El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, zanjó este sábado la polémica de las listas electorales en torno al exdiputado Eduardo Madinar respondiendo a aquellos dirigentes que demandan de cara al 26-J un puesto de salida para el exparlamentario vasco que le garantice estar en el nuevo Congreso de los Diputados. Así, durante la reunión a puerta cerrada del Comité Federal, el líder socialista defendió, según fuentes de la formación, que no pueden dedicarse a hablar de los números de las candidaturas cuando tanto han "criticado" a Podemos por los "sillones". "Nosotros no somos como Podemos", añadió.
Un cónclave que comenzó con la intervención en abierto de Sánchez. Trece minutos de un discurso en clave electoral en los que el secretario general del PSOE señaló que el partido liderado por Pablo Iglesias no es el enemigo a batir el próximo 26 de junio. "Nuestro adversario se llama desigualdad, corrupción y falta de oportunidades laborales", apuntó desde el atril.
“No aspiro a asaltar los cielos, tan solo quiero sacar a los españoles del infierno de la desigualdad en el que lo han metido las políticas de la derecha”, añadió el líder socialista, que recordó que el pasado 20-D su partido entendió “el mensaje de la ciudadanía” y tendió puentes “a la derecha y a la izquierda”. “Yo dije que no iba a ser presidente del Gobierno a cualquier precio y he cumplido con la palabra. No he sido presidente con el apoyo de Podemos y el apoyo oculto de formaciones independentistas”, sentenció.
Sánchez prosiguió su intervención afirmando que los electores tendrán que decidir el próximo 26-J “o cambio o continuismo” de un presidente del Gobierno que “no aceptó los resultados electorales” del mes de diciembre por su “incapacidad para dialogar y tender puentes con otras formaciones políticas, algo que, en su opinión, le “incapacita” para seguir siendo líder del Ejecutivo. En esta línea, el líder socialista también cargó contra Podemos: “Es verdad que tuvo un aliado inesperado, que fue el señor [Pablo] Iglesias”, continuó el secretario general, que apuntó que el jefe de la formación morada “nunca quiso que hubiera un presidente del PSOE en España”.
Ante el máximo órgano del PSOE entre congresos, Sánchez solicitó a los suyos que cierren filas de cara a las elecciones del próximo 26 de junio. Así, el máximo dirigente socialista pidió “unidad y confianza” en su persona “en esta encrucijada en la que se sitúa España” para “poner fin” al Gobierno de Mariano Rajoy en la próxima cita con las urnas. “Estoy convencido de que el cambio será”, aseveró Sánchez, que se mostró seguro de que la formación está “en mejores condiciones de ganar” las generales que el pasado 20-D porque la sociedad española “ha visto en el PSOE un partido que antepone el interés general al particular”.
Ninguna mención a las listas en su discurso en abierto
El líder socialista no hizo este sábado en su discurso en abierto ninguna alusión a la estructura de las listas, un tema que ha agitado internamente al partido en la última semana. Las renuncias de Irene Lozano –número cuatro por Madrid el pasado 20-D– y Carme Chacón –candidata por Barcelona– el pasado jueves, dejando dos puestos libres que deberán ser ocupados por mujeres debido al formato cremallera de las listas, y los repetidos pronunciamientos de dirigentes socialistas pidiendo un puesto de salida para Eduardo Madina que le garantice un escaño en la próxima legislatura –se quedó fuera las pasadas generales al ir de número siete por Madrid– han condicionado la última semana.
En este sentido, Pedro Sánchez se mostró contundente el pasado viernes: “Seguirá en las listas como número siete por Madrid”, dijo el secretario general del PSOE. Una opinión que contrastaba con la expresada por la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, que defendió el pasado jueves que “no pueden prescindir del talento humano ni de la capacidad” del político vasco y se mostró el viernes dispuesta a “ayudar” y “colaborar” para que Madina no se quede fuera del hemiciclo.
Una idea que también defendió este sábado ante los periodistas en el receso del máximo órgano de los socialistas entre congresos. En su opinión, “sería bueno” que el político vasco estuviera tras el 26-J dentro del Grupo Parlamentario Socialista. Sin embargo, aseguró que no quiere meterse “ni en el orden ni en los números” de las listas: "Bastante tengo yo con hacer las listas de Andalucía como para también meterme en cómo tienen que ser las listas del resto de España", concluyó.
"Monopolizar el cambio"
Después de escuchar ocho turnos de palabra, tocaba la réplica del líder socialista. Según las mismas fuentes del PSOE, el secretario general entró en el tema de las listas felicitando al exdiputado y miembro del equipo negociador José Enrique Serrano, del que recalcó que fue y seguirá siendo el número nueve de la lista por Madrid, en una clara referencia al caso del exdiputado Madina. Tras esto, defendió que los socialistas no pueden dedicarse a hablar de los números de las listas cuando tanto han "criticado" a Podemos por los "sillones". "Nosotros no somos como Iglesias", zanjó.
Sánchez también apuntó a puerta cerrada que el encargo al comité negociador "era claro" y tiró de hemeroteca para acusar a Podemos de haber "intentado monopolizar el cambio", calificando de "insultante en la forma" la propuesta de los de Iglesias que tenía el objetivo de "bloquear el entendimiento con las otras fuerzas. El secretario general cerró el cónclave insistiendo en que el PSOE sale "a ganar", aunque señaló que si se vuelve a presentar un escenario en el que haya que llegar a acuerdos volverán a "tender la mano a las fuerzas del cambio", en referencia a Podemos y Ciudadanos.
Prudencia en los barones socialistas
A la entrada del Comité Federal, varios dirigentes socialistas también extremaron la prudencia al pronunciarse sobre este tema. La presidenta del partido, Micaela Navarro, pidió dejar a la federación madrileña y a la Ejecutiva federal que ordenen esas listas: “Siempre que se hace una candidatura se intenta poner a los mejores y ordenados de la mejor manera”, sentenció en declaraciones a los medios.
En la misma línea intervinieron en la puerta algunos barones. La secretaria general del PSE, Idoia Mendia, preguntada por la subida del político vasco al quinto lugar de la lista, que el pasado 20-D ocupaba Rafael Simancas, dijo estar “convencida” de que Madina “saldrá diputado en las próximas elecciones generales” porque “seguramente” el PSOE saque un “mejor resultado” en Madrid. Al ser insistida en este sentido, apuntó que “los compañeros que van en los puestos tres –que ocupó Antonio Hernando– y cinco” son “muy valiosos para la organización”.
“Creemos que esto no es un tema de nombres, no es solo defender un nombre, es tema de defender un proyecto”, señaló la secretaria general del PSM, Sara Hernández, que se limitó a decir que el PSOE elegirá “a los mejores” porque tienen “cantera suficiente”: “Yo no voy a pararme a hablar de un solo nombre dejando fuera a más de 200.000 militantes. Todos son importantes y todos pueden aportar de la misma manera”, concluyó.
Una postura que también mantuvieron sus homólogos en Cataluña y Aragón, Miquel Iceta y Javier Lambán. “Eduardo Madina es un hombre muy valioso para el PSOE y su futuro lo tiene que decidir él y la federación en la que decida actuar”, afirmó el aragonés. El primer secretario del PSC, por su parte, dijo que “puesto garantizado de salida en las listas deberían tenerlo los diez primeros de Madrid” y deseó que los resultados en la capital “vayan muy bien”.
Algo más claro se mostró el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, al ser cuestionado por el mismo tema. “Si lo que queremos es ganar al PP y las elecciones hay que contar con los mejores y creo que de las mejores cabezas que conozco es Madina”, aseguró el dirigente socialista, que hizo hincapié en que es “de esas personas que computan en los partidos”.
Candidaturas y calendario de primarias
La dirección federal sometió este sábado a juicio del Comité Federal su propuesta de calendario para elegir al candidato a la Presidencia del Gobierno en las elecciones de junio. Toda vez que ni la andaluza Susana Díaz ni ningún otro dirigente están dispuestos a discutirle el puesto, Sánchez tiene garantizado, sin necesidad de votar, repetir como cabeza de cartel. Aún así se han diseñado unas primarias exprés que, al menos en el plano teórico, dejan abierta la puerta a otros hipotéticos competidores. “Doy un paso al frente y quiero volver a ser el candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno”, anunció el líder socialista al término de su discurso en abierto de poco más de trece minutos.
En la práctica todos en el PSOE dan por hecho que sólo el secretario general logrará los casi 9.500 avales necesarios y que cualquier rival se estrellará en esa primera fase de recogida de apoyos, de modo que no llegará a haber votación y Sánchez repetirá como cabeza de cartel.
Las restantes candidaturas, que la dirección quiere modificar mínimamente, tampoco se votarán este sábado: las ejecutivas autonómicas disponen aún de casi dos semanas para proponer los cambios que consideren oportunos. Después la comisión federal de listas emitirá un dictamen entre los días 13 y 15 de mayo, y el Comité Federal las ratificará ese mismo fin de semana.
Pasadas las 12.30 horas, el cónclave dio el visto bueno a los dos documentos presentados: el acuerdo de la Comisión Ejecutiva Federal del pasado 27 de abril en el que se establece que las candidaturas del pasado 20-D no se toquen salvo "circunstancias sobrevenidas" y el nuevo calendario de primarias, que arranca este domingo con la apertura del plazo para la presentación de las candidaturas.
El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, zanjó este sábado la polémica de las listas electorales en torno al exdiputado Eduardo Madinar respondiendo a aquellos dirigentes que demandan de cara al 26-J un puesto de salida para el exparlamentario vasco que le garantice estar en el nuevo Congreso de los Diputados. Así, durante la reunión a puerta cerrada del Comité Federal, el líder socialista defendió, según fuentes de la formación, que no pueden dedicarse a hablar de los números de las candidaturas cuando tanto han "criticado" a Podemos por los "sillones". "Nosotros no somos como Podemos", añadió.