El Tribunal Constitucional (TC) ha desestimado por unanimidad el recurso de inconstitucionalidad que presentó el PSOE de Castilla-La Manchacontra la reforma del Estatuto de autonomía de la región, que fue modificado por el Gobierno de María Dolores de Cospedal para reducir el número de diputados autonómicos.
El pleno, en su sentencia [consúltala aquí en PDF], rechaza que la reducción de parlamentarios, de los 53 actuales a un número que puede oscilar entre 25 y 35, vacíe de contenido la autonomía política de la comunidad autónoma convirtiendo a las Cortes de Castilla-La Mancha, según alegan los recurrentes, "en un órgano de tipo administrativo" y sustrayéndoles "su verdadera capacidad de hacer leyes como producto de la voluntad general".
Y es que el fallo señala que la Constitución no fija "pauta alguna" sobre el número de integrantes del respectivo órgano legislativo, sino que es una "determinación que corresponde a la ley orgánica que apruebe cada Estatuto o a las normas autonómicas".
El Constitucional apunta que, en general, una reducción del número de diputados como la que prevé la ley recurrida "no favorece, más bien al contrario, la mayor proporcionalidad del sistema electoral de que se trate". Aunque existen otras variables, como son "el número de candidaturas presentadas y el grado mayor o menor de concentración o dispersión entre ellas del sufragio de los electores", que también influyen.
Sobre la exigencia de proporcionalidad, el TC, señala que, siempre y cuando no se rebasen determinados límites, el legislador goza de "libertad" para elegir un concreto modelo entre la pluralidad de opciones existentes y que no puede anticiparse en qué medida la reforma impugnada pueda disminuir la proporcionalidad, por lo que "no es algo que pueda ser enjuiciado en este proceso constitucional".
Por ello el pleno rechaza que se haya vulnerado la proporcionalidad y, con ella, el pluralismo político y el derecho a acceder a los cargos públicos en condiciones de igualdad.
"Lo que ha buscado Cospedal es hacer trampas"
El PSOE regional expresó que, "a pesar de la sentencia del Constitucional, lo que ha buscado Cospedal cambiando el Estatuto y dos veces la ley en un año es hacer trampas electorales”. A los socialistas les produce, no obstante, "sonrojo" esta sentencia. "Si el TC interpreta que ese pucherazo y esa imposición unilateral es razonable, es que hoy más que nunca es necesario hacer una reforma constitucional para blindar esa esencia y esos valores de concordia y concertación", afirmó.
La vicesecretaria general del PSOE manchego, Cristina Maestre, aseguró este viernes que “a partir del mes de mayo del año que viene, en Castilla-La Mancha habrá un presidente, que se llamará Emiliano García-Page y que pactará las reglas del juego y el Estatuto de autonomía con todos los partidos políticos”.
La portavoz regional socialista insistió en que las cosas cambiarán a partir de las próximas elecciones municipales y autonómicas del 24 de mayo. “Nosotros no haremos lo que estamos denunciando que hace Cospedal. No impondremos las reglas del juego sin hablar ni un minuto con nadie y sin buscar el consenso que siempre ha habido en esta materia”, dijo.
El Gobierno regional se mostró "satisfecho" por la decisión del Constitucional, y espera que Page reconozca que no tenía razón, según el consejero de Presidencia y Administraciones Públicas y portavoz del Ejecutivo, Leandro Esteban. Y el PP autonómico entiende que el fallo del TC es "un nuevo varapalo y un gran correctivo" al líder regional socialista. "Es evidente que la autonomía política de la comunidad autónoma y su consiguiente capacidad para legislar en los ámbitos de su competencia no queda empañada ni afectada siquiera por la reducción del número de miembros de la Cámara autonómica", remachó Carmen Riolobos, portavoz del partido en Castilla-La Mancha.
El Tribunal Constitucional (TC) ha desestimado por unanimidad el recurso de inconstitucionalidad que presentó el PSOE de Castilla-La Manchacontra la reforma del Estatuto de autonomía de la región, que fue modificado por el Gobierno de María Dolores de Cospedal para reducir el número de diputados autonómicos.