El caso Lezo, la nueva trama de corrupción que afecta al PP de Madrid y que se hizo pública la semana pasada, ha entrado centrado la actualidad de los últimos días. El PSOE no ha sido ajeno a ello, y el debate sobre cómo responder ha entrado de lleno en la carrera de sus primarias: aunque ninguno de los tres aspirantes con opciones a ocupar su Secretaría General cree que la corrupción del PP vaya a convertirse en un eje central de la campaña de las primarias, lo cierto es que este martes el ex secretario general y actual candidato Pedro Sánchez exigió a su partido que pida ya la comparecencia del presidente Mariano Rajoy en el Congreso para dar explicaciones, y lamentó que la gestora sigue "sin entender nada" cuando ésta le respondió con una negativa.
Desde la semana pasada, la corrupción vuelve a estar en el principal foco de atención mediática, ya que en los últimos días se han sucedido las detenciones de figuras del PP o vinculadas a él tan ilustres como el expresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González. El estallido del caso ya se ha llevado por delante a la que hasta el lunes era la portavoz del PP en el Ayuntamiento de la capital, Esperanza Aguirre, y son muchas las voces que piden ya la comparecencia de Rajoy para que dé explicaciones por el enésimo caso de corrupción que afecta a dirigentes del partido conservador.
También lo hacen en el PSOE, aunque la gestora que actualmente lo dirige quiere que esa comparecencia se realice en la comisión de investigación sobre la financiación del PP, que aún no se ha constituido, y no en el pleno del Congreso, como pide Sánchez. No obstante, las detenciones e imputaciones que se han conocido en los últimos días en relación al caso Lezo han obligado a los socialistas a moverse y, tal y como anunció este lunes el portavoz del PSOE en el Congreso, Antonio Hernando, han solicitado a la presidenta de la Cámara baja, Ana Pastor, que en los próximos días se constituya esa comisión.
Y es que el descubrimiento de una nueva trama de corrupción que afecta al corazón del PP supone un impulso para un Sánchez que ve así reforzado su mensaje de oposición frontal al PP. No obstante, su entorno afirma que el candidato no va a convertir el caso Lezo en uno de los ejes de su campaña porque, sostienen, no lo necesita. "Nuestro principal eje, con gran diferencia, es el proyecto de partido que defendemos, aunque sí es verdad que el hecho de que aparezcan casos nuevos de corrupción nos puede servir, de manera accesoria, para recordar la gravedad de la corrupción de un Gobierno al que nosotros, con la abstención, permitimos mantenerse en el poder", explica un dirigente muy próximo a Sánchez.
En este sentido, estas fuentes sostienen que Sánchez "ya tiene un relato bien construido", basado en la oposición a la abstención del PSOE para dejar gobernar al PP y en la necesidad de imprimir un giro a la izquierda a la formación "para que no nos pase lo que le ha pasado al Partido Socialista en Francia", cuya debacle los sanchistas achacan a las medidas tomadas por François Hollande en sus cinco años como presidente. "De hecho, Pedro [Sánchez] es el único que tiene relato", defienden sus allegados.
Así las cosas, los de Sánchez critican a los partidarios de Susana Díaz y a la gestora porque consideran que están teniendo una reacción demasiado tibia con Rajoy y el PP a raíz del último caso de corrupción conocido. "La gestora siempre actúa con retraso y, más allá de que crean o no en lo que están haciendo, si se han movido es porque están en periodo electoral", denuncia un dirigente al ser preguntado por la petición de los socialistas a Ana Pastor para que dé un impulso a la creación de la comisión de investigación sobra la financiación del PP.
El entorno de Díaz culpa a Sánchez
Pero el sector de Susana Díaz no cree que vayan a verse perjudicados por el hecho de que vuelvan al primer plano los casos de corrupción que afectan a los conservadores. A la hora de responder a la responsabilidad que les imputa el equipo de Sánchez en que el PP siga gobernando pese a todos los escándalos, los argumentos que esgrime el entorno de la presidenta andaluza son prácticamente calcados a los que ofreció el PSOE en su día para abstenerse para dar el Gobierno a Rajoy: los socialistas están en las antípodas de los conservadores, pero la debilidad del partido en las instituciones –ocasionada por los malos resultados de Sánchez en las elecciones– no les dejó otra opción para no bloquear la gobernabilidad.
"No creo que nos vaya a perjudicar en las primarias" que se haya conocido un nuevo caso de corrupción de los conservadores, insiste un dirigente próximo a Díaz, que señala que la candidata se está esforzando en "explicar que estábamos muy mal, tanto electoralmente como orgánicamente", como para no dejar gobernar a Rajoy. "Y eso los militantes lo saben".
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"La pregunta que debería hacerse Sánchez es cómo es posible que este PP, con todos los escándalos de corrupción que lleva a sus espaldas y con todos los recortes que ha hecho en los últimos años, le haya sacado dos millones y pico de votos, porque el máximo responsable de eso es él, que encabezaba la candidatura el 20D y el 26J", denuncian estas fuentes. Por ello, si el discurso de la candidata se endurece en algún sentido, será en ese, afirma su entorno: "Igual tenemos que subir el tono y [Sánchez] necesita escuchar más alto" que si Rajoy y el PP gobiernan es "por su responsabilidad", critican los dirigentes consultados.
Patxi López, por su parte, ya se ha pronunciado públicamente al respecto, aunque no ha entrado en las críticas que se han dedicado entre sí sus dos contrincantes. El eje de la táctica del exlehendakari sigue consistiendo en presentarse como el candidato que se sitúa entre Sánchez y Díaz y como el único capaz de restaurar la unidad en un partido fracturado. No obstante, también se ha referido al caso Lezo: este martes aseguró que "la corrupción no van a ser capaz de desterrarla los que mandan mensajes de apoyo a los corruptos", en referencia al SMS enviado por el ministro de Justicia, Rafael Catalá, a Ignacio González a finales de 2016.
Pero fuentes de su candidatura dudan de que la corrupción del PP vaya a influir en las primarias del PSOE: "No veo cómo un militante va a poder cambiar su voto por este tema, la verdad", apunta un dirigente próximo a López.
El caso Lezo, la nueva trama de corrupción que afecta al PP de Madrid y que se hizo pública la semana pasada, ha entrado centrado la actualidad de los últimos días. El PSOE no ha sido ajeno a ello, y el debate sobre cómo responder ha entrado de lleno en la carrera de sus primarias: aunque ninguno de los tres aspirantes con opciones a ocupar su Secretaría General cree que la corrupción del PP vaya a convertirse en un eje central de la campaña de las primarias, lo cierto es que este martes el ex secretario general y actual candidato Pedro Sánchez exigió a su partido que pida ya la comparecencia del presidente Mariano Rajoy en el Congreso para dar explicaciones, y lamentó que la gestora sigue "sin entender nada" cuando ésta le respondió con una negativa.