José Ignacio Wert no se cansa de alimentar polémicas. La última (de un largo listado) ha sido la de las becas. Tras encontrarse con la oposición de los rectores, de las comunidades autónomas y de su partido, se vio obligado a recular parcialmente y dejar en un 5,5 la nota necesaria para conseguir la gratuidad de la matrícula universitaria. Apenas dos días después, este sábado, el ministro de Educación, se atrevió con otro mensaje controvertido: las becas, dijo, no edeben distribuirse "como limosna", sino como una "contribución de recursos que la sociedad hace con justa correspondencia".
Wert reconoció, en un acto organizado por el PP en Alcalá de Henares (Madrid) que clausuró María Dolores de Cospedal, que su relativo paso atrás en sus intenciones de endurecer los requisitos académicos para la obtención de becas, obedeció a las presiones externas que le llegaron en las últimas semanas. El ministro dijo haber "acomodado la regulación a observaciones de sentido común tanto de la CRUE [Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas] como de las comunidades autónomas, pero al final el espíritu tiene que ser que esos recursos escasos no se distribuyan en forma de limosna". Además, tildó de "demagógico" el discurso de los que oponen la "exigencia" y el "rendimiento" a la equidad. Las becas, señaló, son posibles por la contribución de los ciudadanos, así que los alumnos deben corresponder con un "rendimiento aceptable".
"Sería inequitativo no tener en cuenta ese rendimiento y distribuir los recursos sin atender al uso que hacen de ellos los estudiantes, porque dejaríamos sin muchos recursos a otros que se están esforzando. Una sociedad que no tiene herramientas para medir los recursos está siendo falsamente equitativa", aseguró.
El ministro ha cedido, pero no totalmente, porque mantiene la exigencia de un 6,5 de nota para acceder a las becas de mayor cuantía, y sólo se mantiene en el 5,5 para las que cubren únicamente las tasas de matrícula.
Más allá de las becas, Wert trató de vender su Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE), que ha encontrado el rechazo absoluto de toda la comunidad educativa y que le ha costado incluso una huelga. Cargó contra las fuerzas políticas con las que se ha reunido para discutir con ellas el proyecto de ley, por hablar desde un "apriorismo ideológico total". "La mayor parte del tiempo de ese diálogo se ha dedicado a explicar que la ley no dice lo que ellos dicen que dice la ley, y no por una mala interpretación sino, fundamentalmente porque es muy difícil saber lo que dice la ley sin haberla leído".
Cospedal: "Es una delicia escuchar al ministro"
Tras Wert, clausuró el acto la secretaria general del PP. Lo hizo con un discurso centrado en la educación, en la defensa de la LOMCE. Y sólo al final mostró su respaldo al ministro: "Es una delicia escucharle por lo claras que tiene las cosas y lo claro que tiene la importancia de la educación y la importancia de tener el mejor modelo educativo". Cospedal llamó a Wert "valiente" por haber impulsado una reforma "inaplazable", de "calado y profundidad", "la más importante" de todas las iniciadas por el Gobierno de Mariano Rajoy desde que llegó a la Moncloa, aunque de ella no se vean sus frutos "inmediatamente".
Cospedal dejó ver una visión edulcorada de la ley. En el argumento de siempre: la necesidad de poner freno al "25%" de abandono escolar. De modo que España "no puede seguir por el mismo camino" y debe "cambiar de modelo". No comentó nada de la mayor fortaleza que se confiere a la Religión, de las reválidas o de la concepción segregadora.
La número dos de Rajoy rechazó que el Ejecutivo esté pensando en "eliminar la educación pública". "Estamos trabajando para mejorar el modelo educativo y eso empieza por la mejora de la educación pública". También avaló el rediseño de las becas: "En el pasado se ha confundido la igualdad de resultados con la igualdad de oportunidades, y no es lo mismo. Si somos capaces de tener el mejor modelo de educación pública, así se garantiza la igualdad de oportunidades. El centro de la reforma es el alumno. Que a cada uno nos midan como somos".
Ver másWert cede a bajar la nota para acceder a una beca universitaria al 5,5
El PSOE reitera la exigencia de que la 'ley Wert' se retire
Todo lo más que se aproximó la secretaria general a otros temas fue para defender el camino emprendido por el presidente. Reiteró que hace unos meses se hablaba de los problemas de la economía, de la posibilidad del rescate... "Hemos demostrado en año y medio que somos un país que sabe hacer sus reformas nosotros solos, y que sabemos ajustarnos el cinturón solos, sin que nadie nos lo diga, y que somos una sociedad madura e inteligente que sabemos lo que tiene que hacer". También recalcó que el líder del Gobierno ha conseguido en el Consejo Europeo que se apliquen "desde ya" los 1.900 millones de euros que recibirá España para paliar el desempleo juvenil.
Desde Santillana del Mar (Cantabria), replicó el secretario de Organización del PSOE, Óscar López. De nuevo, exigió la retirada de la ley Wert, a la que hay que sumar "la subida de tasas y el recorte de becas", porque es "retroceder en derechos y sobre todo en igualdad de oportunidades".
José Ignacio Wert no se cansa de alimentar polémicas. La última (de un largo listado) ha sido la de las becas. Tras encontrarse con la oposición de los rectores, de las comunidades autónomas y de su partido, se vio obligado a recular parcialmente y dejar en un 5,5 la nota necesaria para conseguir la gratuidad de la matrícula universitaria. Apenas dos días después, este sábado, el ministro de Educación, se atrevió con otro mensaje controvertido: las becas, dijo, no edeben distribuirse "como limosna", sino como una "contribución de recursos que la sociedad hace con justa correspondencia".