RENOVACIÓN DEL PODER JUDICIAL

Sánchez impulsará un cambio en el CGPJ si no hay acuerdo con el PP antes de que acabe junio

Pedro Sánchez en La Hora de la 1 con Silvia Intxaurrondo y Marc Sala.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se da hasta finales de mes de junio para intentar renovar con el Partido Popular el Consejo General del Poder Judicial y, en caso de que no se produzca un acuerdo, está dispuesto a impulsar un cambio legislativo que afecte a este órgano en sus competencias sobre nombramientos.

"Se acabó el día de la marmota", indicó el presidente en una entrevista en TVE, donde especificó que tiene previsto pactar con Sumar y el resto de socios de investidura cambios en el Consejo General del Poder Judicial para eliminar los efectos perversos que hacen que el Partido Popular no acceda a pactar la renovación.

Sánchez no puso el foco en el cambio de mayorías, sino en la posibilidad de acabar con facultades del CGPJ para hacer nombramientos en el Supremo y en los tribunales superiores, algo que, a su juicio, hace que el PP quiera controlar este órgano. El jefe del Ejecutivo rechazó la propuesta del PP de que sólo sean los jueces los que elijan el Consejo General del Poder Judicial y defendió que ya las asociaciones propone nombres para que luego las Cortes elijan. Su idea es que se revise esa potestad de nombramientos para hacerla "más objetiva, más transparente y no politizada".

El presidente del Gobierno también remarcó el anuncio que hizo minutos antes en el Congreso de que va a presentar un paquete de regeneración democrática durante el mes de julio, que está siendo ya trabajado junto a los socios de Sumar.

No habrá adelanto electoral

El presidente del Gobierno también quiso dejar de manera clara su idea de que no va a convocar elecciones generales como le pide el Partido Popular: "Llevamos cuatro elecciones en seis meses. La política española merece cierto sosiego, estabilidad y afrontar los desafíos en el ámbito económico. Y está pendiente la tarea de cómo mejorar la calidad democrática".

El jefe del Ejecutivo insistió en su intención de presentar presupuestos generales para el año que viene. Confesó que no habrá tanto volumen de leyes como en la anterior legislatura pero puso fecha a ese paquete de regeneración (antes de que acabe julio) y a los cambios en el CGPJ si el PP no accede antes de que acabe junio.

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El presidente reconoció que cumplió su objetivo "a medias" el pasado domingo en las urnas, pero destacó que es uno de los partidos de gobierno que mejor ha resistido (por encima del 30%) dentro de la UE. Felicitó al PP pero señaló que no cumplió el objetivo de convertir la cita en un plebiscito y de hacer caer al Ejecutivo de coalición. No obstante, indicó que España no está a salvo de esa ola ultra. A su entender, la "máquina de fango" del PP sólo ha servido para alimentar a la extrema derecha de Vox y de Se acabó la fiesta.

También lamentó el coste que tiene para su familia esa "máquina del fango" a través de las denuncias del grupo de ultraderecha contra su mujer y contra su hermano. Pero dijo que son personas honestas y que está convencido de que el tiempo les dará la razón.

El jefe del Ejecutivo quiso asimismo mostrar su respeto a la renuncia de Yolada Díaz como coordinadora de Sumar, poniendo en valor que la manera de hacer política de la izquierda es totalmente diferente a la de la derecha. A la vez deseó que "acierte" el espacio en su nuevo rumbo, confiando en que estén fuertes a su izquierda para poder mantener el Gobierno en las próximas elecciones en 2027.

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