PSOE no se hace mención alguna a la regulación de las conocidas como puertas giratorias. Por eso, y a pesar del enorme enfado que ha causado el movimiento de Carmona en Iberdrola, el partido no cuenta a día de hoy con margen de actuación legal alguno para sancionar o impedir casos como el de Carmona. Ese concepto, el de “puertas giratorias”, sí aparecía en el programa electoral de Pedro Sánchez para las generales de 2019. En concreto, en su página 165 se detalla la propuesta de “regular de manera más efectiva los conflictos de intereses ante el fenómeno de las puertas giratorias, fijando con precisión las condiciones de incompatibilidad para las personas interesadas y endureciendo las sanciones por su incumplimiento”.

El PSOE, contra Carmona

La voluntad ahora de acotar en el futuro este tipo de comportamientos surge tras la contratación del excandidato socialista por la mayor empresa eléctrica del país. Según la portavoz del Comité Organizador del 40º Congreso Federal del PSOE, Eva Granados, el partido “no sabía de esa decisión y, si nos hubiera preguntado, le hubiéramos dicho que no”. Granados ha marcado distancias con Carmona, que está enfrentado desde hace años a la dirección del partido, y ha querido recalcar que él “es un militante de base que no representa ni al PSOE ni a su militancia desde hace tiempo”.

Las críticas en público desde las propias filas del PSOE se han sucedido durante las últimas horas. El más duro en sus declaraciones ha sido el presidente asturiano, Adrián Barbón, que ha reconocido sentir “absoluta vergüenza” por el fichaje del exdirigente socialista en Madrid por la compañía eléctrica. Este mismo fin de semana, incluso el actual secretario de organización, Santos Cerdán, lamentaba en sus redes sociales que el fichaje suponía “un mal mensaje que emiten ambos”, en referencia a Carmona y también a la empresa.

No es la primera vez, ni mucho menos, que un ex alto cargo socialista accede a un puesto de responsabilidad en una gran compañía del sector eléctrico. De hecho, es recurrente en las críticas de otros partidos políticos la presencia durante años del expresidente Felipe González en el Consejo de Administración de Gas Natural, o los fichajes en diferentes compañías de exministros como Pedro Solbes, Jordi Sevilla o Elena Salgado. En esta ocasión, en el PSOE consideran que es el contexto de enfrentamiento con el sector y de precios históricos de la energía lo que marca el punto de inflexión. De hecho, varias fuentes consultadas ponen el énfasis en que, a diferencia de esos otros casos, Carmona ni ha ostentado nunca responsabilidades de Gobierno, ni actualmente ocupa cargos orgánicos ni siquiera es cercano a la dirección del partido, pero que es el escenario de guerra abierta con las eléctricas lo que les hace otorgarle la categoría de “provocación”.

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Medidas del Ejecutivo

Tras varios meses de subidas históricas del precio de la luz, el presidente del Gobierno anunció a mediados de septiembre una batería de medidas encaminadas a aminorar el impacto de las subidas de la energía en lo que pagan los ciudadanos a final de mes. El Consejo de Ministros aprobó limitar el precio del gas a costa de los beneficios de las empresas eléctricas, “que son extraordinarios por los precios de la energía, y a mí eso me parece inaceptable”, afirmó entonces Pedro Sánchez.

La respuesta de las compañías no se hizo esperar. Calificaron la medida del Ejecutivo como una “intervención del mercado” que tendría como consecuencia un grave problema de “inseguridad jurídica''. Y anunciaron que lo ponían en manos de sus equipos de abogados. Fue el antepenúltimo episodio de la guerra abierta con el Gobierno a cuenta de la factura de la luz. El penúltimo ha sido el fichaje del todavía militante socialista Antonio Miguel Carmona como vicepresidente de Iberdrola, interpretado dentro y fuera del Partido Socialista como “la respuesta” del sector a las medidas legislativas impulsadas por el Ejecutivo que impactan de lleno en las cuentas de resultados de las empresas.

El malestar es mayúsculo. El fichaje como vicepresidente de Iberdrola del excandidato socialista a la Alcaldía de Madrid Antonio Miguel Carmona ha sido recibido en Moncloa y en la calle Ferraz como toda una declaración de guerra. La polémica contratación llega en plena batalla del Ejecutivo de Pedro Sánchez con las eléctricas a cuenta de las medidas aprobadas para rebajar la factura de la luz, algo que todas las fuentes consultadas no consideran, ni mucho menos, casual. Y la reacción parece que no se hará esperar. Según ha podido saber infoLibre, la Secretaría de Organización del partido propondrá en los próximos días una reforma específica del código ético socialista para evitar que casos como el de Carmona puedan repetirse en el futuro.

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