¿Qué pasó?
“Buenas tardes, damas y caballeros. Es un placer para mí poder presentaros la magia de la televisión”. Esa frase, pronunciada por el entonces actor y presentador británico Leslie Mitchell aquel mes de agosto de 1936, marcaría un antes y un después en la historia de la comunicación. La radio quedaba relegada a un segundo plano ante una pequeña pantalla que explotaba a la perfección la fuerza de la imagen. Así, ese verano de la década de 1930, con la Guerra Civil española recién comenzada, se estrenó la primera programación en directo de la televisión.
¿Cuándo pasó?
Al igual que en el caso de la fotografía, la historia de la pequeña pantalla comenzó con la búsqueda del dispositivo adecuado para poder transmitir las imágenes captadas. En este sentido, es necesario recalcar dos acontecimientos clave antes de 1936: el diseño del disco de Nipkow en 1884, que permitiría en 1926 al inventor escocés John Logie Baird transmitir la primera señal a más de 700 km de distancia –entre Londres y Glasgow– utilizando una línea telefónica, y el desarrollo del tubo de rayos catódicos por el científico Joseph Thomson en 1895, aunque este no se pudo implementar en las televisiones hasta bien entrado el siglo XX.
Sin embargo, a pesar de que las primeras imágenes televisivas ya habían sido emitidas, el 26 de agosto de 1936 comenzó a funcionar el negocio de la televisión tal y como lo conocemos en la actualidad. Ese día la BBC emitió por primera vez Here's looking at you!, el primer programa en directo de la historia del medio de comunicación por excelencia durante los últimos cincuenta años. Conducido por el presentador británico Leslie Mitchell, el show de variedades montado apresuradamente se emitió dos veces al día durante diez días seguidos desde los estudios de Alexandra Palace.
¿Quiénes fueron sus protagonistas?
Con un presupuesto de 300 libras –413 euros al cambio–, el programa contó con la participación del grupo musical The Three Admirals; la domadora Miss Lutie con su caballo Pogo; los bailarines de claqué Carol Chilton y Maceo Thomas; y la cantante Helen McKay, que puso voz a la sintonía de Here's looking at you!
Por aquel entonces la BBC, que había apostado por la radiodifusión desde su fundación en 1922, ya era un servicio público. A través de una Royal Charter expedida el 20 de diciembre de 1926, se fijaron las líneas que garantizarían su “independencia en todos los asuntos relativos al contenido, los tiempos y la manera en que estos son utilizados, y en la gestión de sus asuntos”, rezaba, y reza, el decreto. Así, la compañía quedaría lejos del control comercial o político.
¿Qué fue de sus protagonistas?
Mitchell continuó su carrera en la pequeña pantalla durante muchos años, además de trabajar como escritor freelance en varias ocasiones y especializarse en el sector de la publicidad desde su viaje a Estados Unidos. El presentador murió en Londres a los 80 años después de toda una vida dedicado a la televisión.
En cuanto a la BBC, su coronación definitiva como pionera en la programación diaria se produjo el 2 de noviembre de 1936 ante la atenta mirada cuatro centenares de personas, fecha oficial en la que arrancó el servicio de televisión de la BBC. Con una programación regular –noticiario, que presentaba Mitchell, el tiempo, películas y espectáculos para el entretenimiento de la población inglesa– el servicio público de televisión británica ha perdurado, sin tener en cuenta el parón durante la Segunda Guerra Mundial, hasta nuestros días sin apenas publicidad y compitiendo con nuevas compañías privadas. Actualmente cuenta con una audiencia combinada –información y entretenimiento– de 308 millones de personas semanales, según anunció en mayo BBC Global Audience Measure.
¿Por qué fue importante?
La emisión de agosto de 1936 supuso el inicio de la televisión tal y como la conocemos en la actualidad, con una programación diaria entretenida y que hacía las delicias de los espectadores. Tal fue el éxito de la fórmula que tres años después, en 1939, Estados Unidos exportó el modelo británico a su pequeña pantalla.
¿Qué pasó?