"¿Cómo piensa el Gobierno ejecutar las decisiones del poder legislativo?". Está fue la pregunta con la que se estrenó el líder de Podemos, Pablo Iglesias, en la sesión de control al Gobierno en esta legislatura. La cuestión viene precedida de una serie de encontronazos entre el Gobierno y el Congreso de los Diputados en forma de intento de veto de las iniciativas de los partidos de la oposición apelando a que suponen un incremento presupuestario que amenaza con llegar al Tribunal Constitucional. En su respuesta, Mariano Rajoy, que se comprometió en su investidura al diálogo y a tener la mano tendida, fue muy claro en su respuesta: "Pensamos aplicar aquellas que sea obligatorio aplicarlas", espetó.
Con estas palabras, Rajoy dejó claro que su Gobierno no se siente obligado a cumplir el mandato de la Cámara, por ejemplo, en lo que tiene que ver con las mociones consecuencia de interpelación urgente, un instrumento con el que los grupos parlamentarios pueden instar al Gobierno a tomar determinadas medidas. Al no tener carácter normativo estas cuestiones se quedan en declaraciones de intenciones a merced de la voluntad del Gobierno.
Esta afirmación implica que el Gobierno hará caso omiso a iniciativas como la que el martes les instó a derogar la ley mordaza y que fue aprobada ampliamente por el Congreso de los Diputados. Una jornada en la que también salieron adelante mociones como a que insta al Ejecutivo a prohibir a las eléctricas que corten el suministro de luz sin previa consulta a los servicios sociales y una de Ciudadanos relacionada con la exigencia de que los beneficiarios de la amnistía fiscal de 2012 paguen el 10% de las cantidades afloradas y no el 3% como ocurrió en la mayor parte de los casos.
"En España la soberanía reside en el Parlamento, hacer leyes que modifiquen en algo la vida de la gente", respondió Iglesias a Rajoy. "¿Qué le preocupa más: lo que piense en este Parlamento o lo que piense la señora Merkel? Hay muchos ciudadanos que tienen la impresión de que en España manda más Merkel que este Parlamento y ese es un problema que le debería preocupar", afirmó Iglesias. Rajoy respondió con ironía: "A mí Merkel nunca me ha dado una orden, pero si se la ha dado a usted, dígamelo porque le llamaré la atención". Después, insistió en la separación de poderes.
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El Congreso de los Diputados y el Gobierno tienen un conflicto sobre 16 iniciativas de la oposición. En todas estas ocasiones el Ejecutivo se ha dirigido a la Mesa de la Cámara para vetar propuestas de la iniciativa con el argumento de que no puede salir adelante ninguna medida que implique un compromiso presupuestario. Ha ocurrido, por ejemplo, con la paralización de la Lomce, con la subida del Salario Mínimo Interprofesional y con la subida de las pensiones.
A día de hoy, la crisis entre los poderes Ejecutivo y Legislativo está en stand by. Este martes la Mesa del Congreso recibió un informe de los letrados de la Cámara sobre la cuestión concreta de los vetos. El órgano de Gobierno del Parlamento decidió tomarse más tiempo para tomar una decisión.
"¿Cómo piensa el Gobierno ejecutar las decisiones del poder legislativo?". Está fue la pregunta con la que se estrenó el líder de Podemos, Pablo Iglesias, en la sesión de control al Gobierno en esta legislatura. La cuestión viene precedida de una serie de encontronazos entre el Gobierno y el Congreso de los Diputados en forma de intento de veto de las iniciativas de los partidos de la oposición apelando a que suponen un incremento presupuestario que amenaza con llegar al Tribunal Constitucional. En su respuesta, Mariano Rajoy, que se comprometió en su investidura al diálogo y a tener la mano tendida, fue muy claro en su respuesta: "Pensamos aplicar aquellas que sea obligatorio aplicarlas", espetó.