Uno de los temas indiscutibles que coparon la primera semana de campaña de las europeas –antes del cara a cara en TVE– fue la posibilidad de la gran coalición. Argumento utilizado históricamente por IU y UPyD, pero que adquirió un nuevo vuelo después de dos entrevistas: una a Miguel Arias Cañete y otra a Felipe González. Ninguno la descartaba en una situación de emergencia. "Si lo necesita el país", dijo el patriarca socialista. Al PSOE no le gustó nada (ni le vino bien) que el expresidente agitara este pañuelo en plena campaña, y ha intentado zanjar el debate negando que pueda producirse esa alianza con el PP. Esta mañana de nuevo fue preguntada la candidata, Elena Valenciano, quien respondió que no, que "no sería bueno de ninguna de las maneras". Sólo dejó una mínima puerta abierta: que cambie "mucho" la derecha española.
La vicesecretaria general contestó este jueves en Los desayunos de TVE. Mediada la entrevista, la conductora, María Casado, le preguntó qué hay "de cierto" del fin del bipartidismo y de la gran coalición. Respecto a lo primero, señaló que se verá el 25-M. "Yo no defiendo el bipartidismo, yo defiendo al PSOE, no entra dentro de mi tarea política defender el bipartidismo. Defiendo al PSOE, y creo que el PSOE es la mejor opción en este momento para España y para Europa, y por eso lo hago. Con respecto a lo siguiente [la gran alianza], ya veremos". Hace unos días, el propio expresidente del Gobierno reconoció que sus palabras habían generado un profundo malestar en su partido y se arrepintió de haberlas pronunciado, por "inoportunas". "No es que nos enfadáramos [con él] –apuntó Valenciano–. Como él también ha dicho, no hay un horizonte en absoluto de gran coalición en este país. La derecha necesita una alternativa de la izquierda. Lo que España necesita es una alternativa a la izquierda, y de ninguna de las maneras creo que sería bueno para este país un Gobierno de gran coalición. Mucho tendría que cambiar la derecha española para contar con el PSOE en coalición. En realidad lo que quieren es un Gobierno de derechas apoyado por el PSOE, y eso es desde luego lo que el PSOE no quiere".
Quien quiere esa entente es el Ibex 35, como reconocía la propia Valenciano este jueves en otra entrevista, en El Mundo. Las 35 grandes empresas del país tienen "vida propia". "Vas a comer o a cenar con cualquier gran empresario o banquero y te lo dicen, ven a [Alfredo Pérez] Rubalcaba como una persona de orden y están preocupados por el proceso catalán". La candidata, en esta entrevista, asume que González "se equivocó", pero "no" quiere una gran coalición. "Él habla desde arriba, se eleva siete metros por encima del suelo, habla como un estratega, pero la gran coalición no va a ser porque nadie en el PSOE la quiere".
Pensar en la gran coalición espanta a los socialistas, por mucho que sectores económicos, políticos y mediáticos, como relató infoLibre, estén remando para conseguirlo después de las generales de 2015, en caso de que el bipartidismo se desplomara y fuera complicado armar coaliciones estables. En el PSOE se interpreta que unirse al PP sería prácticamente su finfin, porque no lo apoyarían ni sus votantes ni, mucho menos, sus militantes.
Los Desayunos - Entrevista a Elena Valenciano
Durante la entrevista, aún siguieron coleando los comentarios machistas de Cañete, de los que sólo se disculpó pasados cinco días. Valenciano reiteró, como ayer hiciera en la Ser, que acepta su perdón, pero que el problema radica "en lo que piensa", no en lo que dijo. "El machismo no es una anécdota, no es un desliz, no es un error, es una forma de pensar" que ha hecho "muchísimo daño a las mujeres durante siglos", y en España eso se está "empezando" a revertir. "Y no vamos a consentir que un político de primera línea tenga y exprese ese pensamiento y pretenda representar a España ni en el Parlamento Europeo ni en la Comisión". El candidato del PP, dijo, se ha disculpado "de aquella manera", de forma "cicatera", porque se ha centrado en las formas, y ella cree que lo grave es "el fondo". La vicesecretaria general aprovechó para aclarar que no ha sido el PSOE quien ha hecho del machismo un eje de campaña, sino el PP, "por no haber rectificado y por no haber defendido a las mujeres". Los socialistas no tienen calculado cuánto les podría beneficiar el efecto Cañete. "Es imposible de medir. Pero las mujeres no deberían votar a quienes las desprecia". Eslogan que ayer lanzó desde su mitin en la Vall d'Hebron, en Barcelona, precisamente con Felipe González, Martin Schulz y Manuel Valls.
Una victoria del PP, "carta blanca" a sus recortes
¿Apoyará entonces el PSOE a Cañete como comisario? "Lo va a tener muy difícil. Veremos si se presenta", deslizó. La vicesecretaria general recordó que en la Eurocámara hay "muchas mujeres conservadoras que son feministas", que "no acepta que se piense y que se diga" que las mujeres son inferiores intelectualmente a los hombres. Hoy mismo, en la Ser, la candidata del Partido Verde Europeo a la Presidencia de la Comisión, Ska Keller, adelantó que su formación no apoyará al exministro como miembro del Ejecutivo comunitario.
Preguntada por si ayer también se equivocó el número dos de su candidatura, Ramón Jáuregui, al calificar de "incidente" el maltrato a la su entonces esposa del presidente del PSE, Jesús Eguiguren, convino que "desde luego" erró y que el propio exministro lo reconoció, porque la "violencia de género hay que conderla siempre, se produzca donde se produzca".
Valenciano cargó contra "el monoargumento" del PP, la herencia recibida, que ya ha "caducado", y advirtió de que una victoria del PP este domingo sería "darle carta blanca para seguir recortándolo todo", porque en otoño, para empezar, habría "una nueva vuelta de tuerca a la reforma laboral". "Por eso es muy importante que le digamos que hasta aquí hemos llegado" a Mariano Rajoy.
La candidata, además, condenó la agresión al vehículo en el que viajaba ayer Cristóbal Montoro en Vilanova i la Geltrú, Barcelona.
Uno de los temas indiscutibles que coparon la primera semana de campaña de las europeas –antes del cara a cara en TVE– fue la posibilidad de la gran coalición. Argumento utilizado históricamente por IU y UPyD, pero que adquirió un nuevo vuelo después de dos entrevistas: una a Miguel Arias Cañete y otra a Felipe González. Ninguno la descartaba en una situación de emergencia. "Si lo necesita el país", dijo el patriarca socialista. Al PSOE no le gustó nada (ni le vino bien) que el expresidente agitara este pañuelo en plena campaña, y ha intentado zanjar el debate negando que pueda producirse esa alianza con el PP. Esta mañana de nuevo fue preguntada la candidata, Elena Valenciano, quien respondió que no, que "no sería bueno de ninguna de las maneras". Sólo dejó una mínima puerta abierta: que cambie "mucho" la derecha española.