La vicepresidenta primera del Congreso, Celia Villalobos, echó este miércoles de la tribuna de oradores del Congreso al diputado de ERC Joan Tardà, quien previamente había llamado "impresentable" al ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, por el trato que el Gobierno da al catalán.
Durante su intervención en el debate de convalidación del real decreto sobre los derechos del fútbol y aprovechando la presencia de Wert en el hemiciclo, Tardà sacó a colación las palabras que el ministro había pronunciado previamente en una conversación informal con periodistas en los pasillos del Congreso. Tras debatir con CiU en la sesión de control sobre el recurso planteado por el Gobierno para reabrir el proceso de matriculación en Cataluña, el ministro ha señalado a que la situación del castellano en la enseñanza en Cataluña es comparable a la que vivía el catalán en otras épocas, en referencia a la dictadura franquista.
Tardà se refirió a este asunto en catalán y Villalobos le reclamó que se ciñera al tema que se estaba debatiendo, y dejando claro que no lo hacía por el uso del catalán porque Wert lo habla y estaba segura de que le había "entendido".
Fanático e ignorante
"No estamos dispuestos a este trato", protestó el diputado, mientras Villalobos le pedía que volviera "a la cuestión" y optaba por apagar el sonido de su micrófono. Pero esto no frenó a Tardà, que prosiguió llamado "impresentable, fanático e ignorante" al titular de Educación.
La vicepresidenta le llamó al orden por primera vez: "Señor Tardà, se ha acabado", sentenció, advirtiéndole de que su "indignación personal" no se puede traducir en "ofensas personales a ningún miembro de la Cámara ni del Gobierno" y pidiéndole que las retirara.
"Esto es impresentable. No se puede tolerar que se diga que el castellano recibe hoy en Cataluña el mismo trato que el catalán en el franquismo", ha añadido el diputado, pese a que Villalobos había silenciado su micro.
Esto es el parlamento nacional
De hecho, la vicepresidenta le avisó de que ninguna de las palabras que estaba pronunciando constaría en el Diario de Sesiones, le pidió que se fuera a su escaño, le llamó al orden por segunda vez, advirtiéndole de que la tercera supondría su expulsión del hemiciclo y le exigió que utilizara "un lenguaje más presentable".
"Señor Tardà, se acabó, estamos en el Parlamento nacional, en el Parlamento español. Haga usted el favor de no ofender a la gente", espetó al diputado, quien volvió a su escaño y recibió la solidaridad del portavoz de ICV, Joan Coscubiela, quien se quejó ante Villalobos desde su escaño.
ICV, PNV y CiU se solidarizan
Ante este gesto de apoyo, la vicepresidenta mandó callar a Coscubiela: "Esto no va con usted, puedo entender que le guste mucho el protagonismo. Guarde silencio", le dijo elevando el tono, unas palabras a las que Coscubiela respondió abandonando el hemiciclo. "Vaya a almorzar si le parece bien, está usted en su derecho de hacer lo que le dé la gana", le soltó la vicepresidenta, incidiendo en que el Congreso "es el Parlamento de la palabra y no de los gritos".
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También hubo otras diputadas que tuvieron gestos de apoyo a Tardà desde la tribuna, como la diputada del PNV, Isabel Sánchez Robles: "Cueste lo que cueste y pese a quien pese seguiremos viviendo y sintiendo en euskera y catalán", afirmó.
Minutos después, la diputada de CiU Carme Sayós se dirigió en catalán a Wert: "No se si lo que ha dicho ha sido una provocación o simplemente lo ha hecho por intereses electorales, pero es una grandísima barbaridad y usted lo sabe".
Villalobos la cortó para exigirle que volviera al tema del debate, pero ella prosiguió en lengua catalana, lo que llevó a la vicepresidenta a pedirle que, una vez que había tenido "su momento para hablar en su lengua materna" volviera a usar el castellano.
La vicepresidenta primera del Congreso, Celia Villalobos, echó este miércoles de la tribuna de oradores del Congreso al diputado de ERC Joan Tardà, quien previamente había llamado "impresentable" al ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, por el trato que el Gobierno da al catalán.