Tras un verano convulso a cuenta de las devoluciones de menores a Marruecos, el consumo de carne o la regulación de precios del alquiler, el inicio del curso político no ha rebajado las tensiones en la convivencia de los socios de coalición. Ni la ley de vivienda ni otras medidas trascendentales como los presupuestos o la reforma laboral han visto aún fumata blanca, pero es la factura de la luz y el debate en torno a cómo poner freno a su precio lo que ha incendiado nuevamente la relación política entre PSOE y Unidas Podemos.
A cuenta de la tarifa eléctrica, que ha llegado a pulverizar varios récords históricos alcanzando los 140 euros el megavatio hora, el intercambio de críticas ha sido una constante en los últimos días entre socialistas y morados. Desde Unidas Podemos han acusado a la vicepresidenta Teresa Ribera de "alinearse" con los intereses del oligopolio eléctrico. Tanto la titular de Transición Ecológica como el propio presidente del Gobierno han señalado que las propuestas de sus socios se encuentran fuera de la ley. Y varios portavoces de Podemos han llegado a animar a la ciudadanía a organizar protestas en la calle.
Díaz pide "cuidar la coalición"
En medio del fuego cruzado, la propia líder de Unidas Podemos en el Gobierno y vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, parece empeñada en colocarse el casco azul de la concordia. “Hay que cuidar la coalición, se pueden mejorar los mecanismos de convivencia”, aseguró la también ministra de Trabajo en una entrevista este viernes en radio Euskadi. Antes, en otra entrevista con Julia Otero en Onda Cero, Díaz se había desmarcado del llamamiento hecho desde Podemos a salir a las calles contra el precio de la luz: “los gobiernos gobiernan. Y para eso estamos nosotras, para dar soluciones a la ciudadanía”, manifestó.
No esconde Yolanda Díaz, sin embargo, que son muchas las áreas en las que existen discrepancias con el partido socialista, especialmente en el "ritmo de aplicación de las medidas". Y por eso muestra su especial preocupación por el precio de la factura de la luz, "un enorme problema para miles de seres humanos". En ese sentido, Díaz defiende la propuesta de limitación de precios de la energía hidráulica y nuclear planteada por Unidas Podemos y rechazada por Pedro Sánchez, y recuerda que “es legítimo que la ciudadanía y los medios de comunicación conozcan cuáles son las diferencias que tenemos, pero para constatar las diferencias no hay que elevar la voz".
En lo que respecta a su departamento, la semana ha estado repleta de buenas noticias para Yolanda Díaz. La subida del salario mínimo interprofesional que ella misma y desde Unidas Podemos vienen defendiendo desde principios de año, por fin se ha concretado. El propio presidente oficializó el miércoles que esa actualización será “inmediata”, tal y como exigía el ministerio de Trabajo para este comienzo de curso y después de una larga batalla política con Economía, partidaria de aplazar la subida.
En gran medida esa subida del SMI va de la mano de la otra buena noticia para el ministerio de Trabajo de esta semana: los datos de creación de empleo baten récords y convierten a este pasado mes de agosto en el mejor de toda la serie histórica con 82.583 desempleados menos. Tanto la vicepresidenta Nadia Calviño como el propio Pedro Sánchez habían manifestado en varias ocasiones que era conveniente retrasar la subida del salario mínimo hasta recuperar datos de empleabilidad similares a antes de la pandemia, algo que con las cifras de esta semana ya se logra. Estos dos éxitos del ministerio de Trabajo se han convertido, de hecho, en la principal bandera del presidente Sánchez para impulsar una hoja de ruta basada en una “recuperación justa y para todos”, tal y como afirmó este miércoles en la conferencia inaugural del curso político.
UP exige al PSOE medidas “inmediatas” para parar la subida de la luz
Unidas Podemos se prepara para apretar al PSOE con los Presupuestos como última gran batalla de la legislatura
Mientras, Unidas Podemos sigue a la carga con una amplia batería de medidas para lograr bajar el precio medio diario de la electricidad, que durante toda la semana ha marcado récords históricos, superando los 140 euros por megavatio hora (MWh). Los morados emplazan a su socio de Gobierno a actuar “cuanto antes” para paliar esta subida y por ese motivo han registrado una Proposición de Ley en el Congreso para crear una empresa pública “que ponga al servicio del interés general la fuerza cinética del agua”. En este sentido los morados están utilizando dos vías para presionar a su socio de gobierno: el llamamiento a la movilización ciudadana y la presentación de iniciativas en el Congreso. Convencidos de que, en este último caso, el bloque de la investidura se alineará con su postura.
Fuentes del partido aseguran a infoLibre que la presión no cesará hasta que se tomen medidas concretas, aunque evitan hipotecar su apoyo a los Presupuestos Generales del Estado a esta cuestión. En ese sentido, Unidas Podemos plantea también el establecimiento de un precio máximo para la energía hidroeléctrica y el establecimiento de un precio fijo para la energía nuclear, al estilo de países como Francia.
Pero todo parece indicar que ni Ribera ni Sánchez están por la labor. “Quien diga que hay alguna medida que nos pueda permitir cambiar las cosas de un día para otro, con una publicación en el BOE de algo mágico, o bien no tiene ni idea de lo que está hablando o bien está haciendo demagogia barata", ha asegurado la vicepresidenta para la Transición Ecológica repetidamente en relación a las propuestas de su socio. Una postura que ratificó en la comparecencia celebrada esta misma semana en el Congreso, en la que descartó intervenir el mercado eléctrico alegando que va en contra de la normativa europea. El propio presidente del Gobierno afirmó el miércoles, delante de sus socios, que su Ejecutivo “siempre actuará dentro del marco regulatorio europeo”.
Tras un verano convulso a cuenta de las devoluciones de menores a Marruecos, el consumo de carne o la regulación de precios del alquiler, el inicio del curso político no ha rebajado las tensiones en la convivencia de los socios de coalición. Ni la ley de vivienda ni otras medidas trascendentales como los presupuestos o la reforma laboral han visto aún fumata blanca, pero es la factura de la luz y el debate en torno a cómo poner freno a su precio lo que ha incendiado nuevamente la relación política entre PSOE y Unidas Podemos.