Canco Rodríguez: "Mi ex se olió que íbamos a dejarlo así que me animó a que tuviera un perro"
Los animales se convierten en una parte indispensable de la vida de quienes deciden hacerles un hueco en su casa. Así es cómo lo ve el actor Canco Rodríguez, que considera a su perro Ndugu uno más de su familia. “A mí no me gusta decir ‘mascota’, prefiero familia porque no soy su poseedor, sino que nos acompañamos cada día. Para mí es como un hermano”, explica a infoLibre.
Ndugu, un “mil leches” mezcla de Podenco y Pastor Alemán, tiene ya 14 años y lleva desde que era un cachorro de pocos meses a su lado. Los tíos de Rodríguez, al que hemos podido ver en Cuerpo de Élite o como "El Barajas" en Aída, tuvieron una camada de varios perros y él se quedó con “el más feíllo”. Tomó la decisión cuando se encontraba en mitad de una separación sentimental. Con humor, nos cuenta: “Mi ex se olía que íbamos a dejarlo y me animó a hacerlo, algo así como ‘venga, quédate con una responsabilidad importante en tu vida’”.
El nombre tan característico de su perro se le ocurrió al ver la película El Club de los Suicidas. Según él recordaba, así se llamaba un niño apadrinado que aparecía en el filme pero, pasados los años, descubrió que era 'Ngutu'. “Así que en realidad me lo inventé”, confiesa divertido. Más tarde se dio cuenta de que en África hay un músico muy conocido que se llama así y, a lo largo de la entrevista, descubrimos que es el segundo nombre del batería Leon Ndugu Chancler quien, entre otros muchos hitos marcando el ritmo para multitud de grandes artistas, tocó en el clásico Billy Jean de Michael Jackson.
“Mi perro me ha salvado la vida y yo estoy en deuda con su raza. Tengo en mente que, el día en que se marche, que no creo que sea dentro de muchos años porque ya es mayor y hay que hacerse a la idea, me gustaría devolver el favor y salvar la vida yo a otro perro”, explica Rodríguez.
“Ndugu me obliga a hacer cosas cuando el mundo va a la contra: me obliga a pasear, a tener tiempo para mí (más allá de las responsabilidades que tenga en ese momento), me obliga a cambiar el foco de mi ombligo hacia él, a mancharme las manos de barro”, explica. Y añade que, si no fuera por su perro, no saldría a pasear, ni llevaría una pelota siempre en la mochila. “Mi vida habría sido completamente aburrida y creo, además, que está mejorando la vida de mi hijo, que tiene dos años y está aprendiendo a convivir con un animal en casa”, asegura.
Canco Rodríguez suele viajar mucho por su trabajo. Además de en la pequeña y gran pantalla, ha protagonizado el musical Hoy no me puedo levantar y ahora compagina sus actuaciones en The Hole X y el espectáculo El Rock and Roll ha muerto. Ndugu se queda en ese tiempo con familiares o amigos suyos, lo lleva haciendo “desde que era un cachorro”.
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Admite el actor, eso sí, que esto no le provoca “un gran dolor” porque sabe que está bien cuidado, pero que le da algo más de pena en vacaciones, cuando se van durante tres semanas o un mes. Ndugu se queda en un sitio con piscina “que le gusta mucho”, pero más le gustaría a Rodríguez poder viajar con él. “Todavía vivimos en la prehistoria y queda muchísimo para que acepten perros en el transporte hoteles, tiendas, restaurantes…”, lamenta.
Como suele suceder, Ndugu se dedica, alguna vez que otra, a hacer sus travesuras. Es un perro y es lo normal. Una de las cosas que más gracia le hace a Rodríguez es su ingenio para conseguir comida “incluso cuando está todo guardado”. “Lo hace con total descaro. Tiene un sistema elaboradísimo para mover cosas y hacerse con comida cuando está solo en casa”, nos explica mientras le hace, además, una recomendación a Tom Cruise: “Tendría que venir a observarle para su próximo filme”.
Sobre aquello de “cuánto más conozco a las personas, más quiero a los perros”, el actor de The Hole X no duda: “El ser humano es un parásito, lo demuestra cada día, a pesar de que hay personas bellísimas, pero el mundo va hacia un final apocalíptico. Yo no me imagino que los animales fueran capaces de tener un concepto de vida como este”, termina.