Las renuncias de Chacón y Lozano obligan a Sánchez a reconstruir la candidatura socialista por Madrid

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Ibon Uría

Pedro Sánchez, secretario general del PSOE, lo dijo el martes: su intención era "repetir las listas" del 20-D en junio. La dirección federal lo reiteró el miércoles: salvo "circunstancias sobrevenidas" los socialistas concurrirían con las mismas candidaturas. Y el propio Sánchez insistió este jueves en que su deseo era no hacer cambios. Pero las renuncias de la que fuera cabeza de cartel por Barcelona en diciembre, Carme Chacón, y de la cuatro por Madrid, Irene Lozano, han dado al traste con esos planes y obligan a reconstruir la lista del partido por Madrid a apenas dos semanas del Comité Federal que deberá dejar resueltas las candidaturas.

Primero se conoció el paso atrás de Chacón. La noticia la adelantó El Periódico a última hora del miércoles y la confirmó ella misma en la mañana del jueves. La dirigente catalana alegó "motivos políticos" y afirmó que "no son relevantes", pero no entró en detalles. Chacón, número uno por Barcelona el 20-D, prometió seguir "haciendo política" y por ahora sigue como secretaria de Relaciones Internacionales en la Ejecutiva del PSOE. Apenas tres horas más tarde anunció su renuncia Irene Lozano. La exdiputada de UPyD publicó un tuit en el que agradeció a Sánchez su "deseo de contar de nuevo" con ella y expresó su intención de emprender otros "proyectos profesionales".

Fuentes socialistas consultadas por infoLibre señalan que el entorno de Sánchez no conocía que iba a producirse la renuncia de Carme Chacón, que encabezó la lista por la capital catalana en 2008, 2011 y 2015. La noticia, afirman, fue "una sorpresa" que el secretario general conoció "el miércoles por la tarde". En el entorno de Chacón explican por su parte que hizo referencia a causas políticas para que su salida fuera "elegante", para abandonar "sin hacer ruido". No quería excusarse en "motivos personales" porque "no tiene ningún problema personal", subrayan personas próximas a la dirigente, que argumentan que está "decepcionada" con la marcha de la política española en los últimos meses.

Distinto fue el caso de Irene Lozano. Cargos consultados por este diario explican que Sánchez estuvo "trabajando" para que diera un "paso atrás" y que conocía la noticia. Lozano fue su apuesta personal en diciembre y su fichaje causó un profundo malestar. Algunos barones dudaron de la eficacia como arma electoral de la exdiputada de UPyD y criticaron la inclusión, en un puesto que le garantizaba sacar un escaño, de quien durante años atacó duramente a los socialistas desde las filas del partido de Rosa Díez.

Por si fuera poco, el PSOE se estrelló en Madrid el 20-D: perdió más de ocho puntos con respecto al 2011 –del 26% al 17,8%– y cayó a la cuarta posición por detrás de PP, Podemos y Ciudadanos. El resultado certificó el fracaso de la operación Lozano.operación Lozano La presencia pública de la diputada fue escasa antes y después de las elecciones. Fuentes del partido señalan que "llevaba mal" estar "escondida" y no se adaptó demasiado a sus compañeros de bancada. "Zaida [Cantera] fue más proactiva", comenta una fuente en referencia a la adaptación al partido de la excomandante retirada que fichó el PSOE como número seis por Madrid en diciembre.

Recambio en Barcelona

El nombre que más suena para sustituir a Chacón y encabezar la lista por la provincia catalana es el de Meritxell Batet, secretaria de Estudios y Programas del PSOE y que en diciembre fue la número dos de Sánchez en Madrid. Este jueves Sánchez destacó que Batet cuenta con su "máxima confianza". La propia Batet agregó: "Hay tiempo para pensar y creo que me lo voy a tomar". Un cargo de la ejecutiva del PSC asegura a infoLibre que Batet tenía previsto repetir como número dos en Madrid: "Pedro [Sánchez] la quería ahí, se siente bien acompañado". Pero ahora la situación ha cambiado, apunta: "Sin Chacón estamos descabezados. Veo muy probable que Meritxell venga a Barcelona, y ella parece dispuesta".

La dirección del PSC se reúne este mismo viernes a las 10:30 horas para diseñar las primarias para elegir a su candidato. El exsenador Carles Martí ya anunció que quiere competir en ese proceso, pero fuentes de la ejecutiva de los socialistas catalanes manifiestan con rotundidad que "no es una verdadera alternativa". Afirman que, contra Chacón, Martí podría haber logrado "un 30% o un 40% de los votos". "Habría perdido, pero podría haber reunido a ese sector descontento con Carme [Chacón], en especial tras la última campaña –en la que Chacón dejó fuera de las listas a dirigentes con peso, como Pere Navarro–". En el entorno de Chacón subrayan que la perspectiva de tener que someterse a unas primarias no ha influido en su decisión de dar un paso atrás y restan capacidad a Martí para aglutinar a ese supuesto sector crítico.

En el nuevo escenario, en unas hipotéticas primarias contra Batet, en el PSC dan por seguro que Martí "no tiene nada que hacer". El propio Martí ha abierto la puerta a retirarse, de modo que habría una única candidata y se evitarían las primarias. "Es que Martí sacaría pocos o ningún voto", comenta un cargo de la dirección de los socialistas catalanes, que espera que Batet anuncie "pronto" su disposición a liderar al partido por Barcelona. "La ejecutiva de este viernes comienza a las 10:30 horas, y estaría bien empezarla sabiendo que Meritxell [Batet] viene o, al menos, teniendo un indicio fuerte en ese sentido", añade.

De confirmarse la marcha de Batet a Barcelona, se abrirá otro hueco en la lista por Madrid: al cuatro, liberado por la marcha de Lozano, se sumaría el agujero que dejaría Meritxell Batet en el número dos.

En busca de un fichaje

Esa situación obligaría a Sánchez a mover varias fichas en la capital. Especialmente en los puestos pares, los que ocupan las mujeres –las listas tienen formato cremallera–. El primer reto en el que está enfrascado, señalan a este diario fuentes del partido, es buscar un "fichaje" que ocupe el número dos, que suponga un "golpe de efecto" y un "revulsivo" capaz de impulsar a los socialistas. Varios cargos del PSOE comentan que Sánchez no descarta "fichar a alguien de fuera del mundo de la política" y "con proyección", aunque al mismo tiempo admiten que no es tarea fácil. Por ahora no hay nombres.

Después está el cuarto puesto, la silla dejada vacía por Irene Lozano. Se baraja la opción de Luz Rodríguez, secretaria de Empleo del PSOE y hasta diciembre estrecha colaboradora de Sánchez. Entonces el secretario general la desplazó a Guadalajara para hacer hueco a Lozano en Madrid. Fuentes socialistas comentan que tras aquel episodio la relación de Rodríguez y Sánchez "ya no es la misma". De cara a junio, los socialistas de Castilla-La Mancha defienden que debe encabezar la lista por esa circunscripción Pablo Bellido, exalcalde de Azuqueca de Henares que en diciembre estaba imputado en una causa que sus valedores en el PSOE definen como "maniobra del PP para apartarlo", ya que estaba impulsada por los conservadores y se archivó poco después.

La otra mujer que podría ocupar el cuarto puesto por Madrid es Ángeles Álvarez. En diciembre fue de número ocho y se quedó fuera del Congreso. A su favor tiene una amplia trayectoria en defensa del feminismo y los derechos de las minorías sexuales. "Representa a una parte importante del partido en Madrid" y habrá "presión" del sector "feminista" para que pueda lograr un escaño, según señalan a este diario varias fuentes. En el sexto puesto, por último, la excomandante Zaida Cantera cuenta con la mayoría de opciones para repetir como candidata. Cantera sería, de repetirse los resultados del 20-D, la última mujer en lograr escaño por Madrid de la lista del PSOE, que obtuvo precisamente seis actas por esa circunscripción. 

El puesto de Madina

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Entre los puestos impares de la lista, los que ocupan los hombres, la mayor duda es el papel de Eduardo Madina. Madina ocupó en diciembre el séptimo puesto por Madrid y se quedó fuera del Congreso. Según expresó Sánchez este jueves su intención es que repita en ese mismo lugar, que calificó como "un puesto muy digno". La presidenta andaluza Susana Díaz advirtió poco después de que los socialistas "no pueden prescindir del talento humano y de la capacidad" de Madina. "Es un lujo tenerlo entre los tuyos y una garantía", añadió.

Algunas fuentes consultadas por infoLibre afirman "no comprender" por qué Madina, ante la perspectiva de repetir en un puesto que a priori lo dejará nuevamente sin escaño, no "da un portazo". Argumentan que en diciembre el equipo de Sánchez podía defender que ir de número siete le permitiría sacar un acta, mientras que ahora eso no es creíble. Otros sectores consideran que Madina, a quien sitúan como "muy próximo" a Susana Díaz, podría estar haciendo cálculos para el día después de las elecciones. Y si la líder andaluza llegara a tomar las riendas del partido, parte de los diputados afines a Sánchez "se irían" y el vasco podría entrar finalmente en el Congreso, sostienen.

Sea como sea, todos los cargos consultados por este diario coinciden en que la dirección federal "ha tomado" por ahora "una decisión definitiva". El entorno de Madina destaca que está meditando sobre la decisión que debe tomar, aunque añaden que muchos militantes le están "pidiendo que vaya" en las listas. Todo apunta a que el político vasco repetirá en el número siete.

Pedro Sánchez, secretario general del PSOE, lo dijo el martes: su intención era "repetir las listas" del 20-D en junio. La dirección federal lo reiteró el miércoles: salvo "circunstancias sobrevenidas" los socialistas concurrirían con las mismas candidaturas. Y el propio Sánchez insistió este jueves en que su deseo era no hacer cambios. Pero las renuncias de la que fuera cabeza de cartel por Barcelona en diciembre, Carme Chacón, y de la cuatro por Madrid, Irene Lozano, han dado al traste con esos planes y obligan a reconstruir la lista del partido por Madrid a apenas dos semanas del Comité Federal que deberá dejar resueltas las candidaturas.

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